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jueves, 20 de enero de 2022

Biblioteca valenciana. Escritores del siglo XVII. Parte 2.

BIBLIOTECA VALENCIANA.

FREY D. JAIME SALVADOR.

1678.

Nació en la villa de Cervera de este reino, por los años de 1620; fue hijo de Miguel Salvador, familiar del santo oficio, y de Esperanza Cardona, consortes: familias de las más antiguas y distinguidas de la citada villa; y manifestando mucho talento y grande afición al estudio, le enviaron sus padres a la villa de S. Mateo, para que aprendiera la gramática bajo la enseñanza de mosen Francisco Gavaldá, sujeto muy celebrado, y de quien hacen honorífica mención Rodríguez y Ximeno, en sus Bibliotecas. Pasó a Valencia a estudiar filosofía, y a Huesca la jurisprudencia, que concluyó después en esta universidad de Valencia: consiguió mucho crédito por su aplicación y adelantamiento en dichas ciencias, y movido del digno ejemplo que le dio su tío el Ilmo. Sr. Fr. D. Felipe Marimón, obispo de Ampurias, y electo arzobispo de Sacer, pretendió y logró que se le vistiese el hábito de fraile de nuestra señora de Montesa en 10 de mayo de 1643: profesó en el año siguiente; y en el de 1647 se le dio el curato de la parroquial de la villa de Albocácer, en cuyo destino acreditó su grande religión y celo, asistiendo a los enfermos de la peste que se introdujo en este Reino, y socorriendo sus necesidades, no sólo con las rentas del curato, sino también con las suyas propias: por lo cual se le eligió cura de la encomienda de Silla en 1651; mas no llegó a tomar posesión, porque instruido de su mérito el Sr. D. Felipe IV, le nombró en el mismo año por capellán de honor suyo, haciéndole merced en el siguiente de 200 libras de pensión sobre el arcedianato mayor de Valencia; y en el de 1653, de 150 libras de casa y aposento para sí y sus sucesores, sobre la receta de Mallorca. Hasta entonces el hospital de nuestra señora de Monserrate, de la Corona de Aragón, había tenido por administrador a un simple clérigo; pareció al Consejo que fuese mayor su representación para su mejor gobierno, y así en consulta de 7 de mayo de 1657, expuso: Que S. M. tenía Capellanes de Honor por la orden de Montesa, que siempre se atendía que lo fuesen los más adelantados, y que sería bien que en adelante se eligiese a uno de los mismos por administrador de dicho hospital. Vino bien S. M. en ello, y nombró a D. Jaime que entró en la administración en 23 de noviembre siguiente (Samper, colectoría de misas de dicha iglesia de Monserrate vindicada, impresa en 1694, número 18.) Y en 1661 le concedió el priorato de S. Jorge de Alfama. No considerándose sitio oportuno para la curación de los enfermos el barrio de Lavapiés, donde estaba el referido hospital, acordó S. M. que se fabricase en la calle de Atocha, casi enfrente del de Antón Martín; y en 21 de marzo de 1658, se puso la primera (primer) piedra del nuevo hospital, con asistencia del consejo de Aragón, ejecutándolo su regente, después cardenal, D. Pascual de Aragón, acompañándole con capas los tres Capellanes de honor, D. Mateo Fraso, D. José Valls y el susodicho (Samper, ibid. núm. 22). Fue mucho lo que trabajó en la citada obra, muchas las dificultades que tuvo que vencer, y disgustos que se le ocasionaron. Mereció por su gran ciencia y recomendables circunstancias, un alto concepto a los señores patriarcas, al Excmo. Sr.  Vice-Canciller del Consejo de Aragón, D. Cristóbal Crespí de Valldaura; a los regentes del Consejo de Aragón, y a los literatos; y así Samper, en su Montesa ilustrada, parte 4.°, número 284, le aclama por excelente jurisperito, celoso de la religión, y digno de mejores puestos. Y lo reconoció el consejo; pues habiendo muerto en 21 de julio de 1678 el Ilmo. Sr. D. José Verge, obispo de Orihuela, se le consultó para este obispado (consta por los papeles que he visto); pero habiéndose interesado eficazmente el arzobispo y virrey D. Juan Tomás de Rocabertí, por el P. M. Fr. Marcelo Marona, religioso de su orden, como lo dice el canónigo Prats, en su sermón de honras, se dio a este aquella mitra; y aunque por renuncia del mismo hubiera podido obtenerla, lo impidió su muerte acaecida en 20 de septiembre del mismo año, habiendo tenido la satisfacción de ver concluida la obra del hospital, bendecir él mismo su iglesia con licencia del Sr. patriarca en 20 de abril, y decir la primera misa en 1 de mayo del citado año, con asistencia del consejo de Aragón. Escribió: 

