champouirau, chapurriau, chapurriat, chapurreau, la franja del meu cul, parlem chapurriau, escriure en chapurriau, ortografía chapurriau, gramática chapurriau, lo chapurriau de Aguaviva o Aiguaiva, origen del chapurriau, dicsionari chapurriau, yo parlo chapurriau; chapurriau de Beseit, Matarranya, Matarraña, Litera, Llitera, Mezquín, Mesquí, Caspe, Casp, Aragó, aragonés, Frederic Mistral, Loís Alibèrt, Ribagorça, Ribagorsa, Ribagorza, astí parlem chapurriau, occitan, ocsitá, òc, och, hoc
SABIDO.
n. Sustantivo con que se denota el sueldo fijo de que uno dispone:
equivale en cierto modo a situado, pero es más concreto: se usa en
las expresiones tiene un buen sabido, tiene un sabido de 5 rs, como
indicando que sin contar otras utilidades eventuales.
SACADERA.
n. Cuévano pequeño que se emplea en las operaciones de la vendimia.
SACAFUEGOS.
c. Eslabón.
SALCHUCHO.
n. zancocho.
SALMORRADA.
n. Salmuera, que en Aragón se pronuncia sulmuerra.
SALOBRE.
u. Planta: se da también ese nombre a toda planta salsuginosa.
SALZ.
n. Cierta especie de yerba.
SAMARUGO.
n. Pez abdominal. - n. Persona arisca, imbécil o egoísta.
SANGARTESA.
n. Lagartija.
SANGRIMÍS.
n. Muchacho desmedrado, o de pocas carnes, o de corta estatura.
SANJUANADA.
n. Velada de San Juan.
SAMPEDRADA.
n. Velada, o mejor, aurora de San Pedro.
SANSA.
d. Orujo de la oliva.
SANTORAL.
n. Catálogo de santos, especialmente en el calendario: la Academia
le da la significación de libro de coro o de sermones y vidas de
santos: su verdadera significación es la última.
SAQUE.
n. Se dice de uno que tiene buen saque para denotar que es comedor o
bebedor.
SAQUERA.
c. Aguja de coser sacos, como se dice también aguja espartera, y
aguja de ensalmar.
SARDA.
n. Ramaje bajo en el monte, como el de los tomillos, asnallos etc.
SARGANTANA.
d. Lagartija.
SARNA.
n. Buena fortuna en el juego, o suerte muy constante en cualquiera
especulación: voz familiar.
SARNOSO.
n. El ganancioso habitualmente, sobre todo en el juego.
SARRAMPIÓN.
d. Sarampión. (Sarrampió)
SARRIA.
n. Esportón. (Saria)
SARRIO.
c. Cabra montés. - n. Gamuza.
SASO.
d. Tierra ligera.
SAYONÍA.
n. Alguacilazgo: el Diccionario de la Academia no usa esta voz, pero
incluye como anticuada la primitiva de sayón.
SECANO.
n. Se dice abogado de secano por el que no tiene pleitos o
suficiencia.
SECARRAL.
n. Secaral, sequeral, sequedal. (Lugar seco, desértico)
SECO.
n. En la frase dejar a uno seco significa dejarle muerto en el acto,
aunque esto, en verdad, no aseguraremos que sea exclusivamente
aragonés.
SECÉN.
n. Madero que pasa de 30 palmos.
SEGALLO.
n. Cabrito desvezado hasta llegar a primal, como en el ganado lanar
lo es el borrego o cordero desvezado. (segall, segalla)
SEMEJANTE.
n. Extremado en magnitud, en número, en lujo, etc., por ejemplo: "ha
hecho semejante fortuna! ha venido con semejante ostentación! ha
traído semejante vestido!"
SENIORES.
n. Los que tenían jurisdicción, y este nombre recibieron los
ricos-hombres.
SENO.
n. Pecho.
SENSE.
n. Tonto: es de uso local. (sense señ, seny)
SENTIDO
(costar un). n. Costar mucho.
SEÑALERO.
n. Alférez, porta-estandarte, abanderado: en documentos antiguos
senyalero. (que llevaba la senyal, señal real de Aragón,
senyera)
SEÑAR.
a. Hacer señas. SEO. a. Iglesia catedral: dícese la Seo, aunque
muchísimos autores escriben impropiamente Aseo, otros Seu y
antiguamente See, acercándose más a la etimología latina sedes
(sede).
SERRADIZO.
n. Serrín.
SERRANÍA.
n. Se usa en la frase forense sententia ad modum serraniae, la cual
se pronunciaba brevísimamente y sin gastos, previa sumisión de las
partes.
SERRETA.
n. Cadenilla que se pone en la boca a los caballos u otros animales
de monta para refrenarlos.
SERRONES.
n. Planta chenopodium.
SIETE
EN RAMA. n. Planta, tormentilla erecta.
SILLETAS.
a. Jamugas.
SIMOSO.
n. Terreno flojo y que fácilmente se desprende por las filtraciones
u otras causas, dejando abiertas simas o concavidades.
SÍNDICO
A TRIBUTAR. n. El que tiene a su cargo en la municipalidad el cuidado
de la alineación y denuncia de los edificios.
SINGULAR.
a. Particular, individuo, vecino.
