champouirau, chapurriau, chapurriat, chapurreau, la franja del meu cul, parlem chapurriau, escriure en chapurriau, ortografía chapurriau, gramática chapurriau, lo chapurriau de Aguaviva o Aiguaiva, origen del chapurriau, dicsionari chapurriau, yo parlo chapurriau; chapurriau de Beseit, Matarranya, Matarraña, Litera, Llitera, Mezquín, Mesquí, Caspe, Casp, Aragó, aragonés, Frederic Mistral, Loís Alibèrt, Ribagorça, Ribagorsa, Ribagorza, astí parlem chapurriau, occitan, ocsitá, òc, och, hoc
lunes, 11 de junio de 2018
PAC , HIJ
hiladillo. Veta, cinta de alpargatas; trenzadera.
[hordio]. V. tuerta.
[huechiqué, pasallá]. V. llamar a animales. / agüelo sebeta wesque
iche, icha, ichos, ichas. Ese, esa, esos, esas. / eixe, eixa, eixos, eixes,
[implaz]. V. güen implaz, de su.
[incensallo]. V. encensallo. / ensenall
inferned. En los tornos o molinos de aceite, los depósitos de las morgas o residuos de la elaboración, substancias pastosas o semilíquidas negras y mal
olientes. Depósitos en que se sedimenta el alpechín o morgas. / oliassa , sansa
iña, iñor. Señora, señor. V. también siña.
jazco. Astringente, áspero, gusto desagradable. Os aliróns, os arañóns (frutos
del espino blanco), el membrillo y otras frutas verdes tienen gusto jazco, que
no es lo mismo que agrio. / aspre com una serba verda
jenzo. Ajenjo; comparativo de cosa muy amarga. Icho ye como el jenzo, eso es
muy amargo. / amarc o amarg com la fel
[¡jibar!]. V. ¡jibo!
jibáu. Iche moced ye un jibáu, ese chico es un tuno, un pillo, uno que tiene suerte, que le ha correspondido una gracia, etcétera.
mocete , moced , mesache , vino
¡jibo!, ¡jibar! Exclamación que indica sorpresa agradable, dolor inesperado.
Quiere parecerse a ¡hola! muchas veces, pero tiene más analogía con otra
palabra que... no debemos escribir.
joriar. Airearse, secarse una cosa. Borao indica jorear. / orear
jovar. Ajuar, la ropa de la dote que se da a la novia.
jubo. Yugo. El de los bueyes no tiene colleras (mullidos o almohadillados). En
el gabachillo se pone el trascal y en el trascal (trasca) se apoya la clavija,
que se introduce en uno de los agujeros del timón. Abocador y juñidera son
correas que sujetan el yugo a las caballerías.
jufre. Azufre. / sofre
[juñidera]. V. jubo.
lambreño. El animal de poca tripa o vientre; el delgado, estrecho y corredor. / ver jota morena lambreña vs morena membreña
laminuría. Golosina. Se usa más en plural y significando cosas apetitosas para
comer y no solo cosas dulces. laminurías. / llaminadures català , dolsaines , golut, goluda, laminero , llépol , llépola
langarto. Lagarto. Si tiene dos colas (cola bifurcada, fenómeno que alguna vez
se observa), la ignorancia y la superstición le atribuyen propiedades fantásticas: una, el escribir, sobre arena o ceniza, el número agraciado con el premio mayor de la lotería de Navidad. Ver sargantana.
lenera. Piedra de superficie fina por erosión; cantera en plano inclinado; roca viva en contacto con los caminos sobre la cual se puede andar y, mejor, deslizarse. / lluastra ?
leva. Porción de tierra muy mojada con muchas raíces de plantas que, a manera de red, la sujetan; tasca; en las huertas, porción de tierra y raíces de gramíneas para cerrar el paso al agua por regatos y pequeñas acequias. / per a tapá la boquera, les boqueres
liastra. Prolongación espinosa de las semillas o granos de trigo y de cebada en
la espiga.
liendrera. Lendrera.
litón, litonero. Fruto y árbol, almez.
Turrón de litóns, frutos machacados en el almirez con hueso y todo, embutida la pasta en cañas; seco el turrón se rompe la caña y queda un cilindro de esa pasta.
[litonero]. V. litón.
llamar a animales. Sancho, sancho al conejo; gulo, gulo al cerdo; monina, quirrina a la cabra; michino, michina al gato; bis, bis, bis al gato; bico, toma al burro; ¡bico... choo! 25 parar al burro; tita, tita a la gallina; tu, ti, tui a la gallina;
quis, quis al perro; huechiqué, pasallá a las caballerías.
lucera. Trozo de madera de boj o de pino resinoso, que arde fácilmente y que
sirve para alumbrado en cocinas y departamentos de casas montañesas. Alterna con el candil en muchas ocasiones. / tea de melis
lulo. Semilla, grano de algunos frutos, especialmente de almendras, nueces, alubias, habas, guisantes (bisaltos), etc. / llaó , ameles, anous, fesols, fabes, pésols,
25. En entrada propia consta la expresión bico, ¡choo! como la utilizada para hacer que el burro detenga su marcha. Así aparece también en Refranes; en el Vocabulario escribía aquí ¡bisó...choo! / sooooo
jueves, 7 de enero de 2021
Lo Camí, XI.
XI.
Roc, lo Moñigo, va dixá de admirá y voldre a Quino, lo Manco, cuan se va enterá de que este habíe plorat hasta fartás lo día que se va morí la seua dona. Perque Quino, lo Manco, ademés de la ma, habíe perdut a la seua dona, la Mariuca. Y no siríe perque no lay avisaren. Mes que dingú la Josefa, que estabe enamorada dell, y lay refregabe per los nassos a la mínima oportunidat, y moltes vegades sense esperá la oportunidat.
- Quino, pénsau. Mira que la Mariuca está tíssica perduda.
Quino, lo Manco, se sulfurabe.
- ¿Y a tú qué collóns te importe, si se pot sabé? - díe.
La
Josefa tragabe bilis y lo dixáe. Per la nit plorabe, a soles, a la
seua alcoba, hasta amerá lo cuixí y se jurabe no torná a
intervindre al assunto. Pero en son demá se olvidabe de la seua
determinassió. Li agradabe massa Quino, lo Manco, pera abandoná lo
campo sense cremá lo radé cartucho. Li agradabe perque ere tot un
home: fort, serio y cabal. Fort, sense sé un animal com Paco, lo
ferré; serio, sense arribá al esceptissisme, com Pancho, lo
Sensedéu, y cabal, sense sé un san, com don José, lo mossen, u
ere.
En fin, lo que se diu un home equilibrat, un home que no
pecabe ni per exés ni per defecte. Quino, en realidat, no creíe en
la tuberculossis. Lo món, pera nell, estabe ple de prims y gorts.
Mariuca ere prima, com primes eren doña Lola y doña Irene, les
Pestetes y Andrés, lo sabaté. Y ell ere gort, com u ere tamé Cuco,
lo factó. Pero assó no volíe di que los atres estigueren doléns y
ells sanos. De la Mariuca díen que estabe tíssica desde que va
naixe, pero ahí la teníen als seus vintytrés añs, fresca com una
flo.
Quino se va arrimá an ella sugestionat mes que enamorat. La seua natural tendensia lo inclinabe a les femelles gordetes, de formes calentes, caigudes per lo seu propi pes, y exuberáns. Concretamen, cap a dones com la Josefa, pretes, denses y apelmassades. Pero Quino, lo Manco, reflexionabe aixina: "A les siudats, los siñorets se casen en les femelles flaques. Algo espessial tindrán les primes cuan los siñorets, que tenen estudis y talento, les busquen aixina". Y se va arrimá a la Mariuca perque ere prima. Als pocs díes, sí que se va encaprichá. Se va enamorá segamen de ella perque teníe la mirada trista y sumissa com un corderet y la pell blavosa y clarejabe com la porcelana. Se van entendre. A la Mariuca li agradabe Quino, lo Manco, perque ere la seua antítessis: massís, vigorós, corpulén y en uns ulls aguts y punchadós com a bisturís.