1. Historia de la fundación, traslación, y cosas notables del real hospital de nuestra señora de Monserrat, de la Corona de Aragón, lo que ejecutó por encargo del Excmo. Sr. Vice-canciller D. Cristóbal Crespí de Valldaura, cuya historia estaba escrita con mucho juicio y crítica; sirvió para que corrigiese Samper algunas equivocaciones en su Montesa ilustrada; tenía él mismo el autógrafo, y en lugar de conservarlo en el Archivo, lo presentó al Rey con dicha obra de Colectoría de misas (véanse los números 7, 13, 55 y 56 de ella).

2. Constituciones para el gobierno de dicho Hospital, que trabajó de orden del Consejo; y aunque Samper las intitula apuntamientos por no estar aprobadas aún por dicho Tribunal; pero hallando que su contenido era conforme a lo que dictaba el derecho, enseñaban los autores, y se observaba en este y en otros Hospitales Reales, se vale de las referidas constituciones, y copia algunos de sus artículos, así en papel que escribió con motivo de la competencia movia en 1683, por D. Bernardo Pujol (Pujól), secretario contador del hospital, núm. 9, como también en dicha obra de Colectoría de misas, número 126 y 127.

3. Discurso sobre competir la jurisdicción eclesiástica del real hospital de Monserrat al Sr. Patriarca, y no al Ordinario, como pretendían algunos que habían acudido con esta solicitud al Consejo de Aragón, lo presentó él mismo, el cual conformándose con su dictamen, acordó en 27 de abril el decreto siguiente: Corra esto que toca a la jurisdicción del Hospital de Aragón como hasta aquí (que era ejercerla el Sr. patriarca); y si entre el Sr. Patriarca y el Ordinario se moviere algún pleito, seguirán su justicia. Samper tenía este discurso escrito de mano del autor, y lo presentó al Rey con dicha obra. Colectoría de misas. (Ibid. núm. 55, y nota T, y nota C.)

ILMO. D. FR. JUAN BAUTISTA SORRIBAS.

1678.

Ximeno, tomo 2, pág. páginas 83 y 365.

Carmelita. Se añade que fue hijo de la parroquial de S. Miguel de Valencia, bautizado en su pila en junio de 1631. Tomó el hábito en el convento de su patria en 29 de abril de 1645. Profesó en 17 de junio 1647, en manos del M. Fr. Anastasio Vives de Rocamora, prior (después obispo de Segorbe, siendo provincial el Ilmo. Olginat de Médicis, después obispo de Orihuela). Habiendo pasado a Madrid por negocios importantes, fue nombrado predicador del rey Carlos II en 1 de junio de 1666. Después el mismo monarca le eligió para obispo de Ampurias en la isla de Cerdeña a 27 septiembre de 1674, y en 1 de abril del mismo año le consagró en el convento de Onda el Ilmo. Vives de Rocamora, con asistencia del recién electo obispo de Segorbe D. José Sanchiz, y de D. José Barberá, obispo Maronense. En el mismo año, día 2 de octubre, tomó posesión de su dignidad por medio de un procurador. Habiendo llegado a su iglesia en 10 enero de 1675, empezó a visitarla, no obstante el rigor del invierno, corriendo toda su diócesis hasta 4 de mayo, en que concluyó. Murió (según el libro de difuntos del convento del Carmen) en 11 diciembre 1678.

