Mostrando las entradas para la consulta encantada ordenadas por relevancia. Ordenar por fecha Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas para la consulta encantada ordenadas por relevancia. Ordenar por fecha Mostrar todas las entradas

martes, 22 de diciembre de 2020

Lo corv. Edgar Allan Poe.

Lo corv.

Edgar Allan Poe.

Traducsió de Ramón Guimerá Lorente (Moncho).


Lo corv. Edgar Allan Poe. Traducsió de Ramón Guimerá Lorente, Moncho

Traducsió de una versió trobada a internet
que no té res a vore en la original de Edgaret "The Raven".
Carlos Arturo Torres.


I

Una nit pavorosa, ñirviós
relligía un mamotreto gros
cuan vach creure escoltá
un extrañ soroll, de repén
com si algú tocare suavemén
a la meua porta: «Visita impertinén
es, vach di, y res mes».

II

¡Ah! Men enrecordo mol be; ere al ivern,
impassién yo medía lo tems etern
cansat de buscá
als llibres la calma tranquilisadora
al doló de la morta Leonora
que habite en los ángels ara
¡pera sempre mes!

III

Vach sentí los cruixits y l´elástic
rosá de les cortines, un fantástic
terror, com may sentit había
y vach volé aquell soroll explicám,
lo meu espíritu oprimit calmá per fin:
«Un viaché perdut es,
vach di, y res mes».

IV

Ya en mes calma: «Caballé
vach cridá, o dama, suplicátos vull
tos servigáu excusá
pero la meua atensió no estabe ben desperta
y va sé la vostra cridada tan inserta...»
Vach obrí allabonses de gom a gom la porta:
oscurina, y res mes.

V

Miro al no res, exploro la tiniebla
y séntigo entonses que la meua mén
se ompli de idees com cap atre mortal
les va tindre abáns,
y escolto en oíts anhelans
«Leonora » unes veus sussurrans
murmurá, y res mes.

VI

Torno a la meua estansia en temó
y torno a escoltá mes fort fotre cops;
«algo, me dic, toque a la finestra,
compendre vull la siñal arcana
y calmá esta angustia sobrehumana»:
¡lo ven, y res mes!

VII

La finestra vach obrí: revolán
vach vore entonses un corv aleteján
com un muixó de un atra edat;
sense mes seremonia va entrá a la sala
en gesto siñorial y negres ales
y damún de un busto, al dintel de Palas,
se va posá, y res mes.

VIII

Miro al muixó negre, sonrién
dabán del seu grave y serio continén
y li escomenso a parlá,
no sense intensió irónica:
«Oh corv, oh venerable ave anacrónica,
¿quín es lo teu nom a la regió plutónica?»
Va di lo corv: «May mes».

IX

En este cas tan raro
me vach extraña de escoltá tan cla
tal nom pronunsiá
y ting que confessá que me vach assustá
pos dingú, crec, va tindre lo gust
de un corv vore, posat damún de un busto
en tal nom: «May mes».

X

Com si haguera volcat l´alma,
va callá lo muixó y ni un momén
les plomes va sorollá,
«datres de mí han fugit y yo me crec
que ell sen anirá demá sense tardá
com ya m´ha abandonat la esperansa»;
va di lo corv: «¡May mes! »

XI

Una resposta al escoltá directa
me vach di, no sense inquietut secreta,
«Es aixó y res mes.
Tot lo que va adependre de un amo desgrassiat,
al que tossut ha perseguit la fortuna
y sol este estribillo ha conservat
¡eixe may mes, may mes!»

XII

Vach girá l´assiento hasta quedám enfrente
de la porta, del busto y del vidén corv
y entonses ya, reclinat a la blana cadira
en somnis fantastics me afonaba,
pensán sempre en qué volíe di
aquell may mes, may mes.

XIII

Mol tems me vach quedá aixina ensomián,
y aquell extrañ muixó
sense pará mirán;
ocupabe lo diván
de vellut, aon juns mos assentabem
y en lo meu dol, pensaba que Ella,
may mes ocuparíe esta habitassió.

XIV

Entonses me va pareixe l´aire denso
com una auló de sucarrat incienso
de un invissible altá;
y escolto veus repetí:
«Olvida a Leonor, béute lo nepenthes
beu l´olvido a les seues fons»;
va di lo corv: «¡May mes! »

XV

«Profeta, vach di, augur de atres edats
que van aventá les negres tempestats
aquí peral meu mal,
huésped de esta morada de tristesa,
dísme, oscur engendre de la nit de paó,
si una mel ñaurá per a la meua amargó»:
va di lo corv: «¡May mes!»

XVI

«Profeta, vach di, o dimoni, tú, corv,
per Deu, per mí, per la meua gran doló,
per lo teu poder fatal
dísme si alguna vegada a Leonora
tornaré a vore a la eternal aurora
aon está felís en los querubins»;
va di lo corv: «¡May mes! »

XVII

«Que sigue esta paraula la radera,
torna a la plutónica rivera»,
vach cridá: «¡No tornos mes,
no dixos ni potades, ni una ploma
y lo meu espíritu, rodejat de densa broma
libera del pes que té!»
Va di lo corv: «¡May mes! »

XVIII

Y lo corv parat, fúnebre y adusto
seguix sempre de Palas posat al busto
y en la llum del meu cresol,
proyecte una taca umbría a la alfombra
y la seua mirada de demoni assombre...
¡Ay! ¿La meua alma en dol
de la seua sombra se podrá apartá?
¡May mes!

https://narrativabreve.com/2017/02/el-cuervo-allan-poe-en-estado-puro.html

Aquí os ofrezco la traducción de Julio Cortázar y, tras esta, la versión original (The Raven).

Una vez, al filo de una lúgubre media noche,
mientras débil y cansado, en tristes reflexiones embebido,
inclinado sobre un viejo y raro libro de olvidada ciencia,
cabeceando, casi dormido,
oyóse de súbito un leve golpe,
como si suavemente tocaran,
tocaran a la puerta de mi cuarto.
“Es —dije musitando— un visitante
tocando quedo a la puerta de mi cuarto.
Eso es todo, y nada más.”

¡Ah! aquel lúcido recuerdo
de un gélido diciembre;
espectros de brasas moribundas
reflejadas en el suelo;
angustia del deseo del nuevo día;
en vano encareciendo a mis libros
dieran tregua a mi dolor.
Dolor por la pérdida de Leonora, la única,
virgen radiante, Leonora por los ángeles llamada.
Aquí ya sin nombre, para siempre.

Y el crujir triste, vago, escalofriante
de la seda de las cortinas rojas
llenábame de fantásticos terrores
jamás antes sentidos.  Y ahora aquí, en pie,
acallando el latido de mi corazón,
vuelvo a repetir:
“Es un visitante a la puerta de mi cuarto
queriendo entrar. Algún visitante
que a deshora a mi cuarto quiere entrar.
Eso es todo, y nada más.”

Ahora, mi ánimo cobraba bríos,
y ya sin titubeos:
“Señor —dije— o señora, en verdad vuestro perdón imploro,
mas el caso es que, adormilado
cuando vinisteis a tocar quedamente,
tan quedo vinisteis a llamar,
a llamar a la puerta de mi cuarto,
que apenas pude creer que os oía.”
Y entonces abrí de par en par la puerta:
Oscuridad, y nada más.