Quino,
lo Manco, va dessidí casás y los veíns se li van fotre damún:
"La Mariuca está delicada". "La Mariuca está
dolenta". "La tissis es mala compañía".
Pero
Quino, lo Manco, va saltá per damún de tot y un matí relluén de
primavera se va presentá a la porta de la iglesia embutit a un traje
blau y en un mocadó blang lligat al coll. Don José, lo mossen, que
ere un gran san, los va beneí. La Mariuca li va ficá la aliansa al
dit anular, de annulus, lo del anell, de la ma zurda, perque Quino,
lo Manco, teníe secsionada la ma dreta.
La Josefa, a pesá de tots los intentos, no va pugué amargáli la lluna de mel. La Josefa se va proposá que li pesare tota la vida sobre la consiensia la sombra de la seua desgrassia. Pero no u va conseguí. A la iglesia, a la primera amonestassió, va saltá com una pantera, cridán, mentres corríe cap al altá de san Roc y ficán al san per testigo, que la Mariuca y Quino, lo Manco, no se podíen casá perque ella estabe tíssica. Va ñabé, primé, un revol y, después, un silensio fet de sen silensios, al templo. Pero don José coneixíe milló que ella los impediméns y tot lo dret Canónic.
- Filla - li va di -, la ley del siñó no prohibix als doléns contraure matrimoni. ¿U has entés?
La Josefa, desesperada, se va dixá caure sobre les grades del presbiterio y va escomensá a plorá com una loca, mesánse lo pel y demanán compassió. Tots la compadíen, pero ressultabe inoperán fabricá, en un momén, un atre Quino. Desde los bangs del fondo, aon se assentaben los homens, lo Manco sonreíe tristemen y se donabe cops amistosos en lo muñó a la barbilla. La Pesteta gran, al vore que don José dudabe, sense sabé quín partit pendre, se va adelantá hasta la Josefa y la va traure de la iglesia, agarránla compassivamen per les axiles. (La Pesteta gran va pretendre, después, que don José, lo retó, diguere un atra missa en atensió an ella, ya que entre traure a la Josefa de la iglesia y aténdrela un rato al atrio se li va passá lo Sanctus. Y ella afirmabe que no se podíe quedá sense missa per fé una obra de caridat, y que alló no ere just, ni raonable, ni lógic, ni moral y que se la minjaben per dins los remordiméns y que ere la primera vegada que li passabe alló a la seua vida... A dures penes don José va lográ apassiguála y tornáli la seua inestable pas de consiensia). Después va continuá lo san sacrifissi com si res, pero al domenge siguién no va faltá a missa ni Pancho, lo Sensedéu, que se va colá subreptissiamen al coro, detrás de lo armonio. Y lo que passe. Aquell día, don José va lligí les amonestassións y no va passá res. Al pronunsiá lo mossen lo nom de Quino va eixí un suspiro aufegat del bang que ocupabe la Josefa. Pero res mes. Pancho, lo Sensedéu, va di, al eixí, que la piedat ere inútil, un traste, que an aquell poble no se traíe res en llimpio sén un bon creyén y que, per tan, no tornaríe a patejá la iglesia.
Lo gros va passá durán lo refresco lo día de la boda, cuan dingú pensabe pera res en la Josefa. Que dingú pensare en ella potsé fore lo motiu que la va espentá a cridá la atensió de aquella bárbara manera. De totes maneres va sé alló una fosca y dolorosa contingensia. Lo seu crit se va sentí perfectamen desde lo corral de Quino, lo Manco, aon se reuníen los convidats. Lo crit proveníe del pon y tots van mirá cap al pon. La Josefa, tota despullada, estabe pujada al pretil, de cara al riu, y mirabe la fiera corrén en los ulls fora de les cassoletes. Tot lo que sels va ocurrí a les dones pera evitá la catástrofe va sé cridá, ficá los ulls com a plats, y desmayás. Dos homens van apretá a corre cap an ella, segóns díen pera aguantála, pero les seues dones los van maná agramen tirás cap atrás, perque no volíen que los seues homens veigueren de prop a la Josefa en pilota picada. Entre estes dudes, la Josefa va torná a cridá, va eixecá los brassos, va ficá los ulls en blang y se va aviá a la fosca corrén del Chorro. Van acudí cap allí tots menos los novios. Al poc tems va torná a la taberna lo juez.
Quino, lo Manco, li díe en eixe momén a la Mariuca: - Eixa Josefa es una burra.
- Ere...- va corregí lo juez.
Per aixó van sabé la Mariuca y Quino, lo Manco, que la Josefa se habíe matat.
Pera enterrála al sementeriet apegat a la iglesia van ñabé los seus mes y menos, pos don José no se aveníe a donáli entrada al fossá a una suissida y no u va consentí sense antes consultáli al ordinari. Al final van arribá notíssies de la siudat y tot se va arreglá, pos, per lo vist, la Josefa se habíe suissidat en un estat de enajenassió mental transitori.
Pero ni la sombra de la Josefa va valé pera avinagrá les mels de Quino al seu viache de bodes. Los novios van passá una semana a la siudat y de tornada li va faltá tems a la Mariuca pera anunsiá als cuatre vens que estabe preñada.
- ¿Tan pronte? - li va preguntá la Chata, que no se explicabe cóm unes dones se quedaben preñades gitanse una nit en un home y datres no, encara que se gitaren en un home totes les nits de la seua vida.
- Míratela esta. ¿Qué té la cosa de particulá? - va di la Mariuca.
Y la Chata va mastegá una palabrota per dins.
Lo
prossés de gestasió de la criatura no va sé normal. Tal com se li
abultabe la pancha a la Mariuca se li afilabe la cara de una manera
alarmán. Les dones van escomensá a murmurá que la chica no
aguantaríe lo parto. Lo parto sí quel va aguantá, pero se va quedá
al sobreparto. Va morí tíssica a la semana y mija de criá y va sé
als sing mesos justos de suissidás la Josefa. Les comares del poble
van escomensá a explicás entonses la pressa de la Mariuca per a
pregoná lo seu estat, encara abáns de apeás del tren que la va
portá de la siudat. Quino, lo Manco, segóns díen, va passá la nit
sol, plorán jun al cadáver, en la chiqueta ressién naixcuda als
brassos y acarissián tímidamen, en lo retortigat muñó, la inerte
melena rubia de la morta.
La Pesteta gran, al enterássen de la
desgrassia, va fé este comentari:
- Aixó es un cástic de Deu per habés minjat lo cocido abáns de les dotse.
Se
referíe a lo del naiximén prematuro, pero l´ama de don Antonino,
lo marqués, teníe raó al comentá que seguramen no ere alló un
cástic de Deu, ya que la Irene, la Pesteta menuda, se habíe minjat
no sol lo cocido, sino lo caldo tamé abáns de les dotse, y no li
habíe passat res. En aquella época, Daniel, lo Mussol, sol teníe
dos añs, y cuatre Roc, lo Moñigo. Sing añs después van escomensá
a visitá a Quino de tornada del bañ a la Badina del Inglés, o de
peixcá cangrejos o madrilles. Lo Manco ere tot generosidat y los
donabe una tassada de sidra de barril per una perra chica. Ya
entonses la tasca de Quino anabe de capa caiguda. Lo Manco tornabe
les lletres sense pagá y los proveedós li negaben la mercansía.
Gerardo, lo Indiano, lo va afiansá varies vegades, pero com no vée
en Quino cap propósit de enmendás, passats uns mesos lo va abandoná
a la seua sort. Y Quino, lo Manco, va escomensá a aná de tomb en
tomb, de mal a pijó. Assó sí, ell no perdíe les ganes de charrá
y continuabe regalán lo poc que li quedabe.
Roc, lo Moñigo,
Germán, lo Tiñós, y Daniel, lo Mussol, solíen assentás en ell al
bang de pedra de la carretera. A Quino, lo Manco, li agradabe charrá
en los chiquets mes que en los grans, potsé perque ell, a fí de
cuentes, no ere mes que un chiquet gran tamé.