SINJUSTICIA.
n. Injusticia. - Hemos oído muchas veces esa voz (y a la gente
rústica el barbarismo desinjusticia); y aunque no quiso usarla
probablemente como tal sustantivo Hurtado de Mendoza, no deja de
prestarse a esa lectura aquel trozo del Lazarillo que en una de sus
ediciones hemos leído "Mas con tanta gracia y donaire contaba
el ciego mis hazañas, que aunque yo estaba tan maltratado y
llorando, me parecía que hacía sinjusticia en no se las reír,"
y si bien ahí puede entenderse me parecía que obraba sin justicia,
pero no así en la edición de Aribau (Biblioteca de AA. españoles)
en donde dice "me parecía que le hacía injusticia en no se las
reír," y luego por nota, como variante, sin justicia, cuya
variante con el le aproxima mucho esta frase a la significación que
habemos dado.
SINODAL.
n. Se dice del no muy competente testigo que es llamado a declarar
sobre sucesos antiguos en que no se presenta como ocular o de ciencia
cierta.
SIRGA.
c. Maroma.
SIRRIA.
n. Excremento del ganado etc. (eixérrit, fem)
SIRRIO.
d. Sirria, sirle.
SISA.
n. Sisón, ave.
SISALLO.
n. Planta, salsola vermiculata.
SISARDO.
n. Cuadrúpedo, capra rupicapra.
SITIADA.
d. Junta de gobierno en los establecimientos de beneficencia.
SITIADO.
a. Sito, situado. SITIO. a. Aniversario.
SOBA.
d. Cueva profunda en dirección horizontal.
SOBATER.
d. Agitar líquidos.
SOBIRANO.
n. Supremo: es de los vocablos que reúne en su Índice Blancas.
SOBRE-ACEMILERO.
n. El oficial real que cuidaba de las acémilas (ase), así
como de los carros, barcas y suministro de cebada cuando la corte se
ponía en viaje.
SOBRE-BUENO.
n. Excelente, exquisito.
SOBRE-CIELO.
n. Toldo, techo formado de telas vistosas a manera de pabellón, como
se lee y explica en las Coronaciones de Blancas: dosel como dice este
en su índice de vocablos aragoneses: también es voz italiana pero
se escribe sopracielo.
SOBRE-COCINERO.
n. Cada uno de los dos escuderos destinados al servicio de la mesa
del rey, los cuales habían de ser caballeros. (sobrecoch)
SOBRECULLIDOR.
n. Recaudador de más categoría que los cullidores o cobradores.
SOBREJUNTERÍA.
n. Era a manera de distrito o departamento, a lo menos en tiempo de
las Uniones de Aragón, las cuales nombraban dos conservadores por
cada sobrejuntería o sobrejuntaria.
SOBREJUNTEROS.
n. Dependientes o porteros. - n. Cuando a Unión nombró al rey los
oficiales de su casa le dio sobrejunteros de Alcañiz, Tarazona,
Jaca, Sobrarbe y Ribagorza, Transduerta y reino de Valencia.
SOFOCACIÓN.
SOFOCO. El acto de sofocarse o de disgustarse o apasionarse
vivamente.
SOGUEADOR.
n. Agrimensor.
SOCUEAR.
a. Medir con soga. (soguear)
SOGUERÍA.
a. Conjunto de sogas.
SOL
DE CARACOLES. n. El de poca fuerza y color siniestro, que
generalmente sale durante la lluvia o poco después de ella sin que
haya escampado.
SOLANAR.
a. Solana.
SOLAPE.
n. Entre carpinteros la parte de una pieza que monta o apestaña
sobre otra. (se solapa)
SOLDADERA.
n. Ramera; en latín soldataria. Incluida esta palabra, por haberla
leído en documentos aragoneses y no en el diccionario de la
Academia, debemos, sin embargo, advertir que después la hemos visto
usada en el Concilio toledano de 1324.
SOLIO.
n. Reunión o sesión solemne de los cuatro brazos de las Cortes
aragonesas, en que se sancionaba lo acordado en común o por medio de
los comisionados reunidos de cada brazo.
SOMARRARSE.
Adherirse un guisado a las paredes de la vasija. (Sucarrás,
socarraet)
SOMARRO.
n. Carne asada.
SOMONTANO.
n. El terreno colocado a la falda de alguna cordillera, como el de
Moncayo. (semontano; so, sos, sus, debajo del monte)
SONDORMIR.
n. Dormir con sueño ligero. (sondormí)
SOPA.
n. Se usa en la frase a sopas hechas para indicar que se ha llegado
cuando todo estaba dispuesto o concluido.
SOPAPO.
d. Revés.
SOPERO.
n. Especie de babero o pañizuelo que se pone a los niños al pecho
en equivalencia de la servilleta.
SOPORTALES.
n. Portales, galería que forman las fachadas de una línea de calle
o plaza.
SOSMESOS.
n. Vasallos: léese en muchos documentos, y es de los vocablos
aragoneses reunidos por Blancas. (someter, so: sos: sus + meter;
sotsmes)
SOSTOBAR.
SOTOBAR. d. Mullir. (sostobá :
moure)
SOTA.
a. Mujer deslenguada y sin vergüenza.
SOTA-CEMILERO.
n. Empleado real dependiente del sobreacemilero. (sobre, super vs
sota, so, sos, sus, sub, etc)
SUDADERO.
n. Bache o cubierto en que se encierra al ganado, para pasar desde él
las reses al esquiladero: la Academia lo incluye como provincial de
Estremadura, pero indicando ser el mismo esquiladero.
SUDAR.
n. En las expresiones sudar pez coca, sudar el quilo, significa sudar
copiosamente.
SUELDO.
a. Moneda imaginaria de ocho cuartos.
SUFRIENZA.
n. Véase rupias.