Escrutando hondo en aquella negrura
permanecí largo rato, atónito, temeroso,
dudando, soñando sueños que ningún mortal
se haya atrevido jamás a soñar.
Mas en el silencio insondable la quietud callaba,
y la única palabra ahí proferida
era el balbuceo de un nombre: “¿Leonora?”
Lo pronuncié en un susurro, y el eco
lo devolvió en un murmullo: “¡Leonora!”
Apenas esto fue, y nada más.

Vuelto a mi cuarto, mi alma toda,
toda mi alma abrasándose dentro de mí,
no tardé en oír de nuevo tocar con mayor fuerza.
“Ciertamente —me dije—, ciertamente
algo sucede en la reja de mi ventana.
Dejad, pues, que vea lo que sucede allí,
y así penetrar pueda en el misterio.
Dejad que a mi corazón llegue un momento el silencio,
y así penetrar pueda en el misterio.”
¡Es el viento, y nada más!

De un golpe abrí la puerta,
y con suave batir de alas, entró
un majestuoso cuervo
de los santos días idos.
Sin asomos de reverencia,
ni un instante quedo;
y con aires de gran señor o de gran dama
fue a posarse en el busto de Palas,
sobre el dintel de mi puerta.
Posado, inmóvil, y nada más.

Entonces, este pájaro de ébano
cambió mis tristes fantasías en una sonrisa
con el grave y severo decoro
del aspecto de que se revestía.
“Aun con tu cresta cercenada y mocha —le dije—,
no serás un cobarde,
hórrido cuervo vetusto y amenazador.
Evadido de la ribera nocturna.
¡Dime cuál es tu nombre en la ribera de la Noche Plutónica!”
Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

Cuánto me asombró que pájaro tan desgarbado
pudiera hablar tan claramente;
aunque poco significaba su respuesta.
Poco pertinente era. Pues no podemos
sino concordar en que ningún ser humano
ha sido antes bendecido con la visión de un pájaro
posado sobre el dintel de su puerta,
pájaro o bestia, posado en el busto esculpido
de Palas en el dintel de su puerta
con semejante nombre: “Nunca más.”

Mas el Cuervo, posado solitario en el sereno busto.
las palabras pronunció, como virtiendo
su alma sólo en esas palabras.
Nada más dijo entonces;
no movió ni una pluma.
Y entonces yo me dije, apenas murmurando:
“Otros amigos se han ido antes;
mañana él también me dejará,
como me abandonaron mis esperanzas.”
Y entonces dijo el pájaro: “Nunca más.”

Sobrecogido al romper el silencio
tan idóneas palabras,
“sin duda —pensé—, sin duda lo que dice
es todo lo que sabe, su solo repertorio, aprendido
de un amo infortunado a quien desastre impío
persiguió, acosó sin dar tregua
hasta que su cantinela sólo tuvo un sentido,
hasta que las endechas de su esperanza
llevaron sólo esa carga melancólica
de ‘Nunca, nunca más’.”

Mas el Cuervo arrancó todavía
de mis tristes fantasías una sonrisa;
acerqué un mullido asiento
frente al pájaro, el busto y la puerta;
y entonces, hundiéndome en el terciopelo,
empecé a enlazar una fantasía con otra,
pensando en lo que este ominoso pájaro de antaño,
lo que este torvo, desgarbado, hórrido,
flaco y ominoso pájaro de antaño
quería decir graznando: “Nunca más.”

En esto cavilaba, sentado, sin pronunciar palabra,
frente al ave cuyos ojos, como-tizones encendidos,
quemaban hasta el fondo de mi pecho.
Esto y más, sentado, adivinaba,
con la cabeza reclinada
en el aterciopelado forro del cojín
acariciado por la luz de la lámpara;
en el forro de terciopelo violeta
acariciado por la luz de la lámpara
¡que ella no oprimiría, ¡ay!, nunca más!

Entonces me pareció que el aire
se tornaba más denso, perfumado
por invisible incensario mecido por serafines
cuyas pisadas tintineaban en el piso alfombrado.
“¡Miserable —dije—, tu Dios te ha concedido,
por estos ángeles te ha otorgado una tregua,
tregua de nepente de tus recuerdos de Leonora!
¡Apura, oh, apura este dulce nepente
y olvida a tu ausente Leonora!”
Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

“¡Profeta!” —exclamé—, ¡cosa diabolica!
¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio
enviado por el Tentador, o arrojado
por la tempestad a este refugio desolado e impávido,
a esta desértica tierra encantada,
a este hogar hechizado por el horror!
Profeta, dime, en verdad te lo imploro,
¿hay, dime, hay bálsamo en Galaad?
¡Dime, dime, te imploro!”
Y el cuervo dijo: “Nunca más.”

“¡Profeta! —exclamé—, ¡cosa diabólica!
¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio!
¡Por ese cielo que se curva sobre nuestras cabezas,
ese Dios que adoramos tú y yo,
dile a esta alma abrumada de penas si en el remoto Edén
tendrá en sus brazos a una santa doncella
llamada por los ángeles Leonora,
tendrá en sus brazos a una rara y radiante virgen
llamada por los ángeles Leonora!”
Y el cuervo dijo: “Nunca más.”

“¡Sea esa palabra nuestra señal de partida
pájaro o espíritu maligno! —le grité presuntuoso.
¡Vuelve a la tempestad, a la ribera de la Noche Plutónica.
No dejes pluma negra alguna, prenda de la mentira
que profirió tu espíritu!
Deja mi soledad intacta.
Abandona el busto del dintel de mi puerta.
Aparta tu pico de mi corazón
y tu figura del dintel de mi puerta.
Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

Y el Cuervo nunca emprendió el vuelo.
Aún sigue posado, aún sigue posado
en el pálido busto de Palas.
en el dintel de la puerta de mi cuarto.
Y sus ojos tienen la apariencia
de los de un demonio que está soñando.
Y la luz de la lámpara que sobre él se derrama
tiende en el suelo su sombra. Y mi alma,
del fondo de esa sombra que flota sobre el suelo,
no podrá liberarse. ¡Nunca más!

//


Once upon a midnight dreary, while I pondered weak and weary,
Over many a quaint and curious volume of forgotten lore,
While I nodded, nearly napping, suddenly there came a tapping,
As of some one gently rapping, rapping at my chamber door.
`’Tis some visitor,’ I muttered, `tapping at my chamber door –
Only this, and nothing more.’

Ah, distinctly I remember it was in the bleak December,
And each separate dying ember wrought its ghost upon the floor.
Eagerly I wished the morrow; – vainly I had sought to borrow
From my books surcease of sorrow – sorrow for the lost Lenore –
For the rare and radiant maiden whom the angels named Lenore –
Nameless here for evermore.

And the silken sad uncertain rustling of each purple curtain
Thrilled me – filled me with fantastic terrors never felt before;
So that now, to still the beating of my heart, I stood repeating
`’Tis some visitor entreating entrance at my chamber door –
Some late visitor entreating entrance at my chamber door; –
This it is, and nothing more,’

Presently my soul grew stronger; hesitating then no longer,
`Sir,’ said I, `or Madam, truly your forgiveness I implore;
But the fact is I was napping, and so gently you came rapping,
And so faintly you came tapping, tapping at my chamber door,
That I scarce was sure I heard you’ – here I opened wide the door; –
Darkness there, and nothing more.

Deep into that darkness peering, long I stood there wondering, fearing,
Doubting, dreaming dreams no mortal ever dared to dream before;
But the silence was unbroken, and the darkness gave no token,
And the only word there spoken was the whispered word, `Lenore!’
This I whispered, and an echo murmured back the word, `Lenore!’
Merely this and nothing more.