A vegades, al
llarg de la conversa, ixíe lo nom de la Mariuca, y en ell lo record,
y a Quino, lo Manco, se li ameraben los ulls y, pera dissimulá la
emossió, se pegabe cops en lo muñó a la barbilla. En estos casos,
Roc, lo Moñigo, que ere enemic de llágrimes y de sentimentalismes,
se eixecabe y coláe sense di res, emportánse als dos amics cusits
als pantalóns. Quino, lo Manco, los mirabe tot parat, sense entendre
may lo motiu que impulsabe als sagals pera marchá tan de repén de
la seua vora, sense doná cap raó.
Quino, lo Manco, may se va vanagloriá en los tres menuts de que una dona se haguere matat despullada per nell. Ni va aludí an aquella contingensia de la seua vida. Si Daniel, lo Mussol, y los seus amics sabíen que la Josefa se habíe aviát en pilota al Chorro desde lo pon, ere per Paco, lo ferré, que no dissimulabe que li habíe agradat aquella dona y que si ella haguere volgut, siríe, an estes altures, la segona mare de Roc, lo Moñigo. Pero si ella va preferí la mort que lo seu enorme pitral y lo seu pel roch y risat, que se u minjare en lo seu pa. Lo que mes despertabe la curiossidat dels tres amics als tems cuan a la taberna de Quino se despachabe una tassada de sidra de barril per sing séntims, ere sabé la causa per la que al Manco li faltabe una ma. Constituíe la raó una historia sensilla que lo Manco contabe en sensillés.
- Va sé mon germá, ¿sabéu? - díe -. Fée lleña. Als concursos guañabe sempre lo primé premio. Partíe un trong gros en pocs minuts, antes que dingú. Ell volíe sé boxejadó.
La vocassió de son germá de Quino, lo Manco, aumentabe la tentassió dels sagals. Quino prosseguíe:
- Claro que aixó no va passá aquí. Va sé a Vizcaya fa quinse añs. No está lluñ Vizcaya, ¿sabéu? mes allá de estos montes - y siñalabe la punta fosca, empenachada de broma, del Pic Rando. A Vizcaya tots los homens volen sé forts y mols u són. Mon germá ere lo mes fort del poble, per assó volíe sé boxejadó; perque los guañabe a tots. Un día, me va di: "Quino, aguántam este trong, que vach a partíl en cuatre destralades". Aixó me u demanabe assobín, encara que may partiguere los trongs en cuatre asclades. Assó ere un di. Aquell día lay vach aguantá firme, pero al momén de descarregá lo cop, yo vach adelantá la ma pera féli una advertensia y ¡zas! - les tres caretes infantils expresaben, an aquell momén, un mateix nivell emossional. Quino, lo Manco, se mirabe cariñosamen lo muñó y sonreíe -: La ma va saltá a cuatre metros de distansia, com un ascla
- continuabe -. Y cuan yo mateix vach aná a replegála, encara estabe calenta y los dits se retortigaben sols, nerviosamen, com la coa de una sargantana.
Lo Moñigo tremolabe al preguntáli:
- ¿Te... te importe amostrám de prop lo muñó, Manco?
Quino adelantabe lo bras, sonrién:
- Al contrari - díe.
Los tres chiquets, animats per la amable consessió del Manco, miraben y remiraben la incompleta extremidat, lo sobaben, ficaben les ungles brutes per les bades de la carn, se féen la un al atre indicassións y, al remat, dixaben lo muñó sobre la taula de pedra com si se tratare de un objecte ya inútil.
La
Mariuca, la chiqueta, se va criá en lleit de cabra y lo mateix Quino
li va prepará los biberóns hasta que va cumplí un añet. Cuan la
yaya materna li va insinuá una vegada que ella podíe fes cárrec de
la chiqueta, Quino, lo Manco, su va pendre tan a pit y se va enfadá
tan que ell y la seua sogra ya no van torná a dirigís la paraula.
Al poble asseguraben que Quino li habíe prometut a la difunta no
dixá la criatura en mans de atre, encara que tinguere que criála en
los propis pits. Aixó li pareixíe a Daniel, lo Mussol, una evidén
exagerassió. A la Mariuca-uca, com la cridaben al poble pera indicá
que ere una consecuensia de la Mariuca morta, la volíen tots menos
Daniel, lo Mussol.
Ere una chiqueta de ulls blaus, en lo cabell
dorat y la part alta de la cara pleneta de peques. Daniel, lo Mussol,
va coneixe a la chiqueta mol pronte, tan, que lo primé record della
se perdíe a la seua memoria. Después sí, recordabe a la
Mariuca-uca, encara una coseta de cuatre añs, rondán los díes de
festa per la vora de la formachería. La chiqueta despertabe en la
mare de Daniel, lo Mussol, lo instín de la maternidat prematuramen
trencada. Ella dessichabe una chiqueta, encara que haguere tingut la
careta plena de peques com la Mariuca-uca. Pero assó ya no podríe
sé. Don Ricardo, lo meche, li va di que después del aborto li habíe
quedat lo ventre sec. Lo seu ventre, pos, se fée vell sense
esperanses. De aquí que sa mare de Daniel, lo Mussol, sentiguere cap
a la menuda huérfana una inclinassió casi maternal. Si la veíe
pindongueján per les inmediassións de la formachería, la cridáe y
la assentabe a la taula.
- Mariuca-uca, filla - díe, acarissiánla -, voldrás una mica de collada, ¿verdat?
La chiqueta assentíe. Sa mare del Mussol la ateníe solíssita.
- Menuda, ¿tens prou sucre? ¿Te agrade?
Tornabe a assentí la chiqueta, sense parlá. Al acabás la dolsaina, sa mare de Daniel se interessabe per los pormenors doméstics de la casa de Quino:
- Mariuca-uca, filla, ¿quí te rente la roba?
La chiqueta sonreíe: - Lo pare.
- ¿Y quí te fa lo minjá?
- Lo pare.
- ¿Y quí te pentine les trenes?
- Lo pare.
- ¿Y quí te rente la cara y les orelles?
- Dingú.
Sa mare de Daniel, lo Mussol, sentíe llástima de ella. Se eixecabe, ficáe aigua a una grela y li rentabe les orelles a la Mariuca-uca y, después, li pentinabe en cuidadet les trenes. Mentres fée esta operassió musitabe com una letanía: "Pobra chiqueta, pobra chiqueta, pobra chiqueta..." y, al acabá, díe pegánli una surreta al culet:
- Bueno, filla, aixina estás mes curioseta.
La chiqueta sonreíe débilmen y entonses sa mare de Daniel, lo Mussol, la agarrabe als brassos y la besabe moltes vegades, frenéticamen. Podríe sé que per naixó a Daniel, lo Mussol, este cariño de sa mare cap a la Mariuca-uca li faiguere que no fore san de la seua devossió. Pero no; lo que enfadabe a Daniel, lo Mussol, ere que la menuda Uca vullguere embutí lo nas a totes les salses y intervindre activamen en assuntos impropis de una dona y que no li tocaben. Sert es que la Mariuca-uca disfrutabe de una envejable libertat, una libertat una mica assalvachada, pero la Mariuca-uca ere una dona, y una dona no pot fé lo mateix que ells féen ni tampoc ells parlá de "aixó" dabán della. No haguere sigut delicat ni oportú. Per lo demés, que sa mare la vullguere y la convidare a collada los domenges y díes de festa, no li donabe ni fred ni caló. Li molestabe la insessán mirada de la Mariuca-uca a la seua cara, lo seu afán per a interseptá totes les contingensies y eventualidats de la seua vida.
- Mussol, ¿Aón anirás avui?
- Al dimoni. ¿Vols vindre?
- Sí - afirmabe la chiqueta, sense pensá lo que díe.
Roc, lo Moñigo, y Germán, lo Tiñós, sen enríen y lo puncháen, diénli que la Uca-uca estabe enamorada dell. Un día, Daniel, lo Mussol, pera desfés de la chiqueta, li va doná una moneda y li va di: - Uca-uca, tin aixó y vésten a la farmassia a pesám.
Ells sen van aná al monte y, al torná, ya de nit, la Mariuca-uca los aguardabe en passiensia, assentada a la porta de la formachería. Se va eixecá al vórels, se va arrimá a Daniel y li va torná la moneda.