SUMSIDO.
n. Lo mermado y aun seco por la acción del calor o la del tiempo.
(semat) SUMSIRSE. n. Encogerse, reducirse en volumen:
generalmente se dice de los comestibles. (semás; la carbassa se
ha semat; no me miros tan que me semo)
SUPERLEVADOR.
n. Caplevador: lo interpreta el Glosario del Memorial histórico
español que publica la Academia de la Historia, en su tomo 2.°
SUPLICACIONES.
c. Barquillos: se usa con preferencia en Aragón y se ve empleada en
las Ordenaciones de Pedro IV.
SUSANA.
n. Se usa en la frase subírsele a uno la susana a la cabeza para
denotar que ha montado en cólera o que toma una resolución extrema:
en Castilla susano es lo que está en la parte superior, en
Navarra lo próximo o cercano.
SUSTITUCIÓN
COMPENDIOSA. n. La que participa de la vulgar y fideicomisaria, que
son las tres que en Aragón se conocen.
[querado]. V. cresáu. / fusta querada, corcada , den corcada, den querada [quiesto]. V. puesto. quis, quis. Flequillo que se deja a los chicos sobre la frente cuando se les corta el pelo raso, o el pelo más corto que llevan las niñas hasta la mitad de su frente, teniendo el resto más longitud y posibilidad de peinarse y trenzarse. V. también llamar a animales. rabosiar. Comer, probar, quitar a hurtadillas pequeñas cantidades de golosinas, de manjares o cosas apetitosas. racén. Ronzal. radedor. Rasero, un cilindro de madera para pasarlo por los bordes de la unidad fanega cuando no se mide con caramuello. / un atra medida, lo doble decálitro rallera. Hendiduras, grietas muy grandes en las vacas. rampallos. Tallos, ramas con muchas hojas. Borao dice ‘pimpollos’; aquí tiene significación más extensa. rasa. Especie de acequia, junto a las márgenes de una huerta, para el paso del agua que ha de distribuirse para el riego, en cancillos y eras. rasmiazo. Herida ligera que lastima la piel.
ray. ¡Icho ray! equivale a eso no importa, eso ya lo tenía previsto, eso no me preocupa, eso es fácil de arreglar. Rai. Ixo rai.
razón. Un objeto compuesto de dos maderas, en forma de tenaza, que emplean los zapateros para hacer ciertas costuras en pieles y en pellejos para contener vino. / mi mujer es muy de bota, devota no tanto rebailaderas. Las patatas muy menudas que se dan, cocidas en la pastura, a los cerdos. recáu, plato de. Plato compuesto de patata, garbanzos, judías, etc. Legumbre, tubérculo, verduras, etc. todo mezclado. / recapte rechirar 32. Desordenar, revolver las cosas, buscar sin tino ni cuidado algo en un cajón, un cesto, etc. / regirá , rechirá recholáu. Frontón; pared, muro en que se juega a la pelota. regata. Grieta en un mueble, tabla, tabique, techo, etc. / Com la regata de la franja del meu cul [regatiellos]. V. aturar. regatón. El último eslabón de una cadena con muelle, para unirla con una anilla o para atarla a un objeto o cosa.
remojón. Rebanada grande de pan, bien tostado, impregnado de aceite y adobado con ajo o con azúcar, según los gustos. En los tornos (molinos de aceite) se hacen y se come mucho o remojón d’o torno. Mojón. remugar. Rumiar. repalmar. Estante, repisa, tabla para colocar en alto alguna cosa; especie de saliente o cornisa para sostener objetos y guardar cosas. 32. Según la corrección de Refranes; en el Vocabulario se lee rechisar. repatán. El pastor de menos categoría y responsabilidad, pastorcillo. No es, pues, ni mucho menos, el rabadán de la Academia. repuy. O repuy 33, lo último de un depósito, de un montón, de un tonel, etc. reteculas, a. Andando hacia atrás. / a recules retegot. La gota o gotas de vino que caen de un tonel si la canilla o zurred no cierran bien. retepelo, a. Hacer algo por fuerza, obligado, de mala gana. retólica, -s. No me vengas con retólicas, explicaciones, razones, cuentos. Conversación larga y pausada. / retórica
reús. Lo sobrante; lo que queda desperdiciado; lo último. Generalmente se aplica a lo que queda en fuentes, platos y bandejas después de servir a los comensales o invitados; el vino que queda en el vaso después de haber bebido parte del que contenía. / repuy reuto. Rédito. revencillada. Movimiento brusco hacia atrás de los niños que se llevan en brazos; deslizarse inclinando el cuerpo, sin caer, hacia atrás.
revulcaizo. Sitio arenoso o de tierra suelta en que van las perdices a esponjarse y revolcarse. / revolcadís
rimallos. La piedra que deja una riada en los remansos o el granizo que se amontona, por el viento o por el relieve del suelo, después de una tormenta.
ripa. Montón. riscla. Los trozos leñosos del tallo hueco del cáñamo después de obtener la fibra con el agramado. / riscla, astilla, de tal tocho, tal riscla robadera. Traílla. rolde, cazar a. Cubrir con paja una jaula con gorriones de nido, en las eras donde se trilla, y rodear con varillas que tienen liga la trampa para cazar pájaros.
roña, roñoso. Suciedad. Significa también lloro, llorar, llorador; miserable, insistente y pesado al decir o pedir. [roñoso]. V. roña. roñoso, -a; rubinoso, -a. Cosa oxidada. / rovelló, rovell, robelló (de rubeo) rosigallo, rosigón. Trozo de pan seco, tirado, olvidado, abandonado, duro. / rossegó de pa per a almorsá rosigar. Roer; comer trozos de pan duro; comer con los dientes incisivos o por mala o defectuosa dentadura.