Back into the chamber turning, all my soul within me burning,
Soon again I heard a tapping somewhat louder than before.
`Surely,’ said I, `surely that is something at my window lattice;
Let me see then, what thereat is, and this mystery explore –
Let my heart be still a moment and this mystery explore; –
‘Tis the wind and nothing more!’

Open here I flung the shutter, when, with many a flirt and flutter,
In there stepped a stately raven of the saintly days of yore.
Not the least obeisance made he; not a minute stopped or stayed he;
But, with mien of lord or lady, perched above my chamber door –
Perched upon a bust of Pallas just above my chamber door –
Perched, and sat, and nothing more.

Then this ebony bird beguiling my sad fancy into smiling,
By the grave and stern decorum of the countenance it wore,
`Though thy crest be shorn and shaven, thou,’ I said, `art sure no craven.
Ghastly grim and ancient raven wandering from the nightly shore –
Tell me what thy lordly name is on the Night’s Plutonian shore!’
Quoth the raven, `Nevermore.’

Much I marvelled this ungainly fowl to hear discourse so plainly,
Though its answer little meaning – little relevancy bore;
For we cannot help agreeing that no living human being
Ever yet was blessed with seeing bird above his chamber door –
Bird or beast above the sculptured bust above his chamber door,
With such name as `Nevermore.’

But the raven, sitting lonely on the placid bust, spoke only,
That one word, as if his soul in that one word he did outpour.
Nothing further then he uttered – not a feather then he fluttered –
Till I scarcely more than muttered `Other friends have flown before –
On the morrow he will leave me, as my hopes have flown before.’
Then the bird said, `Nevermore.’

Startled at the stillness broken by reply so aptly spoken,
`Doubtless,’ said I, `what it utters is its only stock and store,
Caught from some unhappy master whom unmerciful disaster
Followed fast and followed faster till his songs one burden bore –
Till the dirges of his hope that melancholy burden bore
Of “Never-nevermore.”‘

But the raven still beguiling all my sad soul into smiling,
Straight I wheeled a cushioned seat in front of bird and bust and door;
Then, upon the velvet sinking, I betook myself to linking
Fancy unto fancy, thinking what this ominous bird of yore –
What this grim, ungainly, ghastly, gaunt, and ominous bird of yore
Meant in croaking `Nevermore.’

This I sat engaged in guessing, but no syllable expressing
To the fowl whose fiery eyes now burned into my bosom’s core;
This and more I sat divining, with my head at ease reclining
On the cushion’s velvet lining that the lamp-light gloated o’er,
But whose velvet violet lining with the lamp-light gloating o’er,
She shall press, ah, nevermore!

Then, methought, the air grew denser, perfumed from an unseen censer
Swung by Seraphim whose foot-falls tinkled on the tufted floor.
`Wretch,’ I cried, `thy God hath lent thee – by these angels he has sent thee
Respite – respite and nepenthe from thy memories of Lenore!
Quaff, oh quaff this kind nepenthe, and forget this lost Lenore!’
Quoth the raven, `Nevermore.’

`Prophet!’ said I, `thing of evil! – prophet still, if bird or devil! –
Whether tempter sent, or whether tempest tossed thee here ashore,
Desolate yet all undaunted, on this desert land enchanted –
On this home by horror haunted – tell me truly, I implore –
Is there – is there balm in Gilead? – tell me – tell me, I implore!’
Quoth the raven, `Nevermore.’

`Prophet!’ said I, `thing of evil! – prophet still, if bird or devil!
By that Heaven that bends above us – by that God we both adore –
Tell this soul with sorrow laden if, within the distant Aidenn,
It shall clasp a sainted maiden whom the angels named Lenore –
Clasp a rare and radiant maiden, whom the angels named Lenore?’
Quoth the raven, `Nevermore.’

`Be that word our sign of parting, bird or fiend!’ I shrieked upstarting –
`Get thee back into the tempest and the Night’s Plutonian shore!
Leave no black plume as a token of that lie thy soul hath spoken!
Leave my loneliness unbroken! – quit the bust above my door!
Take thy beak from out my heart, and take thy form from off my door!’
Quoth the raven, `Nevermore.’

And the raven, never flitting, still is sitting, still is sitting
On the pallid bust of Pallas just above my chamber door;
And his eyes have all the seeming of a demon’s that is dreaming,
And the lamp-light o’er him streaming throws his shadow on the floor;
And my soul from out that shadow that lies floating on the floor
Shall be lifted – nevermore!

viernes, 19 de enero de 2024

Lexique roman; Cha - Civada

Cha, s. m., kan.

Los Tartres dison que lo gran cha es senhor.

L'Arbre de Batalhas, fol. 88.

Les Tartares disent que le grand kan est maître.

Les Tartares disent que le grand kan est maître.

Chancelar, v., chanceler.

Moredas la y portet, que de paor chancela.

Roman de Fierabras, v. 135.

Moredas, qui chancelle de peur, la lui porta.

Ce mot, qui ne se retrouve pas dans les autres langues de l'Europe latine, a été employé au figuré par Pierre de Blois, qui dit, epist. 22:

In hoc itaque modico cancellavit Plato.


Chancera, s. f., chancère, dot.

Dos feminis concessus; Arverni superiores eadem notione valcheire, inferiores chancere dicunt. Du Cange, t. VI, col: 1486.

Molher non deu perdre sa chancera per tort que sos maritz fassa.

Charte de Montferrant de 1240.

Une femme ne doit pas perdre sa chancère pour tort que son mari fasse.

(ESP. Dote)


Chandorn, s. m., lat. candorem, lueur.

Aissi col peis que s'eslaissa el chandorn,

E no sap re tro que s'es pres en l'ama.

(chap. Així com lo peix que se tire a la lluentó, y no sap res hasta que está pres al ham.)

B. de Ventadour: Aissi col.

De même que le poisson qui s'élance à la lueur, et ne sait rien jusqu'à ce qu'il s'est pris à l'hameçon.


Chaorcin, s. m., cahorsin, usurier.

Louis IX, par son ordonnance de 1268, prononça: Quod Lombardi et caorcini, et etiam quam plures alii alienigene usurarii, etc.

L'ordonnance de Philippe III, de l'an 1274, porte: Si qui etiam de predictis Lombardis, caorcinis, etc. Ord. des R. de Fr., t. I, p. 96 et 299.

Per aquest peccat no son pas quitis los autz homes d'aquest mon que sosteno los baratz, e los chaorcis que preston e destruisson tot

lur pays e grevion lur paubra gen. V. et Vert., fol. 14. (N. E. grevion: agravian; greuge.)

De ce péché ne sont pas quittes les hauts hommes de ce monde qui soutiennent les tromperies, et les usuriers qui prêtent et détruisent tout leur pays et grèvent leur pauvre gent.


Chaple, s. m., carnage.

Don comensa lo chaples e 'l mazan per totz latz.

Roman de Fierabras, v. 412.

D'où commence le carnage et le bruit de tous côtés.

Recomensa lo chaples de la guerra mortal.

Guillaume de Tudela.

Le carnage de la guerre mortelle recommence.

ANC. FR. De ceus de pié r'est fiers li chaples.

G. Guiart, t. II, p. 38.

Et le chapple orible et merveilleux et grant.

Combat des Trente.

2. Chapladis, s. m., carnage.

E detrencan e talhan, e fan tal chapladitz

Dels Frances, qu'en la vila foro accoseguitz.

Guillaume de Tudela.

Et tranchent et taillent, et font tel carnage des Français, qui furent poursuivis dans la ville.

ANC. FR. E d'espées grant chapléiz.

Roman de Rou, v. 13188.