De la obra que trae Ximeno, núm. 1: Perfecto cura de almas, hizo de ella un compendio D. Fr. Antonio Agustín, monje jerónimo y obispo de Albarracín, del que habla Nicolás Antonio, tomo 2, diciendo que se imprimió en Gerona año 1665.

La obra del núm. 2: Sermones &c. dice Villiers, biblioteca carmelitana, que estaba para publicarse un segundo tomo de esta obra.


D. RODRIGO ARTÉS Y MUÑOZ.   

1680.

Caballero valenciano, hijo legítimo de las musas: “tan conocido por su nobleza, por su ingenio, por sus prendas y erudiciones, como lo acreditan las experiencias de sus aciertos en certámenes y academias.” Así se explicó el P. Fr. José Carbó en el vexamen de las obras poéticas que se trabajaron en las fiestas por el declarado culto inmemorial de San Juan de Mata y San Félix de Valois, a la pág. 535 del libro en que las historió el P. José Rodríguez, impreso en Valencia, año 1669, en el cual desde dicha página se lee el vexamen en verso que pronunció sobre el mérito de las obras el citado D. Rodrigo como juez de aquel certamen.

A la verdad, no hay una colección impresa de sus poesías; pero son tantas en número, que corren esparcidas en varios libros que manifiestan en evidencia el gran numen poético de nuestro Artés; daremos noticia de las que hemos visto en varios libros.

Al principio de la obra de Murs y Valls de D. José Llop, hay un soneto; igualmente hay versos del mismo en las páginas 32 y 51 de la real academia celebrada en Valencia en 6 de noviembre 1668, al cumplir siete años la majestad de Carlos II, impresa en dicha ciudad el año 1669, en 4.° También en la página 30 de otra academia celebrada en ella, que se tituló: Sol de academias, impreso en 1658, en 4.°, en la cual se lee (pág. 55) como el referido Artés era el tercero y último de sus hermanos; del mismo hay un soneto al fin del sermón de honras del venerable Arbuixec, predicado por el arcediano Ballester en 1671, en 4.° En el libro de fiestas celebradas en Valencia el año 1667, a la traslación de nuestra señora de los desamparados a su nueva capilla, historiadas por D. Francisco de la Torre, se lee desde la página 168 una discretísima introducción de dicho D. Rodrigo Artés, del cual dijo Latorre (pág. 157) que: “Arte es no solo, sino ingenio, cuanto respira su clara vena...” En el libro luces de la aurora, impreso en Valencia año 1665, se hallan versos de Artés en las páginas 394, 95; y en la pág. 397 comienza el vexamen que dio con ingeniosa erudición a las obras poéticas que por aquella función se compusieron, que fue en aplauso del decreto de Alejandro VII, expedido en 2 de julio de 1664, en honor de la Concepción de nuestra señora; y a la pág. 536 del mismo libro, comienza una descripción, que en verso trabajó el dicho D. Rodrigo, de la comedia que se representó con esta ocasión, y se halla inserta en el referido libro, en el cual a fojas 583, comienzan otras varias poesías del mismo, compuestas a diferentes asuntos. También en el libro intitulado: Varias y hermosas flores del Parnaso, que publicó Juan Bautista Aguilar, y se imprimió en Valencia por Francisco Mestre, año 1680, en 4.°; y en una colección de varios poetas de aquel tiempo, hay en la página 7 unas endechas a Cristo nuestro redentor en el calvario; otras a Jesús Niño abrazado con el árbol de la cruz, en la pág. 17; un romance a la imagen del Cristo del Salvador de Valencia, pág. 44.


D. LORENZO MATEU Y SANZ.

1680.

De quien hace honorífica memoria, Salazar, Casa de Silva, tomo 2, lib. II, pág. 675.

Se añade que compuso también: 1. Sumario de los señores Reyes de Aragón, manuscrito. Lo cita Ortí en la vida de Aranda, al folio VIII.

2. Práctica civil.

Consta haber compuesto esta obra por una deliberación de la ciudad de Valencia de 10 de diciembre 1676, por la que resulta que se estaba imprimiendo en León de Francia, y también habérsele mandado librar trescientas libras para ayuda a los gastos de su impresión; en lo que no hizo la ciudad más que cumplir su antigua y plausible costumbre de auxiliar bizarramente, y a cualquier persona que trabajaba alguna obra, para alentar con este fomento y aliciente a los estudios, de cuya frecuente práctica observada, hemos citado en esta Biblioteca muchísimos ejemplares, sin tener libertad para omitir, aunque brevemente, algunos otros.