[rosigón]. V. rosigallo. rubinoso. Oxidado. V. también roñoso, -a. 33. Así en Refranes; en el Vocabulario pone literalmente «repuy: o reputy; lo último de un depósito, de un montón, de un tonel, etc.». Se trata, pues, simplemente, de la repetición de la palabra precedida del artículo o con una errata evidente; siguiendo a Arnal Cavero, Rohlfs introduce la entrada repuy o reputy. ruello. Semilla dura de fruta, especialmente del melocotón, cereza, ciruela, etc.; rodillo, cilindro de piedra para moler aceitunas, para apisonar el suelo de las eras y para desgranar legumbres. / roll , trucol no es cilindro rustir. Comer pan muy seco y duro; roer. / res que vore en rostí , rostixgo , rostixes , rostix , rostim , rostiu , rostixen rutir. Acción de eructar. / rot;rotá: roto, rotes, rote, rotem o rotam, rotéu o rotáu, roten. / salir o portal. Correr el agua, cuando llueve, lo suficiente para atravesar la longitud de un cubierto que hay bajo la escuela, llamado o portal d’ostudio. / A Beseit ñabíe una canaleta que ixíe desde les escoles al carré san Roc enfrente de casa Guardia cuan plovíe prou. Cuan plou mol, ix la cometa. [sancho, sancho]. V. llamar a animales. sangardana. Lagartija. Sargantana. sarrampuz. Arbusto de hojas sentadas, tiernas, de vida efímera, que comen bien las cabras en primavera. senera. Arbusto de tallo de madera muy fuerte. Las hojas, su infusión, se toman como purgante, y el fruto, negro, menudo, es dulce y agradable. [sentadura]. V. tomatera. / tomata, tomates, tomatera / servilla. Bandeja, fuente o plato de metal cubierto con sedas, cintas, ramos y lazos (no amarillos) que contiene monedas de oro, plata y billetes. La lleva un mozo, el mayoral de la fiesta y, con la ronda, van de casa en casa; después de cantar y tocar, los vecinos dan una cantidad para ayudar a pagar los gastos de la fiesta. / plega dels quintos
simio, simia. Hueco, huero, vacío, bofo; semilla sin almendra o con los cotiledones, o cotiledón, sin desarrollo normal; semilla sin peso ni poder germinativo. / semat, semada siña, iña, iñor. Señora, señor. No se dice nunca siñor sino iñor al tratarse de hombres, y siña María o iña al llamar y nombrar a una mujer. sobraña. Mula sobraña, la que tiene unos dieciocho meses pero no la fuerza y el desarrollo necesarios para los trabajos más duros de carga, de arado o de carro. sostras. Desidioso, desaseado, desgarbado, descuidado. Se aplica sólo a hombres. sotovar. Ablandar, ahuecar, remover y cambiar de lado los colchones de la cama. / sostová: sostovo, sostoves, sostove, sostovem o sostovam, sostovéu o sostováu, sostoven.
sudera. La manta vieja o paño o tela burda que se pone en contacto con los lomos de las caballerías para que sienten mejor los aparejos de silla o carga y para que no hagan daño estas colchonetas o albardas en la piel del animal. / feltre; fieltro ta par d’astí, ta par d’allí. Hacia ahí, hacia allí. tafarra. Cincha que pasa por debajo de la cola de las caballerías para evitar que los aparejos, en las pendientes, se corran hacia el cuello de los animales de carga o silla. [tajaderas]. V. botanas.
tamborinada, tamborinazo. Tongada, golpe de agua, avenida, riada. Tamborinazo, golpe en riña, castigo y mal trato a otra persona. [tamborinazo]. V. tamborinada. tampó. Apócope de tampoco. Icho tampó ye verdá, eso tampoco es cierto. / tampoc
tancar. Cerrar el paso, obstruir. Análoga significación a la que tiene en catalán. / Como si fuese la única palabra que existe en aragonés y catalán igualicas / tancá, tanco, tanques, tanque, tanquem o tancam, tanquéu o tancáu, tanquen tarabidáu. Andamio, soporte, armazón de madera. tararaina. Tela de araña. / taragaña, teragaña tarquil. Tarquín. tarranco. Tronco poco grueso y seco; rama seca, leñosa. tarria. Cincha o correa para sujetar las colchonetas y albardas sobre lomos de las caballerías de carga y de silla. tartir. Respirar, hablar, en el sentido de no dar tiempo. No le dejó tartir, no lo dejó ni respirar; ni siquiera tartió, ni dijo nada, ni respiró siquiera. / Al Matarraña signifique "no pará quieto", no tartí / [tasca]. V. leva. [techanco]. V. chesanco. tener a Dios d’a garra. Frase irreverente que quiere indicar el orgullo del que blasona de autoridad, de influencia, de riquezas y bienandanzas. [tercenal]. V. fajina. [tercenas]. V. fajina. tímpanos. Las dos bases circulares de una cuba o tonel grande. / témpano en castellano.
tión. El viejo soltero, o soltero viejo. / mosso vell [tita, tita]. V. llamar a animales. titi. Gallina que no invita a ser comida por enfermiza, flacucha o repugnante. A yo que no m’en den d’icha titi. toballón. Paño de cocina; paño de manos; toalla burda. [tochazo]. V. tocho. tocho, tochazo. Palo, vara de pastor, bastón, cayado. Tochazo, golpe con un tocho, palo o vara gruesa. / tochada tociar. Golpearse los ganados, sobre todo los carneros y cabras, con la cabeza.