- Mussol - va di -, diu lo boticari que pera pesát hi has de aná tú.
Los tres amics sen enríen mol y ella los mirabe en los seus intensos ulls blaus, probablemen sense enténdrels. Uca-uca, a vegades, habíe de fotre ma a tota la seua astussia pera pugué aná aon lo Mussol. Una tarde, se van trobá los dos sols a la carretera.
- Mussol - va di la chiqueta -. Sé aón ña un niu de muixóns negres en polls emplomats.
- Dísme aón está - va di ell.
- Vine en mí y tel enseño - va di ella.
Y, eixa vegada, sen va aná en la Uca-uca. La chiqueta no li traíe l´ull de damún en tot lo camí. Entonses sol teníe nou añs. Daniel, lo Mussol, va sentí la impresió de les seues nines a la carn, com si li escarbaren en un punchó.
- Uca-uca, ¿per qué dimonis me mires aixina? - va preguntá.
Ella se va avergoñí, pero no va apartá la mirada.
- Me agrade mirát - va di.
- No me miros, ¿sens?
Pero la chiqueta o nol va sentí o li va fé un cas com un cabás.
- Te hay dit que no me miros, ¿no me has sentit? - va insistí ell.
Entonses ella va acachá los ulls.
- Mussol - va di -. ¿Es verdat que te agrade la Mica?
Daniel,
lo Mussol, se va ficá colorat. Va dudá un momén, notán com un
extrañ bambolleo al cap. Ignorabe si en estos casos se teníe que
enfadá o si, per lo contrari, teníe que sonriure. Pero la sang
continuabe acumulánseli al cap y, pera abreviá, se va indigná.
Va
dissimulá, fén vore que li costabe saltá la valla de un prat.
- A tú no te importe si me agrade la Mica o no - va di.
Uca-uca va insinuá débilmen:
- Es mes gran que tú; te porte deu añs.
Se van enfurruscá. Lo Mussol la va dixá sola a un prat y ell sen va entorná cap al poble sense enrecordássen mes del niu. Pero en tota la nit no va pugué olvidá les paraules de Mariuca-uca. Al gitás va sentí una rara sensassió. Sin embargo, se va dominá. Ya al llit, va recordá que lo ferré li contabe moltes vegades la historia de la Pesteta menuda y don Dimas y sempre escomensabe aixina: "lo carnús ere quinse añs mes jove que la Pesteta...". Va sonriure Daniel, lo Mussol, a la oscurina. Va pensá que la historia podríe repetís y se va adormí arrullat per la sensassió de que lo voltaben los efluvios de una plássida y extraña felissidat.
viernes, 3 de diciembre de 2021
DVA, Borao, E
EBRO. d. Se usa la expresión estar para echar gatos al Ebro como equivalente a estar miserable, pasarlo con estrechez, no estar para derrochar. - n. comer más que Ebro, devorar. - n. ha de bajar mucha agua por el Ebro, ha de pasar mucho tiempo.
EDAD. a. Se dice estar en edad por el tiempo en que aún no han cerrado las bestias.
EJECUTOR. d. Albacea.
EJÉRCITO. n. Tributo que se conoció con este nombre en Aragón, según Blancas.
ELÁSTICO. n. Almilla.
EMBADINAR. d. Encharcar. (badina)
EMBAFAR, d. Empalagar.
EMBARRALAR. n. Meter el vino u otro líquido en barral y por extensión en cualquiera otra redoma.
EMBASTAR. c. Hilvanar.
EMBERAR, p. Empezar la sazón de las frutas; tomar color, sobre todo las uvas.
EMBERO. p. El color que indica sazón en las frutas; y la misma uva o grano.
EMBROSQUILAR. a. Meter el ganado en el redil.
EMOLOGAR. n. Confirmar, ratificar o aprobar, según se lee en las Ordinaciones de Abejeros 1502.
EMPACHAR. n. Impedir: su participio pasivo se usa en las Ordinaciones de Zaragoza. (Empatxar, empatxament)
EMPACHO. n. Impedimento: se usa en sentido de excepción o amparo forense.
EMPANDULLO. EMPANTULLO d. Pastel ensuciada, mala salida de un negocio. - d. Embolismo, embrollo.
EMPARA. a. Emparamento o inventario.
EMPARAMENTO. a. Acción y efecto de emparar, esto es, de inventariar o secuestrar: hay proceso de emparamiento. - n. Guidático o protección, según declaración en cortes de Cataluña 1351.
EMPARANCIA. n. Emparamento.
EMPARAR. a. Embargar o secuestrar, y mejor inventariar.
EMPEDREAR, d. Empedrar.
EMPELTRE. a. Olivo injertado. (Empeltá: injertar; empelto, empeltes, empelte, empeltem o empeltam, empeltéu o empeltáu, empelten).
EMPENTA. p. Empujón, empellón. (Espenta)
EMPENTAR, a. Empujar. (Espentá. Espento, espentes, espente, espentem o espentam, espentéu o espentáu, espenten)
EMPENTÓN. a. Empujón.
EN. Precediendo al infinitivo, como en castellano al gerundio, significa luego que, después que, p. ej. "en refrescar departiremos," "en pasar las fiestas, lo veremos." - n. Partícula relativa usada, como en la lengua francesa, en las expresiones m' en voy por me voy de aquí, men canso por me canso de esto.
ENANTAR.
n. Ducange interpreta pignorare, procedere: el Códice de las Uniones
de Aragón trae los siguientes pasajes. "E las spoliaciones que
notorias no fuesen que embiariades vuestro procurador por enantar en
aquellas ante la Justicia de Aragon;"
"y si enantaria o
querria enantar personas o bienes de algunos etc." "que si
no viene el dia de Ramos por enantar en las cosas sobreditas etc."
ENATIZO. d. Desmedrado, imperfecto de nacimiento. - d. De ánimo apocado y ruin.
ENAVESAR. d. Trasponer.
ENCABEZADO. n. El vino que se mezcla con aguardiente u otro licor. - n. Cabezero.
ENCABEZAR.
ENCABEZARSE. n. Verbos de donde nace el participio anterior y que
también son usuales en Aragón.
ENCALZADOR. n. Perseguidor.
(acassadó, que acasse)
ENCALZAR. n. Perseguir, ponerse en persecución: "encalcen e geten de la tierra al sobredito rey" se lee en el Códice de los Privilegios de la Unión.
ENCANARSE.
b. Detenerse demasiado en la conversación, eternizarse hablando. -
n. Pasmarse a la fuerza del lloro o de la risa: la Academia sólo
admite el primer afecto que a la verdad es el más común y adecuado.
(encanás; yo me encano, encanes, encane, encanem o encanam,
encanéu o encanáu, encanen)
ENCANTAR. d. Vender en almoneda.
ENCANTE. ENCANTILLO d. Lugar en que se venden las cosas ya usadas, las viejas y las de desecho. (Plassa del Encant)
ENCAÑIZAR.
n. Cubrir las bovedillas o cualquiera otra obra con cañizos.
ENCARPETAR. n. Colocar papeles dentro de sobre o carpeta.
ENCARRAÑARSE. d. Irritarse, incomodarse.
ENCARTAR.
n. Intentar acción criminal contra el obligado en instrumento en que
se juraba pagar y no pleitear: véase a Larripa en sus Procesos
forales.
ENCERCAR. n. Inquirir, investigar: es antic. y deducido
de documentos latinos, y por consiguiente dudoso. (cercar :
buscar, investigar; recerca)
ENCERRONA. n. En el juego del dominó es dejar por ambas puntas un mismo número o palo cuando todos están jugados, en cuyo caso ya no pueden jugar las fichas que se tienen en la mano: en general se da a este lance el nombre de cierro, y cuando los tantos que se cuentan son muchos, entonces se llama encerrona. En Zaragoza es más usual que en otras partes y por consiguiente se halla muy adelantado el juego a que aludimos, de cuyo tecnicismo incluiremos cuatro o cinco vocablos.