En deliberación de 1 de febrero 1539, se mandaron librar cincuenta libras a cumplimiento de cien, que por otra de 19 de noviembre de 1537, se habían mandado dar a Pedro Antón Beuter para ayuda de costa de la impresión de su obra Chronica de les antiguetats ó Conquesta de la Ciutat de Valencia (es la edición lemosina de 1538). Por otra de 22 de diciembre 1574, se dieron a Martín de Viciana, notario, veinte y cinco libras, para subvención de las costas de la obra que había estampado en alabanza de la lengua valenciana: es un cuaderno en 4.° que no llega a tres pliegos, y después se reimprimió en 8.° 

Por otra deliberación de 5 marzo de 1575, consta, como prestando su consentimiento los catorce prohombres del Quitamiento, se le entregaron por la ciudad cien libras al P. M. Justiniano Antist, dominico, para ayuda de costa de la impresión de la vida de S. Vicente Ferrer, y habiéndola después adicionado, se le mandaron dar otras cien por deliberación de 9 de mayo de 1581, aunque no tuvo efecto este pago, ni la impresión, por haberse perdido el original, como dice Ximeno, tomo 1, pág. 212.

En el año 1620 hubo otra deliberación, por la que a D. Gerónimo de León, para subvención de los gastos de la impresión del tomo 1.° y 2.° de sus Decisiones, se le dieron mil libras, y después cuando imprimió el tomo 3.° otras mil. A D. Lorenzo Mateu y Sanz, además de lo ya antes insinuado, se le libraron otras trescientas libras para la obra de Regimine Regni Valentiae, según la deliberación ya al principio citada. Cuyas considerables asignaciones se libraban de cualquier clase que fuesen las obras: como la del grabado y láminas de anatomía, para lo que aún antes de efectuarse, le asignaron 800 libras a Crisóstomo Martínez; por otra de Cirugía a Miguel de Leriza; por otra geográfica al P. Tosca, cuyas deliberaciones y cantidades respectivamente asignadas pudiera individuar, y mediante ellas le quedaba al autor franca la obra, y a su beneficio el producto de su venta, siendo la ciudad un mecenas continuo, que fomentando las letras sacaba Virgilios, como lo cantó Marcial:

Sint Moecenates, non deerunt, Flacce Marones.

Virgiliumque tibi ad tua rura dabunt.


D. ANTONIO JUAN DE CENTELLES.

1681.

Primer marqués de Centelles, natural de la ciudad de Valencia, parroquia de S. Martín, del que habla Ximeno, tomo 2, pág. 365. Añádense a sus obras:

1. Tratado histórico de las dignidades, oficios y cargos en las casas de Ioan y de Centelles. Nápoles, sin año, en folio.

La inscripción que trae Ximeno copiada de Topio, biblioteca napolitana, está equivocada, y trasladada por mí fielmente, es la siguiente:

D. ANTONIO IOANNI DE CENTELLAS

MARCHIONI

VALENTIAE, NOBILISSIMIS PARENTIBUS, ORTO

SED E REGNO NEAPOLITANO

ORIGINEM HABENTI.

EQUITI ORDINIS CALATRAVAE

REGIAM CANCELLARIAM REGENTI,

REGIAE CAMERAE LOCUMTENENTI,

AD REGIUM IN APULIA PATRIMONIUM

REGENDUM, AC REFICIENDUM

ELECTO.

SINGULARI DOCTRINA, VITAE INTEGRITATE, MAGNANIMITATE,

MODESTIA, LITERATORUM FAUTORI; & OPTIMIS MORIBUS

EXIMIO.

IN MEDIOLANI STATU MAGNO CANCELLARIO,

TANDEM MADRITI REGIO CONSILIARIO,

FISCIQ; PATRONO IN SUPREMO ITALIAE SENATU,

REGIORUMQUE DIPLOMATUM ADSERVATORI PRAECLARISSIMO.