Tozar, según Borao. / tossá, lo choto tosse, los mascles salvaches tossen. tossada. tocino de güena boca. El hombre que come todo con igual deseo, el que es muy comedor, sin reparar qué ni cuándo. tocotiar. Manosear mucho, tocar sin necesidad alguna cosa. / toquetejá, toquetiá tomatera. Herida (sentadura) en los lomos de las caballerías de carga. tongada. Golpe de agua; riada, corriente de un río aumentada. toña. Pan moreno, grande, redondo, de poco grueso, pero más que la torta. torcedor. El palo que se emplea para hilar o torcer la yerba verde que se pone en tuertas y que, después de secas o henificadas, son buen pienso para los ganados; tenaza para sujetar el morro de las caballerías. torno. Molino de aceite. [torrocazo]. V. torrueco. torrueco, torrocazo. Tormo de tierra; golpe con un tormo de esa tierra dura y seca, principalmente arcillosa. Cuando se aran los campos de tierras fuertes (arcillosas) se levantan muchos y grandes torruecos o tormos. / tarrós, tarrossada, Tarrós de Queretes, argila tortetas. Masa de harina y sangre de cerdo que se hace en los mondongos; se hacen en forma de anillos o pequeños roscones. toscón. Nieve menuda y dura; cristalización de la nieve en ventiscas: matacabras.
totiplé, a. En abundancia, sin tasa. / tot ple, todo lleno / a tutiplén en castellano totón. Huraño, poco social, poco comunicativo; fantasma, máscara, disfraz.
tráimene, traine, m’en trairás. Formas de arquitectura gramatical, posposiciones que tal vez tengan igual origen que construcciones del francés. [traine]. V. tráimene. tramenar. Andar mucho; andar deprisa. tramullar. Echar a perder, destrozar, destruir, ensuciar, enronar. A riada todo l’ha tramulláu dicen al hablar de los efectos de una avenida del río o de un barranco sobre huertas y fajas de regadío. [trascal]. V. jubo. trastallo. Senda que abrevia el camino, atajo. tres a un rey. Jugar a tres a un rey es jugar a la pelota tres un partido. Gana el que antes hace cierto número de tantos; lucha, juega, defiende uno el tanto contra los otros dos, turnando A contra B y C; B juega contra A y C, etc. tresbatir 34. Perderse, confundirse una cosa. [trespalar]. V. variar. triador. Plazuela, entrada del pueblo, camino ancho cerca de las casas en donde se reúne el ganado del pueblo por la mañana y desde donde se distribuye, por la noche, a todas las casas. tricallón. Tranca corta; palo grueso y corto; tronco no muy grueso y no muy largo. No tiene aquí, pues, el significado que se lee en el Diccionario de Borao. trincolas. Cascabel, pequeñas campanillas que llevan las mulas de labor en los arreos de labor.
troca. La pieza de tejido de cáñamo, lino o lana que se hacía en los pequeños y primitivos talleres de tejedores de Alquézar. Ya no hay ni uno de esos patios en que se tejía de forma tan rudimentaria.
troco. Entrada ancha para poder entrar en una demba o campo un carro. tronzar. Partirse la rama de un árbol al peso de una persona, no por la acción de la sierra. trosar. Dividir, repartir una o varias cosas entre varios. [trucar]. V. truco. trucazo. Golpazo con el llamador de una puerta; golpe al llamar con una piedra o palo. Paloma salvaje; paloma torcaz. / trucar , paloma o colom turcás truco. Esquilón, cencerro; nombre en el juego de truque. Del verbo trucar (llamar, golpear).
[trujon]. V. en.
truque. Golpe; juego de envite; juego de la chica. 34. Según Refranes; en el Vocabulario ponía trebatir, verbo que, con esta referencia, incluyen Andolz y Rohlfs. [tu, ti, tui]. V. llamar a animales. tuerta. Yerba seca, henificada, hilada y recogida en forma de madeja, muy original y práctica. Se deshacen las tuertas en los pesebres, para el invierno, y es buen alimento para el ganado, sobre todo las tuertas de aveza, de alfalfa y de hordio 35.
[tusmazo]. V. tusmo. tusmo, tusmazo. Piedra; pedrada. Torrueco; torrocazo.
Ara,
Daniel, lo Mussol, ya sabíe lo que ere tindre lo ventre sec y lo que
ere malparí o un aborto. Va pensá en Roc, lo Moñigo. Potsé si no
haguere conegut a Roc, lo Moñigo, seguiríe, an estes altures, sense
sabé lo que ere un ventre sec y lo que ere un aborto. Pero Roc, lo
Moñigo, sabíe mol de tot "assó". Sa mare li díe que no
se ajuntare en Roc, perque lo Moñigo se habíe criat sense mare y
sen sabíe moltes. Tamé les Guindillas (Pestetes de aquí abán)
li díen assobín que per ajuntás en lo Moñigo ya ere lo mateix que
ell, un golfo y un dropo. Daniel, lo Mussol, sempre eixíe en defensa
de Roc, lo Moñigo. La gen del poble no lo compreníe o no volíe
compéndrel. Que Roc sapiguere mol de "assó" no
significabe que fore un golfo y un dropo. Que fore forsut com un bou
y com son pare, lo ferré, no volíe di que fore roín. Que son pare,
lo ferré, tinguere sempre a la forja una bota de vi y la empinare de
cuan en cuan no equivalíe a sé un borracho empedernit, ni podíe
afirmás, en bona ley, que Roc, lo Moñigo, fore com son pare, perque
ya se sabíe que de tal tocho tal ascla. Tot aixó constituíe una
sarta de infamies, y Daniel, lo Mussol, u sabíe de sobres perque
coneixíe com dingú al Moñigo y a son pare.