ENCETAR. d. Decentar. - d. Empezar: la Academia escribe encentar para la primera significación, y aunque omite la segunda, pone la de encentador el que encienta o empieza alguna cosa. (Ensetá; enseto, ensetes, ensete, ensetem o ensetam, ensetéu o ensetáu, enseten)
ENCORDADURA. n. Conjunto de cuerdas de una guitarra u otro instrumento de cuerda.
ENCORRER.
d. Correr tras alguno para cogerle; es verbo activo. (Encorre;
encórrego, encorres, encorre, encorrem, encorréu,
encorren)
ENCORTIMIENTO. n. Vale tanto como entredicho a
juzgar por el Códice de las Uniones en que se lee "que podamos
soltar al dito seynor rey el encortimiento de los ditos castieyllos e
que non los alienemos."
ENDURAR. a. Pasar hambre, sufrir. (Enduro, endurance: resistencia)
ENFILAR. n. Dirigir un asunto. - n. Ingerirse.
ENFURRUSCARSE. n. Enfurruñarse.
ENGAFETAR.
n. Enlazar los gafetes macho y hembra, abrochar.
ENGALZAR. d.
Encorrer.
ENGARABITARSE.
n. Encorvarse y entumecerse los dedos a impulso del frío o alguna
causa patológica,: en Castilla esa palabra significa ponerse en
alto, y la definición que hemos dado conviene a la voz
engarabatarse.
ENGARDAJINA. d. Lagartija. (sargantana)
ENGLUCIAR. d. Mirar con intención, hacer gestos para conseguir alguna golosina.
ENGULLIDOR. d. Sumidero. (Engullidó, de engullí; engullixco, engullixes, engullix, engullim, engulliu, engullixen).
ENJARETAR.
n. Intercalar, incluir, y aun confeccionar o componer.
ENJAUE. n.
Prórroga en el pago del arriendo de las generalidades
u otro tributo público; y como a veces se concedía sin causa justa
y producía un lucro contra los caudales públicos o de corporación,
de ahí las frases hacer enjaues, andar en enjaues, enriquecerse con
enjaues etc., equivalentes a las más vulgares de andar en enjuagues
etc. en cuyo sentido admite la Academia esa significación.
ENJUNCIAR.
n. Cubrir de juncia las calles y plazas para algún regocijo.
ENMANTADO. n. Hombre cubierto o embozado en la manta, la cual
forma parte del traje aragonés en la clase jornalera y parece ser un
recuerdo del albornoz árabe.
ENRELIGARSE.
n. Enredarse, entrelazarse, enmarañarse una cosa con otra. (Ligar
: lligar : enrelligá, lligá)
ENRONA. a. Escombros, desperdicios de una obra.
(enruna)
ENRONAR. a. Envolver con escombros. - n. Metafóricamente se dice de alguno "que es tan rico que nos puede enronar a onzas de oro." (Enruná).
ENRUENA. d. Enrona.
ENRUNA. p. Enrona.
ENRUNAR. p. Enronar.
ENSIMESMADO. ENSIMISMADO. n. El que está distraído, metido en sí mismo y absolutamente extraño a lo que pasa en torno suyo.
ENSOBINADO. n. Se dice de la res enfermiza.
ENSOBINARSE. d. Caer una caballería en postura supina con riesgo de perecer.
ENSUNDIA. n. Enjundia o gordura: úsase también metafóricamente para denotar cachaza y es todavía más familiar la palabra insundia.
ENTORNAR, d. Hacer dobladillo.
ENTORNO. n. Dobladillo.
ENTRATICO. d. Entrada de religioso en alguna comunidad: la Academia lo incluye como provincial de Navarra.
ENTRECAVAR. d. Limpiar de yerbas la hortaliza. (Entrecavá. Entrecavo, entrecaves, entrecave, entrecavem o entrecavam, entrecavéu o entrecaváu, entrecaven)
ENTREGA. n. Restitución in integrum.
ENTRIPARRADO. n. Entripado, en ambos sentidos recto y figurado.
ENTRIPARRAR. n. Ocupar demasiado el estómago algún manjar indigesto o comido en abundancia.
ENVASADOR. c. Embudo: la Academia añade que grande y propio para pellejos y toneles, esto es, para grandes capacidades.
ENZURIZAR. n. Enzarzar o poner guerra entre varias personas sembrando discordias: la Academia admite la voz primitiva zuriza. (Meter cizaña).
ERAGE. a. Miel virgen.
ERETA. n. Era o plantel de tierra para cultivo de verduras.
ERROR DE PROCESO. a. Con que se nota que alguno es tan hábil que, aun convencido, se liberta de la pena que le imponen.
ESBAFAR. d. Evaporar, (esbrafá, esbafá a Beseit; esbafat, grassiosa esbrafada, esbafada).
ESBARRAR. d. Asombrar, espantar la caza, caballerías etc.
ESBRINAR. n. Desbriznar o entresacar de la flor los estambres del azafrán.
ESCACEAR. n. Desmenuzar la piedra, el yeso, cal etc. para molerlos después más fácilmente.
ESCACILAR. d. Cacarear.
ESCACHAR. d. Despachurrar, o mejor, aplastar, machucar. - d. Chasquear, dejar burlado. (Te escacharé la cabeza, ababol)
ESCACHUFLAR. n. Igual significación que la anterior, pero de uso del vulgo.
ESCALERA. c. Peldaño, escalón.
ESCALFETA. c. Braserillo. (prov. escoufa, escalfar cat. calentar; escofás; yo me escofo, escofes, escofe, esofem o escofam, escoféu o escofáu, escofen).
ESCALIAR. n. poner en cultivo tierra que había sido abandonada, y en este sentido lo usan las Observancias y el erudito Cuenca: Peralta no incluye esta voz, pero sí la de escahar, roturar, que nosotros no hemos incluido por suponerla error de imprenta que se corrige con la voz escaliar: úsase también en antiguos documentos de Navarra. (Traure la escara es escará la terra.)
ESCALIVAR. d. Sacar el rescoldo: en idioma provenzal calivar quemar, escalfar, calentar, recalivar volver a calentar. (Caliu, descaliuá, descalivá, escaliuá, escalivá siríe traure del caliu o be traure lo caliu apegat.)
ESCAMOCHEAR. a. Pavordear o javardear o hacer las abejas segunda cría después de la principal, separándose de la madre en corto número con su maestra. Escamochá, esmochá es tallali a un abre molta lleña per a que torno a creixe mes sano y fort.
ESCAMPAR. d. Tender el estiércol por la tierra. - d. Derramar granos o semillas. (Escampá lo fem - fiemo -, escampá la llaó pel cam, camp, campo).
ESCANDALLAR. n. Computar el valor de una partida de ganado, haciendo de él varios grupos con las reses más iguales, tirando desde otro corral o aposento una piedra a cada grupo, pesando las reses a quienes ha tocado cada piedra y calculando por el peso de cada una el de su grupo: a veces se hace esta operación con el grupo mejor y con el peor y a las demás reses se las hace desfilar una a una marcando como tipo las que hacen un número dado, el diez por ejemplo. En castellano tiene una significación análoga pues equivale a sondear y por ampliación probar, examinar: en italiano scandagliare está mejor definido pues responde en sentido figurado a inquirir, averiguar etc. como en Casti (Nov. IX). Da scandagliar gli altrui talenti a fondo
ESCANDALLO. n. Operación de escandallar. - n. La res que se saca como tipo. - n. A escandallo, modo adverbial, para expresar que se vende un ganado escandallándolo.
ESCAÑARSE. d. Desgañitarse, ahogarse de una tos muy fuerte. (Escañás; Tamé se diu cuan te aufegues perque s’ha enganchat algo al garganchó, a la gola, y no passe o be s’en va pel atre forat (tráquea).
ESCAÑO. d. Féretro.
ESCARABAJO PELOTERO. n. Insecto de los coleópteros. (Lo escarbat que fa pilotes en lo fem.)
ESCARLATINA. n. Enfermedad que suele padecerse en la niñez.
ESCARRAMANCHONES. (A). a. A horcajadas.
ESCLAFAR. n. Machucar, chafar, quebrantar: también te dice esclafar los huevos por cascarlos, partirlos o abrirlos.
ESCOBAR. c. Barrer. (Escoba. Granera; agraná).