Et dura le chapplis par l'espace d'une forte heure.

Monstrelet, t. II, fol. 57.

3. Chaplatio, s. f., carnage.

E al pla Sant Estefe fan la chaplatio.

Guillaume de Tudela.

Et ils font le carnage dans la plaine Saint-Étienne.

ANC. FR. En la fuie out grant chapleison.

B. de Sainte-Maure, Chr. de Norm., fol. 20.

4. Capuzar, v., chapler, chapuser, raboter.

Fig. Fas motz e 'ls capus e 'ls doli.

A. Daniel: Ab guay.

Je fais des mots et je les chapuse et je les dole.

Ni en torney non capuza ni dola.

G. de Berguedan: Amicx.

Ni en tournoi il ne chaple ni dole.

ANC. FR. Une hachète léenz ot

Dont il chapuisoit à la foiz.

Nouv. rec. de fables et cont. anc., t. II, p. 383.

Tant i a féru et chaplé

Que molt lor a fet grant damaige.

Fabl. et cont. anc., t. IV, p. 93.

On chappelast

Cinq ou six douzaines de pain.

Les Repues franches, p. 14.

5. Capolar, v., charpenter, chapler.

Ni en torney no capola ni dola.

G. de Berguedan: Amix, Var.

Ni en tournoi il ne chaple ni dole.

Part. pas. E sedas de porc capoladas

Li donas ab la carn mescladas.

Deudes de Prades, Auz. cass.

Et lui donnez mêlées avec la chair des soies de porc chaplées.


Chapotes, s. m., chapotois, monnaie de Bigorre.

Doze mila sols de chapotes.

Tit. de 1280. DOAT, t. CLXV, p. 87.

Douze mille sous de chapotois.


Chau, s. m., hibou, choucas.

2. Chavana, s. f., chouette.

Si... fuerit involata aut occisa... chaua.

Baluze, Cap. reg. Fr., t. 1, col. 48.

E 'l chaus ab sa chavana,

S'al no pot, grondilha.

Marcabrus: El mes.

Et le hibou avec sa chouette, s'il ne peut autre chose, criaille.

ANC. FR. Elle est plus noire qu'une choe.

Fabl. et cont. anc., t. III, p. 261.

IT. Caveta. (ESP. Lechuza. chap. chuta, ólipa.) 


Cheira, s. f., cilice.

Penedensa en cheira... per lo poniement de la cheira.

Trad. de Bède, fol. 51.

Pénitence en cilice... par la piqûre du cilice.

Perdonas leu,

Venzas vos greu,

E non vos cal cheira portar;

Amas amics

E enemics,

E no us cal anar outra mar.

P. Cardinal: Predicator.

Pardonnez facilement, domptez-vous fortement, et il ne vous faut pas porter cilice; aimez amis et ennemis, et il ne vous faut pas aller outre-mer.


Cherubin, s. m., lat. cherubim, chérubin.

Cherubin so dit lhi segon,

Car en saber sobeira son;

E car per los doctors per ver

Cherub s'enterpreta saber.

Brev. d'amor, fol. 19.

Les seconds sont appelés chérubins, parce qu'ils sont supérieurs en savoir; et parce que véritablement chérub s'interprète savoir par les docteurs.

Adjectiv. A l'angel cherubin que garda la intrada de paradis.

Hist. abr. de la Bible, fol. 3.

A l'ange chérubin qui garde l'entrée de paradis.

CAT. Querubí. ESP. Querubín. PORT. Cherubin. IT. Cherubino. (chap. querubín, querubins, tipo de angels)


Chifla, Chufla, s. f., sifflement, moquerie, raillerie.

Mi platz far cantaret plazen

Non ges de las chiflas del ven.

Lanfranc Cigala: Quan vei fer.

Me plaît faire un petit chant agréable non point sur les sifflements du vent.

Fig. Adoncx dison las chuflas e los gabs e truphas e jonglas per mays far de offensa a Dieu. V. et Vert., fol. 22.

Alors ils disent moqueries et railleries et dérisions et facéties pour faire plus d'offense à Dieu.

Faisas chuflas... d'aquell que ve trayre a be. V. et Vert., fol. 8.

Il fait ses moqueries...de celui qu'il voit tirer à bien.

ANC. FR. Laissiez vos chifflois et vos gas.

Helinand, Vers sur la Mort.

ANC. ESP. PORT. Chufa.

2. Chiflador, s. m., moqueur, railleur.

Deus escarnira los chifladors.

Trad. de Bède, fol. 78.

Dieu raillera les moqueurs.

3. Chifflar, Chuflar, v., siffler, moquer, railler.

Alcus parliers reprehendon e chuflon e arezon aquels que vezon far be.

V. et Vert., fol. 23.

Quelques babillards reprennent et raillent et blâment ceux qu'ils voient bien faire.

Et ai ques mainta merce,

Sol per galiansa,

E chiflat autrui e me.

B. Zorgi: Jesu Crist.

Et j'ai demandé mainte merci, seulement par tromperie, et moqué autrui et moi.

Chuflar, escarnir los autres. V. et Vert., fol. 8.

Moquer, railler les autres.

Subst. De mi no us cal, pus chuflar no us es bos.

T. de G. Riquier et d'Austorc: Senh' En.

Il ne vous soucie de moi, puisque railler ne vous est bon.

ANC. FR. Chascuns de li chifle et parole.

Nouv. rec. de fables et cont. anc., t. II, p. 24.

ESP. Chiflar (silbar). (chap. chulá: chulo, chules, chule, chulem o chulam, chuléu o chuláu, chulen. Enfótressen. Chuflar se diu a Aragó, com al chiste del baturro Carlos Rallo Badet y lo tren. Chufla, chufla, que com no te apartos tú.)

4. Achuflar, v., railler, moquer.

Enquer no us passa,

Fi m'ieu, la maniera

De mi achuflar.

G. Riquier: D'Astarac.

Encore ne vous passe, me fis-je, la manière de me railler.


Chilpa, s. f., querelle.

Cant hom fay chilpa o batalha en glieza o en sementeri, ayssi que sanc y sia escampatz. V. et Vert., fol. 16.

Quand on fait querelle ou bataille en église ou en cimetière, tellement que le sang y soit répandu.


Chimeric, adj., lat. chimaereus, chimérique.

Bestias chimericas cum so lamias que han cap virginal.

Eluc. de las propr., fol. 35.

Bêtes chimériques comme sont les lamies qui ont une tête de jeune fille.

ESP. Chimerico (quimérico, de quimera). PORT. Quimerico. IT. Chimerico.

(chap. quiméric, quimerics, com los paísos catalans, quimérica, quimériques.)


Christ, Crist, s. m., lat. Christus, Christ.

On a souvent dit xprist, xhrist pour christ et les mots qui en dérivent.

Cristz mori en la crotz per nos.

(chap. Cristo va morí a la creu per natros o natres.)

P. Cardinal: Dels quatre.

Le Christ mourut en la croix pour nous.

L'onrat paire en Christ.

Tit. du XIIIe sièc. DOAT, t. CXXXVIII, fol. 224.

L'honoré père en Christ.

Loc. affirm. Et ai auzit a totz comtar,

Per Crist, bonas razos e bellas.

Un troubadour anonyme: Senior vos que. 

Et, par le Christ, j'ai entendu conter à tous des raisons bonnes et belles.

CAT. Christo. ESP. Cristo. PORT. Christo. IT. Cristo.

2. Crestianar, v., baptiser, faire chrétien.

Anam a l'almiran, si s vol crestianar.