De
que la dona de Paco, lo ferré, se moriguere al parí al Moñigo,
dingú teníe la culpa. Ni tampoc teníe la culpa dingú de la
falta de capassidat educadora de san germana Sara, massa brusca y
recta pera sé dona. La Sara va portá lo pes de la casa desde la
mort de sa mare. Teníe lo pel roch y acaragolat, y ere corpulenta y
massisa com son pare y son germá. A vegades, Daniel, lo Mussol,
imaginabe que la mort de sa mare de Roc, lo Moñigo, va sé per no
tindre aquella lo pel roch. Lo pel roch podíe sé, en efecte, un
motiu de llarga vida o longevidat, per lo menos, una espessie de
amuleto protectó. Fore per una raó o un atra, lo sert es que sa
mare del Moñigo se va morí al naixe ell y que san germana Sara,
tretse añs mes gran, lo va tratá desde entonses com si fore un
assessino sense salvassió. Claro que la Sara teníe poca passiensia
y sol sabíe renegá. Daniel, lo Mussol, la habíe conegut corrén
detrás de son germá escales aball, cridán desaforadamen:
-
¡Animal, mes que animal, que ya abáns de naixe eres un animal!
Después la va sentí repetí este estribillo sentenás y hasta
milenás de vegades; pero a Roc, lo Moñigo, li entrabe per una
orella y li eixíe pel atra. Seguramen lo que mes va avinagrá lo
carácter de la Sara va sé lo fracás redó del seu sistema
educatiu. Desde mol chiquet, lo Moñigo va sé refractari al Coco, al
home del sac y al Tío Camuñas. Segú que va sé la seua solidés
física la que li va inspirá este olímpic despressio cap a tot lo
que no foren homens reals, en ossos, músculs y sang daball de la
pell. Lo sert es que cuan la Sara amenassabe a son germá, diénli:
"Que ve lo Coco, Roc, no faigues tal cosa", lo Moñigo
sonreíe
en malissia, com desafiánlo: "Hale, que vingue, aquí l´aguardo".
Entonses lo Moñigo apenes teníe tres añs y encara no parlabe casi
gens. A la Sara se la emportaben los dimonis al constatá la
inutilidat de la seua amenassa en la indiferensia burlona del
sagalet. Poc a poc, lo Moñigo va aná creixén y san germana Sara va
apelá a datres prossediméns. Solíe tancá a Roc a la pallissa si
fée alguna malesa, y después li lligíe, desde fora, lentamen y en
veu ombriosa y cavernosa, les recomendassións del alma.
Daniel,
lo Mussol, encara sen enrecordabe de una de les primeres visites a
casa del seu amic. La porta del carré estabe entreuberta y, a dins
no se veíe a dingú, ni se sentíe res, com si la casa estiguere
deshabitada. La escala que portabe al pis alt se alsabe insitán
dabán dell, pero ell la va mirá, va tocá lo passamáns, pero no se
va atreví a pujá.
Coneixíe
ya a la Sara de referénsies y aquell increíble silensio li
inspirabe una mica de respecte o mes be temó. Se va entretindre un
rato acassán una sargantana que intentabe escabullís per les lloses
de la entrada. De repén va sentí una retahíla de furiosos
improperis, allá dal, seguits de una gran portada. Se va dessidí a
cridá, un poc acollonit:
-
¡Moñigo! ¡Moñigo!
Al
instán se va derramá damún dell un diluvio de frasses agressives.
Daniel se va ajupí.
Daniel,
lo Mussol, may va sabé per qué an aquella ocasió se va quedá com
enclavat an terra com si fore una estatua. Lo cas es que se va quedá
com un estaquirot y mut, casi sense respirá. Entonses va sentí
parlá a dal a la Sara y va pará la orella. Per lo forat de la
escala se desgranaben les seues frasses:
-
Cuan los meus peus, perdén lo seu movimén, me advertixquen que la
meua carrera an este món está próxima al seu final... Y, detrás,
sonabe la veu del Moñigo, opaca y sorda, com si ixquere del fondo de
un pou: - Jesús misericordiós, tin compassió de mí.
Un
atra vegada les inflexións de la Sara:
-
Cuan los meus ulls vidriosos y fora de les cassoletes per lo horror
de la inminén mort, fixon en vos les seues mirades lánguides y
moribundes...
-
Jesús misericordiós, apiádat de mí.
Se
anabe apoderán de Daniel, lo Mussol, una temó gelada y impalpable.
Aquella tétrica letanía li fée cusigañes al moll dels ossos. Sin
embargo, no se va moure del puesto. L´agullonabe una difusa y
impersonal curiossidat.
-
Cuan perduts los sentits - continuabe, monótona, la Sara - tot lo
món desaparegue de la meua vista y gemega yo entre les angusties de
la radera agonía y los afáns de la mort...
Un
atra vegada la veu amodorrada y sorda y tranquila del Moñigo, desde
la pallissa:
-
Jesús misericordiós, teníu compassió de mí.
Al
acabá la Sara lo seu correctiu verbal, se va fé impassién la veu
de Roc:
-
¿Has acabat?