ESCOBIJAR.
n. Descubrir, alzar el velo a alguna cosa.
ESCOLANO. n. Ayudante
del sacristán mayor en el Hospital de Zaragoza. - n. Especie de
coadjutor: lo había también llamado de la limosna según se ve en
las Ordinaciones de Pedro IV. (Escolanet: monaguillo)
ESCOMBRA. n. Escombro: la Academia admite esta voz como el hecho de escombrar.
ESCONDECUCAS. a. Escondite, juego de muchachos.
ESCOPETADA. d. Escopetazo.
ESCORCAR. n. Véase esmollar.
ESCORCHA. d. Túrdiga, correa de cuero ancha y sin curtir.
ESCORCHAR. c. Levantar la corteza o piel a alguna cosa, desollar. (Escorxador : matadero)
ESCORCHÓN. n. Desolladura.
ESCORNARSE. n. Se usa en la frase escuérnate como puedas en significación de componte como puedas: también se dice me he descornado estudiando y otras locuciones como esta: en una colección de refranes leemos dejarlo descornar, frase de que se usa cuando no se quiere meter paz."
ESCORREDERO. n. Canal por donde se facilita la salida del agua sobrante de un riego o del término de una acequia. - n. El fondo de la vagina: es voz de la gente inculta. (Escorredora per a regá. Escorres lo verbo eyaculá.)
ESCORREDIZO. n. Escorredero.
ESCORREDOR. n. Escorredero; usa aquella voz el conde de Sástago en su lujosa obra sobre el Canal Imperial de Aragón.
ESCOTOLARSE. d. Frotarse el cuerpo con la camisa moviéndose.
ESCOZNETE. a. Instrumento con que se sacan los escueznos.
ESCRIBANO DE RACIÓN. n. Oficio de la Casa real de Aragón en el siglo XIV.
ESCRISMAR. n. Descrismar.
ESCUDILLAR. d. Echar el caldo en las sopas, el chocolate en los pocillos o jícaras etc.
(Escudilla; escudella)
ESCUEZNAR, a. Sacar los escueznos.
ESCUEZNO. a. Pulpa o carne de la nuez tierna: úsase en plural.
ESCUPINATA. n. Escupetina, escupitina, escupidura: Guevara dice escupecina.
ESFILADIZ. n. Filadiz, desfiladiz: usan aquella voz los ff.
ESFULLINADOR. n. Deshollinador. (Desfullinadó, desfullinadora)
ESFULLINAR. n. Deshollinar. (desfulliná; desfullino, desfullines, desfulline, desfullinem o desfullinam, desfullinéu o desfullináu, desfullinen)
ESGARRAR. n. Desgarrar. (Esgarrá; esgarro, esgarres, esgarre, esgarrem o esgarram, esgarréu o esgarráu, esgarre)
ESGARRIFAR. d. El efecto que nos causa la lima cuando da en falso. - d. Espeluzarse de horror.
ESGARRÓN. n. Desgarrón, rasgón.
ESLAMINARSE. n. Empezar a gustar de una cosa, ir tomando el gusto a algo, estrenarse en ciertas diversiones y placeres.
ESLAVA. n. Pendiente lisa por donde resbala el agua. (resbala : reslaba : eslava)
ESMANGAMAZOS. n. Se dice de cualquiera persona de poco valer, principalmente del estado llano: equivale muy aproximadamente al castellano echa cantos.
ESMEDIAR. n. Disminuir la cantidad de algún líquido, y se aplica comúnmente a los que están al fuego para cocer; úsase también como reflexivo, y hay quienes lo pronuncian y escriben desmediar.
ESMERADO. n. Líquido que ha disminuido su peso y volumen por ebullición.
ESMERAR. n. Conseguir la disminución de un líquido por medio de la ebullición: se usa también como reflexivo.
ESMO. n. Tino, tiento, y así se dice perder el esmo: úsase mucho en el Alto Aragón. (Hay perdut l’esma, esme).
ESMOLLAR. n. Quitar la cáscara verde a las nueces, avellanas y otras frutas. - n. Desmoronarse las obras de tierra o de otra construcción deleznable.
ESMORRILLADO. n. Desportillado.
ESMOSCARSE. n. Desaparecer sin ser visto, ausentarse maliciosamente.
ESMUIRSE. d. Deslizarse, escurrirse, zafarse.
ESPADILLA.
n. Juego de naipes, acaso el tresillo: entre los papeles mss. de
Lezaun hay una carta escrita en verso desde la Zaida, en que se lee
Mi mayor divertimiento
es el juego de espadilla,
en el
cual gano tres reales
en cuatrocientas partidas.
ESPALMAR. n. Quitar el polvo a la ropa frotándola con las manos: así las leyes palatinas de Jaime II de Mallorca, en las cuales también se halla spalmator según Ducange. (La ropa se frota o golpea con las palmas de las manos)
ESPANADO. n. miserable, piojoso, perdido, hombre que no tiene sobre qué caerse muerto: es voz local.
ESPARTAR. n. Cubrir o aforrar con esparto las vasijas de vidrio: se usa también en el adjetivo o participio pasivo.
ESPARVEL. n. Gavilán. (Esparvé; esparver)
ESPATARRARSE.
n. Despatarrarse: del mismo modo pierden en Aragón la d los demás
derivados. - n.
"Si hay un Barranchán
que al mundo
espatarra"
dice en sentido metafórico uno de los varios
copleros que se desataron cruelmente contra la Sociedad económica
Aragonesa en 1785. (Espatarrá, espatarrás, despatarrás,
escamarrás.)
ESPEDERA. n. Espetera.
ESPEDO. a. Asador. (Espeto)
ESPENJADOR. n. Pértiga o vara que tiene dientes de hierro a la punta y sirve para colgar y descolgar cualquier objeto. (Penjadó y despenjadó)
ESPERREQUE. d. Niño u hombre mal sano o regañón. - d. Cosa despreciable.
ESPICHAR. d. Morir. (Espicharla)
ESPINAI. d. Espinaca. (Espinac, espinacs)
ESPINALBO. n. Cierto árbol infructífero. (San Miquel de Espinalbá a Valderrobres. Espino albar, majuelo, arto, Crataegus monogyna)
ESPONJADO. p. Azucarado, panal, azucarillo.
ESPORTILLARSE. n. Desportillarse.
ESPORTÓN. d. Serón.
ESPUENDA. p. Margen de río o campo: usase también en Navarra.
ESPUNTAR. n. Ponerse en movimiento los machos cabríos o guiones de un rebaño.
ESQUEJE. n. Se dice metafórica e irónicamente del niño mal educado. (En un árbol, una ramita para injertar o plantar. Esqueix; rechito).
ESQUILA. c. Cencerro. (Esquella, esquelles, esquellot).
ESQUILADA. a. Cencerrada. (Esquellada).
ESQUILO. d. Cencerro. - n. Esquileo.
ESQUIROL. a. Ardilla. (Squirrel en inglés. Eichhörnchen en alemán. Esquiruelo)
ESTABULADO. n. Se dice del ganado metido en el establo.
ESTABULAR. n. Meter el ganado en el establo.
ESTADAL. p. Librito de cerilla.
ESTAJADIZO. n. División que se hace en los grandes corrales para colocar las reses con la separación conveniente.
ESTALONAR. n. Quitar el talón a la media u otro calzado: se dice del zapato que va destalonado cuanto se le dobla el talón para llevarlo debajo del pie.
ESTALVIAR. n. Perdonar, voz aragonesa anticuada según al Índice de Blancas. (estalviar, estalviá, estauviá, aforrá. Caixa d’estalvis. Ahorrar).
ESTAMENTO. a. Cada estado o brazo de los cuatro que concurrían a las Cortes de Aragón.
ESTANCA. n. Gran porción de agua estancada: es muy famosa en Aragón la de Alcañiz, célebre por sus buenas anguilas.
ESTANCOS. n. Terrenos acotados y vedados, ya de particulares ya de propios: dehesas en que los ganados pueden entrar ciertos meses del año.
ESTATUECER n. Estatuir. Se ve que se usaba ese verbo, por las muchas veces en que se encuentra la tercera persona del indicativo, estatuece.