Roman de Fierabras, v. 2263.

Nous allons vers l'amiral, s'il veut se faire chrétien.

Part. pas.

Sabray si ja mon payre sera crestianatz.

Roman de Fierabras, v. 4893.

Je saurai si jamais mon père sera baptisé.

Substantiv. Non fon tals crestianada

De sai lo peiron.

Marcabrus: Estornel.

Il ne fut telle baptisée deçà le perron.

ANC. FR. Tant dist, tant lur a sermuné,

K'il a Olef crestiené.

N'erent pas crestienez, ne en Dex ne créeient.

Roman de Rou, v. 6980 et 4936.

ESP. Cristianar (cristianizar). (chap. cristianisá)

3. Crestian, Cristian, adj., lat. christianus, chrétien.

Que, per Crist, son apelatz crestians.

V. de S. Trophime.

Qui, à cause du Christ, sont appelés chrétiens.

Per salvar crestiana gent.

P. Vidal: Baros Jhesus.

Pour sauver la gent chrétienne.

Substantiv. Cristias vey perilhar

Per colpa dels regidors.

G. Riquier: Cristias.

Je vois les chrétiens péricliter par la faute des chefs.

Loc. Et anc fils de cristiana

Pejor costuma no mes.

G. de Berguedan: Cansoneta.

Et jamais fils de chrétienne ne mit pire coutume.

ANC. FR. Si volt crestian devenir.

Roman de Rou, v. 558.

Nos très-chrestians progeniteurs roys de France... Peuple chrestian.

Ord. des Rois de Fr., 1478, t. XVIII, p. 425.

CAT. Christiá. ESP. Christiano (cristiano). PORT. Christão. IT. Christiano.

(chap. cristiano, cristiá, cristians, cristiana, cristianes)

4. Crestianor, adj., chrétien.

La ley crestianors. V. de S. Honorat.

La loi chrétienne.

5. Crestianisme, s. m., lat. christianismus, christianisme.

E ton crestianisme as falsat.

Izarn: Diguas me tu.

Et tu as faussé ton christianisme.

CAT. Christianisme. ESP. Cristianismo. PORT. Christianismo.

IT. Cristianesimo. (chap. Cristianisme)

6. Chrestiantat, Xristiandat, s. f., lat. christianitatem, chrétienté.

Que mais avetz mes, conques e donat

C'om ses corona de la crestiantat.

Rambaud de Vaqueiras: Valen marques.

Que plus vous avez dépensé, conquis et donné qu'homme sans couronne de la chrétienté.

Aqui, mori la flor de la xpristiandat. V. de S. Honorat.

Là, mourut la fleur de la chrétienté.

CAT. Christiandat. ESP. Cristiandad. PORT. Christiandade. IT. Cristianità. (chap. Cristiandat.)

7. Antecrist, s. m., Antechrist.

Hueymais es Antecritz

Al dan del mon issitz.

G. Faidit: Era nos sia.

Désormais l' Antechrist est sorti pour le dommage du monde.

L'Antecrist, cug, venra breumen,

Tan aonda gen fellona.

Giraud de Borneil: Tals gen prezi.

L'Antechrist, je pense, viendra bientôt, tant abonde la gent méchante.

(N. E. Sigue abundando la gente felona, no sé si ya ha aparecido el Anticristo o Antecristo.)


Cibori, s. m., lat. ciborium, ciboire.

Et aquel cibori fo mes sobre l'autar.

Cat. dels apost. de Roma, fol. 114.

Et ce ciboire fut mis sur l'autel.

PORT. IT. (ESP.) Ciborio.


Cicle, s. m., grec *gr, cycle.

Es fenitz lo cicle o celcle dels ans.

Cat. dels apost. de Roma, fol. 143.

Le cycle ou cercle des ans est fini.

Comptant entro XIX, quan es complit un cicle embolismal.

Eluc. de las propr., fol. 122.

Comptant jusqu'à dis-neuf, quand est accompli un cycle embolismique.

CAT. ESP. IT. Ciclo. (chap. siclo, sírcul)

2. Epicicle, s. m., lat. epicyclus, épicycle.

Que si movon diversamen, maiormen aquellas que ham epicycles.

Eluc. de las propr., fol. 113.

Qui se meuvent diversement, principalement celles qui ont des épicycles.

CAT. Epicicle. ESP. IT. Epiciclo.


Ciclope, s. m., lat. cyclopem, cyclope.

Ciclopes han un sol uelh el miech del front.

(chap. Los síclopes tenen un sol ull al mich del fron.)

Eluc. de las propr., fol. 250.

Les cyclopes ont un seul oeil au milieu du front.

CAT. ESP. Cíclope. PORT. Cyclope. IT. Ciclope. (chap. síclope, síclopes)


Ciconia, s. f., lat. ciconia, cigogne.

Un auzel apelat ciconia o guanta...

Semblant a bec de ciconia.

Trad. d'Albucasis, fol. 21 et 24.

Un oiseau appelé cigogne ou guante...

Ressemblant à bec de cigogne.

CAT. Cigonya. ESP. Cigüeña. PORT. Cegonha. IT. Cicogna.

(chap. Sigüeña, sigüeñes, guanta no sé si se diu, pero lo que se mereix una guantá es Puigdemont, que ne teníe un niu al cap. )

Sigüeña, sigüeñes, guanta no sé si se diu, pero lo que se mereix una guantá es Puigdemont, que ne teníe un niu al cap

Cicuda, s. f., lat. cicuta, ciguë, sorte de plante.

Vi begut no tempradament es vere cum cicuda.

(chap. Lo vi begut no templadamén es veneno com la sicuta.)

Eluc. de las propr., fol. 227.

Vin bu avec intempérance est venin comme ciguë.

CAT. ESP. PORT. IT. Cicuta.


Cigala, s. f., lat. cicada, cigale.

Cigala cantan forma canso meravelhoza.

Eluc. de las propr., fol. 143.

La cigale en chantant forme un chant merveilleux.

CAT. Cigala. ESP. Cigarra. PORT. Cigara. IT. Cigala. (chap. chicharra, chicharres; cuento la chicharra y la formiga.)


Cigne, s. m., lat. cycnus, cygne.

Cigne es tot blanc...

Cignes els quals la natura ha provezit de pes latz, aptes per nadar.

Eluc. de las propr., fol. 145 et 139.

Le cygne est tout blanc..

Cygnes que la nature a pourvus de pieds larges, aptes à nager.

CAT. Cigne. ESP. PORT. (chap.) Cisne. IT. Cigno.


Cil, Silh, s. m., lat. cilium, cil, poil des paupières.

No us denharia sol guinhar ab lo silh.

Roman de Gerard de Rossillon, fol. 66.

Ne vous daignerait seulement guigner avec le cil.

Cilhs, cubertas dels uelhs.

(chap. Selles, cubertes dels ulls.)

Eluc. de las propr., fol. 38.

Cils, couvertures des yeux.

IT. Ciglio.

2. Cilla, s. m., cil.

Et hac un prim fillat de cillas

Negres e sotils e delgatz.

Roman de Jaufre, fol. 88.

Et eut un mince filet de cils noirs et menus et déliés.

CAT. Cella. ESP. Ceja. (chap. sella, selles.)

3. Sobrecill, Sobresill, s. m., lat. supercilium, sourcil.

Sobrecilhs so ditz quar sobreposatz so als cilhs.

Eluc. de las propr., fol. 39.

Ils sont dits sourcils parce qu'ils sont posés au-dessus des cils.