-
Sí - va di la Sara.
-
Hale, pos obri.
La
interrogassió siguién de la Sara portabe un despecho mal reprimit:
-
¿Has escarmentat?
-
¡No!
-
Entonses no te óbrigo.
-
Obri o tiro la porta. Lo cástic ya se ha acabat.
Y
la Sara li va obrí. Lo Moñigo li va di al passá pel seu costat:
-
Me has fet menos temó que atres díes, Sara.
La
germana se abalotabe, furiosa:
-
¡Calla, gorrino! Un día... un día te partiré los nassos o no sé
lo que te faré.
-
Assó no; no me tocarás, Sara. Encara no ha naixcut lo que me fico
la ma damún, ya u saps - va di lo Moñigo.
Daniel,
lo Mussol, va esperá a vore si escoltáe lo estampit de la bufetada,
pero la Sara su va pensá milló y lo estampit previst no se va
produí. Va escoltá Daniel, en cambi, les potades firmes del seu
amic al baixá los escalóns, y mogut per un pudorós instín de
discressió, va eixí per la porta ajuntada y lo va esperá al carré.
Ya al seu costat, lo Moñigo va di: - ¿Has sentit a la Sara?
Daniel,
lo Mussol, no se va atreví a mentí:
-
La hay sentit - va di.
-
Ten haurás fixat en que es una pamplinera.
-
A mí me ha fet agarrá temó, la verdat - va confessá lo Mussol.
-
¡Bah!, no faigues cas. Tot assó dels ulls vidriosos y los peus que
no se mouen són pamplines. Mon pare diu que cuan estires la garra no
ten enteres de res.
Va
moure lo Mussol, dudán, lo cap.
-
¿Cóm u sap ton pare? - va di.
A
Roc, lo Moñigo, no se li habíe ocurrit pensá en assó. Va dudá un
momén, pero en seguida va aclarí:
-
¡Qué me sé yo! Lay diríe ma mare al morís. Yo no men puc
enrecordá de assó.
Desde
aquell día, Daniel, lo Mussol, va alsá mentalmen al Moñigo a un
altá de admirassió. Lo Moñigo no ere listo, pero, ¡vaya tío
mantenínles tiesses en los grans! Roc, a ratos, pareixíe un
home per lo seu aplom y gravedat. No admitíe imposissións ni tampoc
una justíssia cambián y caprichosa. Una justíssia doméstica, se
sobreentén. Per la seua part, san germana lo respetabe. La
voluntat del Moñigo no ere un cero a la esquerra com la seua; valíe
per la voluntat de un home; se la teníe en cuenta a casa seua y al
carré. Lo Moñigo teníe personalidat. Y, tal com transcurríe lo
tems, va aná aumentán la admirassió de Daniel per lo Moñigo. Este
se pegabe o reñíe assobín en los sagals de la valleta y sempre
eixíe victoriós y sense cap ñafra o esgarrap. Una tarde, a una
romería, Daniel va vore al Moñigo esbatussá hasta fartás al que
tocabe lo timbal. Cuan se va cansá de fótreli cops li va empastrá
lo tambor al cap y se li va quedá de sombrero. La gen sen enríe
mol. Lo músic ere un home ya de casi vin añs y lo Moñigo sol ne
teníe onse. Pera entonses, lo Mussol habíe entés que Roc ere un
bon abre aon arrimás y se van fé inseparables, encara que la
amistat del Moñigo lo forsabe, a vegades, a extremá la seua ossadía
y lo implicabe an alguna regletada de don Moissés, lo maestre. Pero,
en compensassió, lo Moñigo li habíe servit en mes de una ocasió
de escut y paracops.
Sa
mare de Daniel, don José lo mossen, don Moissés lo maestre, la
Pesteta gran y les Lepóridas: les Llebres,
no teníen motius pera afirmá que Roc, lo Moñigo, fore un golfo y
un dropo. Si lo Moñigo reñíe en algú ere sempre per una causa
justa o perque procurabe la consecussió de algún fí utilitari y
práctic. May u va fé per fum de palla o per lo plaé de fotre cops.
Y un atre tan passabe en son pare, lo ferré. Paco, lo ferré,
traballabe com lo que mes y guañabe bastáns dinés. Claro que pera
la Pesteta gran y les Llebres no existíen mes que dos extrems al
poble: los que guañaben pocs dinés y de estos díen que eren uns
dropos y uns ganduls, y los que guañaben mols dinés, dels que
afirmaben que si treballaben ere sol pera gastássels en vi. Les
Llebres y la Pesteta gran exigíen un pun de equilibri mol raro y
difíssil de conseguí. Pero la verdat es que Paco, lo ferré, bebíe
per nessessidat. Daniel, lo Mussol, u sabíe, perque coneixíe a Paco
milló que dingú. Y si no bebíe, la forja no carburabe. Paco, lo
ferré, u díe moltes vegades: "Tampoc los autos van sense
gasolina". Y se embutíe un trago cap al garganchó.
Después
del trago traballabe en mes forsa. Aixó, pos, a final de cuentes,
redundabe en benefissi del poble. Pero lo poble no lay agraíe y li
díe pocavergoña y gat. Menos mal que
lo ferré teníe correcha, com lo seu fill, y aquells insults no li
feen mal. Daniel, lo Mussol, pensabe que lo día que Paco, lo ferré,
se enfadare no quedaríe al poble pedra sobre pedra; u arrassaríe tot
com un huracán. No ere tampoc cosa de tráureli en cara al ferré
que piropejare a les mosses que passaben per dabán de la ferrería y
les invitare a assentás un rato en ell a charrá y a fé un traguet.