ESTATUTARIOS. n. Procesos.
ESTEMA. n. Pena de mutilación o perdimiento de miembro.
ESTEMAR.
n: Imponer la anterior pena, que tal vez se extendería a marcar con
hierro ardiente. (1)
(1) Estas dos palabras se hallan repetidas
veces, con toda la posible claridad caligráfica. en el libro de los
Privilegios de la Unión, que en la Introducción hemos extractado.
La lectura indudable de ellas y aun la desinencia o construcción de
la voz estema nos han convencido de que ni son las mismas palabras ni
deben representar la misma idea que las de extenuación y extenuar
que se definen más adelante y que por otra parte se hallan en varias
Alegaciones del Reino y otros tratados jurídicos. En cuanto al
significado. nos ha parecido que, nombrándose siempre esa pena
después de la de muerte, y conformando tanto ambos vocablos con los
latinos de stigma y stigmare que denotan la marca con hierro, no era
fuera de camino atribuir a estema y estemar la equivalencia que les
hemos señalado. - Escrita esta nota hemos visto con placer que
Ducange en su GLOSSARIUM incluye estema y extema, añadiendo membri,
ut videtur, abscissio, mutilatio. interpretación del todo conforme
con la nuestra, y acerca de la cual viene hasta cierto punto en
comprobación el artículo Membrum del REPERTORIO de Miguel del
Molino impreso en Zaragoza 1585.
ESTEPILLA. n. Planta: llámase también estrepilla.
ESTERNO. n. Véase cisterno.
ESTERZA. n. Cada uno de los trozos o suertes en que se dividen para su arriendo o aprovechamiento algunos montes.
ESTORNIJA. a. Tala, juego de muchachos.
ESTRAL. n. Destral. (Hacha). - El diccionarista Rosal trae la palabra destraleja o achuela, (hachuela), que ya el vulgo (dice) llama estraleja.
ESTRAPALUCIO. n. Baraúnda, ruido, desorden. (Estrapalussi)
ESTRÉBEDES. d. Trébedes. (trípode, 3 pedem, tres potes, tres peus)
ESTREMEZO. a. Estremecimiento.
ESTRENAS. c. Augetas en sentido de gratificación.
ESTREÑIR. d. Entornar o medio cerrar una puerta. - Nunca hemos oído esta acepción.
ESTREUDES. d. Trévedes. (Trébedes)
ESTREYTO. n. Obligado, según Blancas. (Estret, strenyer)
ESTRIBERA. n. Se dice medias de estribera por las que van sujetas al pie con una trabilla o como estribo a manera de los botines: equivale a la palabra peal.
ESTRICALLAR. d. Hacer pedazos.
ESTRIPACUENTOS. n. El que suele interrumpir inoportunamente al que lleva la palabra.
ESTROPICIO. n. Desperfecto, desorden.
ESVARARSE. n. Resbalarse. La Academia admite desvarar usado en ese sentido: Peralta dice esbarar.
ESVARIZAR. n. Resbalar: se usa principalmente como recíproco. (esvarizarse)
ESVARIZÓN. n. Resbalón. (Rellissada)
ESVIRAR. d. Bruñir.
EXARlCO. n. Colono: se emplea esta voz en los cuerpos de derecho aragonés y se halla también en Blancas.
EXCIBIR. n. Eximir.
EXCREX. a. Aumento o firma de dote que consiste en la cesión que hace el marido de una parte de sus propios bienes para asegurar el dote de su mujer. Asso escribe excriex: el plural es excrez. (creix : aumente)
EXCUSADO. n. Retrete, secreta. (Escusado)
EXCUSÓN, n. tiene el mismo significado que forrón, y es también voz local que se usa principalmente por la gente rústica en algunos pueblos del alto Aragón, en donde el lenguaje aragonés difiere del castellano mucho más que el que comúnmente se habla en Aragón y se define en este diccionario.
EXHIBITA. a. Exhibición.
EXIGIDERO. a. Exigible.
EXPORGA. n. Expurgo.
EXPORGAR. n. Expurgar. - n. Soltar los árboles y las vides parte de su fruto naciente. (Esporgá es tallá rames, chupóns o pullissos; esporgo, esporgues, esporgue, esporguem o esporgam, esporguéu o esporgáu, esporguen)
EXTENUACIÓN. n. Pena de muerte por hambre, sed y frío, que los Sres. feudales de potestad absoluta podían imponer a sus vasallos de signo servicio.
EXTENUAR. n. Imponer la pena de muerte por hambre, sed y frío.
EXTRACTA. a. Traslado fiel de cualquiera escritura o instrumento público.
EXTRAER. a. Sacar traslado de alguna escritura.
viernes, 21 de diciembre de 2018
Batalla de Valencia y origen ibérico del valenciano
http://www.elpalleter.com/Imagenesportada/max/Images/_Batalla.pdf
En Fontibre contemplé el pequeño estanque y manantial considerado, hasta hace poco, origen del río que da nombre a la península Ibérica.
Al lugar acuden numerosos visitantes desconocedores de que nace 20 kilómetros arriba, en el Alto Campoo. Hacia allí, remontando el cauce del Híjar, llegué al verdadero punto cero. Fue en 1987 cuando unos científicos del Instituto Geológico y Minero colorearon las aguas del Híjar y, como un Guadiana, observaron que resurgían en el manantial de Fontibre.
Hasta esa fecha, quien hubiera negado que el Ebro nace en Fontibre hubiera sido catalogado de ignorante o visionario. El interés en que el turismo siga dejando beneficios mantiene el equívoco.
Aquel día, mientras Fontibre rebosaba de turismo patrio, en la magnífica fonda ‘La Casuca’, junto al Híjar, estábamos cuatro gatos. A Fontibre y Reinosa les interesa mantener la tradición por interés crematístico.
propagar las teorías expansionistas del IEC de Barcelona. No obstante, con el truco del ibero puede que todo les sea más fácil.
No obstante, las mentes cartesianas que desean principio para todo consideran, por ejemplo, que el francés nace el 14 de febrero del 842, con la prosa de los Juramentos de Estrasburgo; o que el castellano comienza con la copia del cartulario de Valpuesta del siglo IX; pero los balbuceos de estos romances, con morfosintaxis y léxico singularizados del latín, se difuminan en la penumbra de antiguos sustratos.
cartulario de Valpuesta |
La especulación es inevitable en ensayos sobre la antigüedad de un idioma, sea el protofrancés o el protovalenciano.
Nadie puede afirmar que los valencianos, muchos de ellos bilingües, del siglo II d.C. no se comunicaran en el idioma prerromano o ibero que influiría en el latín vulgar hablado en Valencia, actuando de germinador del romance que progresivamente adquiriría categoría de lengua culta.
Hay que aclarar que llamamos valencianos a los habitantes de nuestro territorio de cualquier época, sin distinción de raza o religión; de igual modo que se considera, por ejemplo, andaluz a Séneca.
Transcurrido el tiempo, Casas evolucionó hacia el buenismo franciscano como hábil recurso expansionista. No obstante, buscando distinguirse de los atrasados españoles, la teoría de una etnia autóctona catalana surgida del pueblo ibero arraigó entre los nacionalistas:
Ignacio Sorolla Vidal, pupilo de Arturo Quintana Font |
Colón sería el catalán Colom; el Quijote, obra catalana; y los valencianos, indígenas de una colonia de Cataluña.
El citado Carril —letrina de autoodio—, escribe panfletos contra el “monopoli de la ciutat de Valencia”, mientras ensalza a la magnánima Barcelona. Así, en ‘El substrat iber a la història de Catalunya’ insiste en las ventajas de la autodestrucción valenciana, proponiendo una nomenclatura ibérica para el Reino de Valencia:
Lean y analicen el mensaje en catalán de este colaboracionista de Játiva, producto de años de inmersión:
/ https://www.inh.cat/index.html Institut Nova Història /
El truco del ibero es perfecto:
el provenzal-occitano sería, en gran medida, descendiente del ibero-vasco-catalán.
Los territorios (fuera de Cataluña y España) donde también se habla catalán.