E la veta que vai en som

Sobr'els sills, a nom sobresill.

Deudes de Prades, Auz. cass. 

Et la bande qui va en sommité sur les cils, a nom sourcil.

ANC. FR. Preudome pas ne sont tot cil

Qui baissent l'uel et le sorcil.

Fabl. et cont. anc., t. I, p. 316.

IT. Sopracciglio.

4. Sobrecilha, Sobressilia, s. f., sourcil.

Breu ac la sobrecilha,

Ben fait' a meravilha.

Arnaud de Marsan: Qui comte.

Eut le sourcil court, bien fait à merveille.

Tas sobressilias davant...

Trad. de Bède, fol. 73.

Tes sourcils devant...

ANC. FR. Le nez pointu et aquilin, et les sourcilles rudes et grandes.

Rabelais, liv. 5, ch. 39.

PORT. Sobrancelha. (chap. sobressella, sobresselles)

5. Entrecilh, s. m., entre-cil.

Entrecilh es aquel espaci ses pels qui es entr' els sobrecilhs.

Eluc. de las propr., fol. 39.

(chap. La entressella es aquell espassi sense pels que está entre les selles. Algunes persones la tenen ben peluda.)

L' entre-cil est cet espace sans poils qui est entre les sourcils.

IT. Intracciglio. (ESP. Entrecejo.)


Cilici, Cirici, Selitz, s. m., lat. cilicium, cilice.

Portar cilici. V. et Vert., fol. 34.

Porter cilice.

E cirici vestit portan.

Brev. d'amor, fol. 168.

Et vêtus ils portent cilice.

De costa la carn nuda tos temps selitz portava.

V. de S. Honorat.

Il portait toujours un cilice contre la chair nue.

CAT. Cilici. ESP. PORT. Cilicio. IT. Ciliccio. (chap. silissi, silissis)


Cim, Sim, s. m., lat, cyma, cime, sommet.

Voyez Denina, t. II, p. 251.

Ans qu'els cims reston de brancas sec.

A. Daniel: Ans qu'els.

Avant que les sommets des branches restent secs.

Mas eras pels soms sims

Entre las flors e 'ls brondels prims.

G. de Cabestaing: Er vei.

Mais maintenant par les hautes cimes entre les fleurs et les rameaux délicats.

Fig. Quar estz de pretz al sim,

En la plus alta sima.

Raimond de Miraval: Aissi m.

Car vous êtes au sommet de mérite, en la plus haute cime.

Loc. Sieus es Arnautz del sim tro en la sola.

(chap. Seu es Arnau del sim hasta la sola.)

A. Daniel: Ans qu'els.

Arnaud est sien du sommet jusqu'à la plante des pieds.

CAT. Cim. PORT. Cimo.

2. Cima, Sima, s. f., cime, sommet, tête, extrémité.

Lo fondamens d'una tor es plus fortz que la sima.

L'ayga las abeura per las cimas.

Liv. de Sydrac, fol. 42 et 105.

Le fondement d'une tour est plus fort que la cime.

L'eau les abreuve par les sommets.

Sieus soi del pe tro la cima.

A. Daniel: Ab guay so.

Je suis sien du pied jusqu'à la tête.

Loc. No 'l laissaran ni cima ni razitz.

Austor Segret: No sai qui.

Ne lui laisseront ni cime ni racine.

ANC. FR. L'office de censeur, qui estoit à Rome la cyme de dignité...

où pouvoit atteindre un citoyen romain.

Amyot, Trad. de Plutarque, vie de M. Caton.

CAT. ESP. PORT. IT. Cima. (chap. sima, punta.)

3. Recimar, v., remonter, retourner.

Greu er ja fols desnatur

Et a folleiar non recim.

Marcabrus: Bel m'es quant.

Il sera difficile que jamais fou change de naturel et ne retourne à faire des folies.

4. Entrecims, s. m., sommet.

Et el verdier la flors trembla

Sus el entrecim.

A. Daniel: Lanquan.

Et au verger la fleur tremble sus au sommet.

5. Entrecimamen, s. m., entrelacement.

L'entrecimamen

Sabetz per c'om non fa lauzor.

T. d'Aimeri et d'Albert: Amicx.

Vous savez l'entrelacement, pourquoi on ne fait louange.

6. Tressimar, Entrecimar, v., confondre, entrelacer, enlacer.

Selha qu'ab dos s'entressima

Greu er del tres no s tressim.

Gavaudan le Vieux: Lo vers deg far.

Celle qui avec deux s'entrelace, il sera difficile qu'elle ne s'enlace d'un troisième.

7. Sobretracimar, v., dominer.

El sieu cors sobretracima lo mieu.

A. Daniel: En est sonet.

Son coeur domine le mien.

Cimbol, Simbol, s. m., lat. cymballum, cymbale.

E li corn et las trompas e 'ls cimbols e 'lh tabor.

Guillaume de Tudela.

Et les cors et les trompes et les cymbales et les tambours.

Simbols so alcus istrumens de metalh qui, feritz, redo so plazent et melodios. Eluc. de las propr., fol. 282.

Les cymbales sont certains instruments de metal qui, frappés, rendent un son agréable et mélodieux.

CAT. Cimbol. EST. Címbalo. PORT. Cimbalo. IT. Cembalo.

2. Cimblos, s. m., timbre, sonnette.

Dansan ab un cimblos d'argent.

Un troubadour anonyme: Senior vos que.

Dansent avec un timbre d'argent.

ANC. FR. Douceines, simbales, clocettes, 

Cimbres, la fluste brehaigne.

Le roi de Navarre, Ms. de la Bibl. du Roi, 7612, et ses poésies, t. I, p. 248.


Cimen, s. m., lat. coementum, ciment.

Peiros i ac assis per tal cimen.

Roman de Gerard de Rossillon, fol. 21.

Il y eut un perron consolidé par tel ciment.

PORT. Cimento. (ESP. Cemento. Chap. simén) 


Cinamomi, s. m., lat. cinnamomum, cinnamome, cannelier.

De marme e de cinamomi.

Trad. de l'Apocalypse de S. Jean, ch. 18.

De marbre et de cinnamome.

CAT. ESP. Cinamomo. PORT. IT. Cinnamomo.


Cinc, adj. num. indéclinable, lat. quinque, cinq.

Passat son cinc mes e un an.

(chap. Passats són sing mesos y un añ.)

Raimond de Miraval: Enquer non a.

Cinq mois et un an sont passés.

Quar ieu en conosc de cavaliers cinc cens.

T. d'Albert et du moine: Monges digatz.

Car de cavaliers j'en connais cinq cents.

Cinc son li modi dels verbes. Gram. provenç.

Les modes des verbes sont cinq.

Substantiv.

Van s'en a la capella tut cinc denan l'autar.

V. de S. Honorat.

Tous cinq s'en vont à la chapelle devant l'autel.

CAT. Cinc. ESP. PORT. Cinco. IT. Cinque. (chap. sing, sinc)

2. Quint, adj. num., lat. quintus, cinquième, quint.

Lo quint mandamen de la ley es aquest.

En la quinta branca de misericordia. V. et Vert., fol. 3 et 77.

Le cinquième commandement de la loi est celui-ci.

En la cinquième branche de miséricorde.

Subst. En Guillems de Ribas lo quins.

Pierre d'Auvergne: Chantarai.

Le seigneur Guillaume de Rives le cinquième.

Ades dir lo quart e 'l quint.

A. Daniel: Ar vei.

Toujours dire le quart et le quint.

ANC. FR. La quinte vérité.