En realidat, ere viudo y estabe encara en edat de mereixe. Ademés,
la seua exuberansia física ere un bon insentiu pera les dones. A fí
de cuentes, don Antonino, lo marqués, se habíe casat tres vegades y
no per naixó la gen dixáe de díli don Antonino y seguíe traénse
la boina al crusás en ell, pera saludál. Y continuabe sén lo
marqués. Después de tot, si Paco, lo ferré, no se casabe u fée
per a no donáls cap madrastra als seus fills y no per tindre mes
dinés disponibles pera vi com insinuaben en malíssia la Pesteta
gran y les Llebres.
Los
domenges y díes de festa, Paco, lo ferré, se engatinabe a casa del
Chano hasta la incoherensia. Al menos assó díen la Pesteta gran y
les Llebres. Pero si u fée aixina, les seues raóns tindríe lo
ferré, y una de elles, y no desdeñable, ere la de olvidás dels
radés sis díes de treball y de la inminensia de uns atres sis en
los que tampoc descansaríe. La vida ere aixina de exigén y
despiadada en los homens. A vegades, Paco, al que lo temperamén se
li exaltabe en lo alcohol, armabe a la taberna del Chano trifulques
considerables. Aixó sí, may tirabe de navalla encara que los seus
adversaris u faigueren. Encara aixina, les Llebres y la Pesteta gran
díen dell – de ell, que reñíe sempre a pit descubert y en la
noblesa mes gran consebible - que ere un asquerós matón. En
realidat, lo que los mortificabe a la Pesteta gran, a les Llebres, al
mestre, al ama de don Antonino, a sa mare de Daniel, lo Mussol, y a
don José, lo mossen, eren los músculs abultats del ferré; la seua
personalidat irreductible; la seua hegemonía física. Si Paco y
son fill hagueren sigut uns arguellats, al poble no li importaríe
que foren borrachos o camorristes; en consevol momén podíen tombáls
de una galtada. Dabán de aquella inaudita corpulensia, la cosa
cambiabe; habíen de conformás en fótrels verds per la esquena. Be
díe Andrés, lo sabaté: "cuan a la gen li falte músculs als
brassos, los sobre en la llengua". Don José, lo mossen, que ere
un gran san, encara que li censurabe ubertamen a Paco, lo ferré, les
seues eixides, sentíe per nell una secreta simpatía. Per mol
que tronare no podríe olvidá may lo día de la Virgen, aquell añ
en lo que Tomás se va ficá mol dolén y no va pugué portá lo
soport per a la imache. Julián, un atre dels habituals portadós de
la virgen, va tindre que eixí del lloch en un viache urgén. La cosa
se ficabe fea. No eixíen sustituts. Don José, lo mossen, va pensá,
inclús, en suspendre la professó. Va sé entonses cuan se va
presentá, humilmen, a la iglesia Paco, lo ferré.
-
Siñó retó, si vosté vol, yo puc passejá la Virgen per lo poble.
Pero ha de sé en la condissió de que me la dixon portá a mí sol -
va di.
Don
José li va sonriure en picardía al ferré.
-
Fill, te agraíxco la teua voluntat y no dudo de les teues forses.
Pero la imache pese mes de dosséns kilos - va di. Paco, lo ferré,
va acachá los ulls, una mica avergoñit de la seua enorme
forseguera.
-
Podría portá damún sen kilos mes, siñó retó. No siríe la
primera vegada...- va insistí.
Y
la Virgen va voltá lo poble damún dels muscles de Paco, lo ferré,
a pas lento y
fen
cuatre parades: a la plassa, dabán del ajuntamén, enfrente de
Teléfonos y, de tornada, al atrio de la iglesia, aon se va entoná,
com ere costum, una Salve populá. Al acabá la professó, los
chiquets van voltá admirats a Paco, lo ferré. Y este, ficán una
sonrissa de chiquet, los obligabe a paupáli la camisa al pit, a la
esquena, als sobacos.
-
Tentéu, toquéu - los díe -; no estic suat; no hay suat ni una
gota.
La
Pesteta gran y les Llebres li van criticá a don José, lo mossen,
que haguere autorisat a ficá la imache de la Virgen damún dels
muscles mes pecadós del poble. Y van jusgá lo acte de mérit de
Paco, lo ferré, com una ostentassió evidenmen pecaminosa. Pero
Daniel, lo Mussol, estabe en lo sert: lo que no podíe perdonásseli
a Paco, lo ferré, ere la seua complexió y sé lo home mes vigorós de la vall, de tota la vall.
fiexa, afixa (afija, fija), o afierra (aferra) o se pega. (fixo : fijo)
fel, fiel, hiel. (Derivados de fidel, fideles - fieles - se encuentran fael, feel, faels, feels)
felix, dichoso. (feliz; Félix)
fellóna (fellona), enojada.
feltre, maraña difícil de deshacer. (fieltro, tipo de tejido; usado en caballerías)
fem, estiércol. (fiemo; femater : texto de Vicente Blasco Ibáñez : estercolero, el que recogía el estiércol y sobras de las casas pudientes para revender o usar en los campos propios)
fem, hacemos. (Verbo fer: hacer : en chapurriau: yo fach, tú fas, ell o ella fa, natros o natres fem, vatros o vatres feu o féu, ells o elles fan; facere; faire francés; rumano “ché fach” : qué haces?, cómo va?)