//
Además, el sust. fue frecuentísimo en el castellano medieval (p.ej.. en Berceo), y con las grafías ostia, hostia lo tenemos en valenciano:
“Jesuchrist en la ostia sagrada... la hostia de pa alís”
(Ferrer, Vicent, St.: Sermons, c. 1400).
¿en qué manuscrito o impreso catalán, no valenciano, localiza el iberista la primera documentación del sustantivo como sinónimo de golpe?.
En valenciano moderno tenemos ‘sangrantana’ y ‘sapo’, palabras que según el paleohispanista Vidal serían del sustrato vasco-ibero integradas en el antiguo catalán: ¿antiguo catalán en territorio valenciano del s. VI a.C. al VI d. C.?. El disparate inspira compasión.
/ Aragonés sargantana , chapurriau http://chapurriau.blogspot.com/2018/06/lexico-aragones-s.html /
Paradigma de estos cambios son dos monarcas islámicos valencianos. El famoso Rey Lobo de Valencia Zayyan Ibn Mardanix, nacido en Peñíscola en 1124, era muladí de familia iberorromana convertida al islam. Su apellido Mardanix no era de etimología árabe, sino de Mardonius, según recoge Labarta (Onomástica, p.114).
Caso opuesto es el de Abú Zayd, último rey musulmán de Valencia, convertido al cristianismo y bautizado como Vicent Belvis. Sus descendientes se integraron entre la nobleza cristiana del Reino (p. ej., una hija de Abú Zayd o Vicent Belvis se casó con el noble Blasco Pérez de Tarazona).
«en dicho Reyno de Valencia, la mayor parte de los moros y casi todas las moras no saben hablar aljamiado» (Bernard V.: Bib. Est. Moriscos, informe del año 1528, 105).
Tampoco es aventurado sospechar la superficialidad de creencias de los cristianos nuevos. Aunque muchos se integraran totalmente,
y que a la Mare de Deu,
que María nomenam,
li diuen Juana Vicenta,
y a San Pere, Nicolau” (Ros: Romans ... en que es declaren les virtuts dels durs corbellots. Valencia, c.1740)
Ejemplo de ello sería el conocido testimonio dejado por Eutropio de Valencia hacia el año 600, bajo el poder visigodo. No obstante, los estudiosos vascos aseguran que el manuscrito De similitudine carnis peccati, con su disputadísimo comentario alusivo a la lengua autóctona no latina , se refería a la vasca. Esta, simplificada, sería su traducción:
Si el latín no consiguió hacer desaparecer los idiomas ibéricos, menos lo consiguieron los nuevos invasores godos, árabes y francos, y, por tanto, las lenguas ibéricas que aparecen en los siglos X y XI no pueden ser otras que las lenguas hispánicas.
Nada más un cambio importante tiene lugar: el alfabeto. Al renacer los pueblos hispánicos, estos sustituyen los signos ibéricos por las letras del alfabeto latino, idénticamente a como posteriormente los daneses sustituyeron su escritura rúnica por la latina. El argumento más importante que se ha dado para atribuir al latín la paternidad de todas las lengua ‘neolatinas’ ha sido el hecho que estas lenguas son de raíz latina, pero esta no es una razón convincente, pues lo que seguramente pasaba es que las diferentes lenguas de los pueblos mediterráneos tenían parecido entre ellas, probablemente por el hecho de que procedían de una diversificación muy anterior. Llegamos a la conclusión de que en España el latín no ejerció más que un dominio oficial, mientras se mantenían vivas las lenguas vernáculas» (Deulofeu, A.: El problema lingüístic. Catalunya mare de la cultura europea, Figueres, 1976).
¿cuándo se dejó de usar el ibero más o menos latinizado?,
¿fue por el año 600, en tiempos de Eutropio de Valencia?.
Los catalanes, sin complejos, plantean el tema:
Así, del proto-indoeuropeo *ster derivaron el español y catalán estrella (que hoy repudian y sustituyen por estel, del latín stella) , inglés star, alemán stern, francés étoile, holandés ster, italiano stella, sánscrito str, galés seren, rumano stea, islandés stjarna, griego aster, persa setare, kurdo estêrey valenciano estrela:
El sainetista Serrano Biguer no usó el sinónimo castellano ‘carrizo’, sino el valenciano ‘senill’ y su derivado ‘senillar’ que había escuchado desde niño a sus padres y abuelos. Tiempo atrás, en el Siglo de las Luces, el científico Cavanilles (Obs. 1797) anotaba la variedad de “canyamel senill” como voz botánica valenciana, equivalente al cast. cañamiel de Ravena.
Como vemos, la conexión entre prerromano-ibero, mozárabe y léxico ibero en el valenciano de Bernat y Baldoví es una realidad. El iberismo de ‘senill’ no es elucubración de ningún blavero, sino del etimólogo catalán Corominas:
va tant trochera y esquiva”
“molt amiga es de trochar” (Sapena, B.: Real Academia, 1669, p. 83)
estiguen domiciliats,
nunca ixen de la Parroquia,
sino quant van a trochar”
(Orti Mayor: Relació dels bultos, jagants y nanos, 1743)
archilaga - después del año 711, el protovalenciano de mozárabes y muladíes no guardaría su pureza (si alguna vez la tuvo), sino que generaría derivados como el valenciano moderno ‘archilaga’, que encontramos en el culto Marco Antonio Ortí Ballester, nacido en Nules (a.1593) y que fue Secretario de los Estamentos del Reino de Valencia:
Los eruditos valencianos, desechando arcaísmos, recogieron la morfología moderna, hoy perseguida por el catalanismo:
eschelagrá, terreno aon ñan eschelagres, archilages, archilaga,
|
ginestrera, chinéstre, chinestra, chinastra, ginestra, ginesta – vore archilaga – ginestá : terreno aon se críe la ginesta, toponímia, poble (de Tarragona) |
//
dins de aquella cachapera
un home tan estirat,
que pareixía un furguet”
(Segona part ahon se referix el modo com perden lo temps homens y dones..., Valencia, 1784)
Pues que su gestación, posiblemente, se remontaría a los tiempos de Eutropio de Valencia. Corominas recuerda que “la forma valenciana conocida es cosquerelles” (DCECH, II, p.222); pero Vidal es más concreto:
(Coloqui... de una que li díen Crisóstoma. En Cartagena, c.1770)
perque cosquerelles fan”
(Rahonament... el consell que tingueren el Tio Cosme Nespla de Benifaraig, 1797)
del temps de chapes” (Roig, Jaume: Espill, 1460)
Pero en valenciano lleva ‘ch’: / y en CHapurriau, tamé /
Lo cierto es que ‘chic’ y sus derivados con ch- son patrimonio del idioma valenciano, sea clásico o popular:
Para los valencianos del s. XIX, ‘llacova’ era el “terreno abrupt, desigual, aubert entre montanyes y valls estretes; cast. quebrada” (Escrig-Ll., Martí G. Diccs.).
‘petxina’ por el fascismo expansionista.
Dada la antigüedad en valenciano, en el DECLLC se muestra más contundente: “sapo..., puede ser que no sea mero castellanismo, sino heredado del mozárabe... hoy es vocablo único en casi todo el Reino de Valencia ” (VII, p.669), reafirmando su carácter de voz prerromana. Ha perdurado en escritores sainetistas:
aon amagat entre siches
... en lo forat aon yo estaba” (El Mole, Valencia, 2 / 11 / 1863)
Lo de ‘sucarrar’ sólo lo he oído en castellano paródico y catalán, mientras que ‘socarrar’ ha sido y es morfología y fonética valenciana:
y si li noten gustet,
es que un poc me s´agarrat
y m´ha eixit socarraet”
(Peris Celda: Arrós en fesols y naps, Valencia, 1921)
http://www.rtve.es/alacarta/videos/con-las-manos-en-la-masa/manos-masa-arroz-fesols-naps-antonio-ferrandis/3785219/
Es valenciano clásico y de los dramaturgos saineteros:
/ Res a vore en https://www.youtube.com/watch?v=G3xqBmwiAP8 /
https://lletra.uoc.edu/ca/autor/jaume-roig.pdf
carchofa, sarnacho, fardacho, carabasa, carrasca, barraca, tocha, etc.