Monstrelet, t. 1, fol. 43.

CAT. Quint. ESP. PORT. IT. (chap.) Quinto.

3. Quinta, s. f., quinte, terme de musique.

Mas la quarta et la quinta ..

S'acordan per descort.

P. de Corbiac: El nom de.

Mais la quarte et la quinte... s'accordent par discordance.

CAT. ESP. PORT. IT. Quinta.

4. Quintament, adv., cinquièmement.

Quintament requier que, etc.

Eluc. de las propr., fol. 15.

Cinquièmement requiert que, etc.

5. Quintar, v., quinter.

Ce mot s'est dit du nombre des labours donnés à la terre.

Cartar las terras o quintar.

Tit. de 1315. DOAT, t. LXXXIX, fol. 180.

Quarter ou quinter les terres.

Il a signifié, dans d'autres langues néolatines, prendre le cinquième.

CAT. ESP. PORT. Quintar.

6. Cinquen, adj. num., cinquième.

El cinques es Gaucelms Fayditz.

Le Moine de Montaudon: Pus Peire.

Le cinquième est Gaucelm Faidit.

Al sinquen jorn a vostr' auzel

Daretz carn de petit anhel.

Deudes de Prades, Auz. cass.

Au cinquième jour vous donnerez à votre oiseau chair de petit agneau.

CAT. Cinqué. ESP. Cinqueno (quinto).

7. Quinquennal, adj., lat. quinquennalis, quinquennal.

Inducias e dilacions quinquennaus.

Tit. de 1464. Bordeaux, Bibl. Monteil.

Renvois et délais quinquennaux.

ANC. ESP. Quinquenal (MOD. Quincenal). PORT. Quinquennal. IT.

Quinquennale. (chap. quinsenal, 15, quinse, quinsena.)

8. Quinze, adv. num., lat. quindecim, quinze.

Quinse ciptatz en oscle, estier Proensa,

Lhi dara e Viana e Arle e Valensa.

Roman de Gerard de Rossillon, fol. 97.

Il lui donnera en dot, outre la Provence, quinze cités et Vienne et Arles et Valence.

En un vaissel... quinze jorns. Liv. de Sydrac, fol. 49.

En un vase... quinze jours.

CAT. Quinse. ESP. Quince. PORT. Quinze. IT. Quindici.

9. Quinzen, adj. num., quinzième.

Lo quinzen an de sa etat.

Trad. d'un Évangile apocryphe.

La quinzième année de son âge.

CAT. Quinsé. ESP. Quinceno (decimoquinto). IT. Quindecimo.

10. Quinzena, subst. num., quinzaine.

Tres vetz sivals en la quinzena. Deudes de Prades, Auz. cass.

Trois fois au moins dans la quinzaine.

CAT. Quinsena. ESP. Quincena.

11. Cinquanta, adv. num., lat. quinquaginta, cinquante.

Ben cinquanta sous toz nombratz.

V. de S. Honorat.

Bien cinquante sous tous nombrés.

CAT. Cinquanta. ESP. Cinquenta (cincuenta). PORT. Cincoenta. 

IT. Cinquanta. (chap. sincuanta)

12. Cinquanten, adj., cinquantième.

Lo cinquante psalm qui es penitencial.

Lo cinquante dia de la Pasca.

Eluc. de las propr., fol. 128 et 129.

Le cinquantième psaume qui est pénitentiel.

Le cinquantième jour depuis la Pâque.

13. Sinquantena, s. f., cinquantaine.

Sai e lai per sinquantenas.

Brev. d'amor, fol. 157.

Çà et là par cinquantaines.

CAT. Cinquantena. ESP. Cinquentena (cincuentena). IT. Cinquantina. (chap. sincuantena, sincuantenes, sincuanta, 50.)

14. Quinquagezima, s. f., lat. quinquagesima, quinquagésime.

Quinquagezima, quar ha V vetz X dias ayshi es apelada.

Eluc. de las propr., fol. 128.

La quinquagésime est ainsi appelée, parce qu'elle a cinq fois dix jours.

CAT. Cinquagessima. ANC. ESP. (quincuagésima) PORT. IT. Quinquagesima.


Ciragra, s. f., lat. chiragra, goutte aux mains, chiragre.

Ciragra si engendra de grossas humors.

Es dita ciragra, quan es els artels de las mas.

Eluc. de las propr., fol 49 et 95.

La ciragre s'engendre de grosses humeurs.

Elle est appelée ciragre, quand elle est aux articulations des mains.

PORT. Chiragra. IT. Ciragra. (chap. La enfermedat gota a les mans.)


Cisterna, s. f., lat. cisterna, citerne.

Sia pres, e metam lo en una cisterna.

(chap. Que sigue pres, y embutímlo, fiquémlo, fotémlo a una sisterna.)

Hist. abr. de la Bible, fol. 9.

Qu'il soit pris, et mettons-le dans une citerne.

CAT. ESP. (cisterna) PORT. IT. Citerna.

2. Biterna, s. f., citerne.

Cara de boc de biterna.

T. de G. Rainols et de G. Magret: Maigret.

Figure de bouc de citerne.


Cistra, s. f., lat. cistus, ciste, sorte d'arbrisseau.

E mot fay bon pieg la cistra.

Brev. d'amor, fol. 50.

Et le ciste fait très bonne poitrine.

IT. Cisto, cistio.


Citar, v., lat. citare, citer, appeler en jugement.

Quant los creditors fan citar los debitors.

Statuts de Provence, BOMY, p. 6.

Quand les créanciers font citer les débiteurs.

E qui 'l papa pogues citar

A maior de se, fora be.

Folquet de Lunel: Al bon rey.

Et qui pourrait citer le pape devant un plus grand que lui, ce serait bien.

Part. pas. Non deu esser tragh ni citat ni apellat al dret foras del dig loc.

Ord. des rois de Fr., 1464, t. XVI, p. 132.

Il ne doit être tiré ni cité ni appelé en justice hors dudit lieu.

Substantiv. Lo qual mandamen en escrit sia enviatz a la maison del citat.

Statuts de Montpellier de 1258.

(chap. Lo cual manamén en escrit sigue enviat a la casa del sitat.)

Lequel mandement soit envoyé en écrit à la maison du cité.

CAT. ESP. PORT. Citar. IT. Citare. (chap. sitá: sito, sites, site, sitem o sitam, sitéu o sitáu, siten.)

2. Citayre, s. m., plaideur.

Citayres que non quero mays co puescon citar e playezar lurs vesis.

V. et Vert., fol. 15.

Plaideurs qui ne cherchent jamais que comment ils puissent citer et plaider leurs voisins.

ESP. Citador. IT. Citatore. (chap. sitadó, sitadós; sitadora, sitadores.)

3. Citation, s. f., citation, assignation.

Abantz que la primera citation fos.

(chap. literal: Abans que la primera sitassió fore.)

Cout. de Condom de 1313.

Avant que la première citation fût.

CAT. Citació. ESP. Citación. PORT. Citação. IT. Citazione.

4. Citamen, s. m., assignation. (chap. sitamén, assignassió)

De las parts sia fag citamen per albire del jutge.

Statuts de Montpellier de 1204.

Qu'il soit fait assignation des parties par avis du juge.

Alcun jorn dels citamens.

Statuts de Montpellier de 1258.

Aucun jour des assignations.

5. Citatori, s. m., citatoire, citation.

Un citatory simple per lo bayle.

Fors de Bearn, p. 1095.

Un citatoire simple par le bailli.

6. Excitar, v., lat. excitare, exciter.

Per movre et excitar los coratges dels auzens.

Leys d'amors, fol. 124

Pour émouvoir et exciter les coeurs des auditeurs.

CAT. ESP. PORT. Excitar. IT. Eccitare. (chap. excitá o exitá: éxito, exites, exite, exitem o exitam, exitéu o exitáu, exiten.)

7. Excitatiu, adj., excitatif, excitant.

Hé! semissonan pot esser excitativa.

Leys d'amors, fol. 103.

Hé! sémissonnante peut être excitative.

Polveras excitativas. Trad. d'Albucasis, fol. 20.

Poudres excitatives.

CAT. Excitatiu. ESP. Excitativo. IT. Eccitativo.

8. Excitation, s. f., excitation.

Aquestas significo excitatio. Leys d'amors, fol. 103.

Celles-ci signifient excitation.

PORT. Excitação. IT. Eccitazione.

9. Recitar, v., lat. recitare, réciter, rapporter, raconter.

Lasquals totz recitar seria longa cauza...

La passio de Nostre Senhor, laqual recito li evangelista.

Leys d'amors, fol. 91 et 148.

Lesquelles rapporter toutes serait longue chose...

La passion de Notre Seigneur, laquelle les évangélistes racontent.

10. Recitatio, s. f., lat. recitatio, récit, débit.

En la recitatio de las gestas dels reys.

Leys d'amors, fol. 148.

Dans le récit des gestes des rois.

(chap. Ressitassió, ressitassions)

11. Recitamen, s. m., exposition, récit du sujet.

Lo recitamen del senhor En Gui.

Cartulaire de Montpellier, fol. 53.

L'exposition du seigneur seigneur Gui. (N. E. En: mon seigneur, mossen, En, por eso repite seigneur.)

IT. Recitamento. (chap. Ressitamén, ressitamens)


Cithara, s. f., lat. cithara, harpe, lyre.

So mantas guisas de citaras.

Eluc. de las propr., fol. 282.

Il y a plusieurs sortes de lyres.

Cascus avent sitaras aureas.

Trad. de l'Apocalypse de S. Jean, chap. 5.

Chacun ayant des lyres d'or.

CAT. ESP. (cítara) Citara, guitarra. PORT. Cithara, guitarra. IT. Citara, chitarra. (chap. sítara, síteres – siteres no, que son per al oli.)

2. Citharista, s. m., lat. citharista, harpiste, joueur de lyre.

Orpheu, qui fo mot meravilhos citharista.

Eluc. de las propr., fol. 46.

Orphée, qui fut très merveilleux joueur de lyre.

(chap. Orfeo, que va sé mol maravillós sitariste, tocadó de sítara.)

CAT. ESP. IT. Citarista.

3. Cidra, s. f., lat. cithara, guitare, harpe.

E cidra c'om vol ben auzir.

Giraud de Calanson: Fadet joglar.

Et guitare qu'on veut bien écouter.

ANC. CAT. Citra.

4. Cithola, s. f., citole, harpe, lyre.

David delieuret lo rey Saul del demoni sonan la cithola.

Cignes, quan poletz auzo sonar citholas geisho tantost del ni e comenso cantar. Eluc. de las propr., fol. 145 et 181.

David délivra du démon le roi Saül en jouant de la harpe.

Les cygnes, quand petits ils entendent jouer de la lyre, ausSitot sortent du nid et commencent à chanter.

ANC. ESP. Citola.


Citrin, adj., lat. citrinus, citrin, roux.

Citris declinans a color d'aur. Eluc. de las propr., fol. 75.

Citrin tirant à couleur d'or.

Sian faytas de eram citri.

Trad. d'Albucasis, fol. 27.

Qu'elles soient faites d'airain citrin.

PORT. IT. Citrino. (ESP. cetrino)

2. Subcitrin, adj., sous-citrin.

Color subcitrina.

Eluc. de las propr., fol. 58.

Couleur sous-citrine.

3. Citrinitat, s. f., couleur de citron, pâleur.

E aquo fay de la negror e de la citrinitat.

Trad. d'Albucasis, fol. 20.

Et fait cela de la noirceur et de la pâleur.

Citrinitat e consumpcio.

Eluc. de las propr., fol. 88.

Pâleur et consomption.

IT. Citrinità.


Ciu, Civitat, Ciutat, Ciptat, s. f., lat. civitatem, cité, ville.

Car lai en l'encantada ciu.

A. Daniel: Ab plazer.

Car là en l'enchantée cité.

De tolre civitat aut castel.

Titre de 1040.

De prendre cité ou château.

Veder ent pot l'om per quaranta ciptatz.

Poëme sur Boèce.

L'on en peut voir par quarante cités.

La ciutatz se vueia.

Rambaud de Vaqueiras: Truan mala.

La cité se vide.

ANC. FR. Fut une citet Sylo.

Anc. trad. des liv. des Rois, fol. 1.

CAT. Ciutat. ESP. Ciudad (ant. cibdad). PORT. Cidade. IT. Città. (chap. siudat, siudats.)

2. Ciutadan, Ciptadan, s. m., citoyen.

Mas pueys li ciutadan foron en Rosesvals. V. de S. Honorat.

Mais puis les citoyens furent en Rosesval.

Los celestials ciptadas. Trad. de Bède, fol. 44.

Les citoyens célestes.

CAT. Ciutadá. ESP. Ciudadano. PORT. Cidadão. IT. Cittadino. (chap. siudadá, siudadans, siudadana, siudadanes.)

3. Ciutadana, s. f., citadine, citoyenne.

Anc tan gentils ciutadana

No nasquet ni tan dolsana.

P. Vidal: Car' amiga.

Jamais ne naquit citadine si gentille ni si douce.

CAT. Ciutadana. ESP. Ciudadana. PORT. Cidadoa. IT. Cittadina.

4. Civil, adj., lat. civilis, civil.

Negun proces tan civil que criminal.

Statuts de Provence. Julien, t. 1, p. 91.

Aucun procès tant civil que criminel.

CAT. ESP. PORT. Civil. IT. Civile. (chap. sivil, sivils.)

5. Civilment, adv., civilement.

En doas guisas naturalment e civilment.

Trad. du Code de Justinien, fol. 81.

En deux façons naturellement et civilement.

CAT. Civilment. ESP. PORT. IT. Civilmente.

6. Civilitat, s. f., lat. civilitatem, gouvernement, civilisation.

Dieus, qui, en la civilitat mondial, es un princep reglant.

Util a la communa civilitat.

Eluc. de las propr., fol. 2 et 22.

Dieu, qui, dans le gouvernement du monde, est un prince réglant.

Utile à la commune civilisation.

CAT. Civilitat. ESP. Civilidad. PORT. Civilidade. IT. Civilità. (chap. sivilisassió.)


Civada, s. f., avoine.

Sextarium de civada.

P. de Marca, Marc, hisp., app. an. 964.

Setier d'avoine.

Mesura de civada

Tal que pot un rossis manjar.

Deudes de Prades, Auz. cass.

Mesure d'avoine telle qu'un roussin peut la manger.

CAT. Civada. PORT. Cevada (ESP. cebada; chap. sibada, sivada, sibá, sivá).

2. Sivadatge, s. m., champ d'avoine.

Ordis, fromens et sivadatges.

Tit. de 1410. DOAT, t. CLVIII, fol. 304.

Orge, froment et champ d'avoine.

3. Civaier, s. m., civadier, sorte de mesure.

De III sextiers I civaier.

Ch. des droits de péage, Hist. de Valence, p. 298.

De trois setiers un civadier.