NICOLAUS TOPPIUS I. C.

EJUS PERPETUO HEROI

ELOGIUM HOC UTINAM PERPETUUM

DEVOTO ANIMO POSUIT.

ANNO REPARATAE SALUTIS M.DC.LXXVIII.

IDIBUS IULIJ.


V. FR. ANTONIO MARIGÓ.

1682.

Religioso mercenario, hijo de la ciudad de Valencia, bautizado en la parroquia de Santa Catalina mártir, a 23 de febrero de 1607. Fue maestro en su religión, y después de otros muy merecidos honores, murió a 27 de diciembre de 1682. Cuya ejemplar vida escribió el P. Nolasco Risón, como lo expresa Ximeno, tomo 2, pág. 134.

Estando nuestro venerable conventual en Valencia, acabó de escribir en 18 de abril de 1678 la obra siguiente: 1. Tratado de la presencia de Dios nuestro señor para que los viadores creyentes vivan en continua fee, y memoria de su divina majestad siempre les hace y mira. Manuscrito, cuyo original vi en poder de Fr. Lorenzo Quiles, mercenario, y archivero que fue del convento del Puig.


FR. JOSÉ FAVORES.

1682.

Religioso dominico, natural de Valencia, de quien Ximeno, tomo 2, pág. 92, dice que publicó en Roma: Epitome singularium gestorum Sancti Ludovici Bertran, en dicha capital, por Angelo Tinas, en el año 1671, en 16; y que después vuelto de su viaje reimprimió en castellano este Epítome, dedicándole a la ciudad de Valencia. La traducción, pues, tiene este título: 1. Sumario de la vida del segundo apóstol Valenciano, el glorioso P. S. Luis Bertrán canonizado solemnemente por nuestro santísimo Papa Clemente X, a 12 de abril este año 1671. En Valencia, por Gerónimo Vilagrasa, año 1617, en 4.° 


D. FRANCISCO LA GUARDIA Y BELLVÍS.

1686.

Generoso del reino de Valencia, cuyo título consta por el libro: Sacro Monte Parnaso, que aunque anónimo, sabemos fue su autor el P. Vicente Claudio, de la compañía de Jesús. Fue un poeta de más que mediano numen, haciendo mucho papel en el referido libro, pues tiene una cuartilla glosada en cuatro décimas en la pág. 3; endechas reales al sueño, pág. 27; un romance, página 65; un soneto, pág. 187. Y como esta obra se imprimió en Valencia en 1686, colocamos en él a nuestro poeta.


FRANCISCO RAMÓN GONZÁLEZ.

1686.

Valenciano; poeta desconocido, licenciado y capellán, como se firma en la dedicatoria del libro antes insinuado: Sacro Monte Parnaso; en este, pues, tiene muchas poesías, la mayor parte en lemosín, como son: décimas en las páginas 56, 80, 104, 117, y 140; quintillas también en valenciano, pág. 89; redondillas, pág. 110; un romance lemosín, página 157; otro en castellano, en la 164; octavas lemosinas, pág. 174; endechas reales en castellano, página 202, y un romance endecasílabo en la pág. 219. Todas ellas podían formar un volumen, por lo que es acreedor este poeta hagamos honorífica mención de él, colocándolo en esta Biblioteca.


JUAN CENTELLAS.

1686.

Valenciano, aunque ignoramos el lugar de su nacimiento. Publicó: 1. Documentos espirituales de la esposa de la cruz: que dedicó a D. Francisco Lloris de la Torreta, canónigo de Valencia, con fecha en la misma ciudad a 30 de mayo de 1686. Valencia, por Pablo Fernández y Lorenzo Mercer, año 1686, en 16.


D. ISIDORO MATEU Y SANZ.

1687.

Sin duda hermano de don Lorenzo Mateu y Sanz, del que habla Ximeno, tomo 2, pág. 85.

Fue muy inclinado a la poesía, como se ve en los versos que se hallan de él a la pág. 166 del libro: luces de la aurora, de D. Francisco de la Torre, y a las páginas 211, y 239 del libro de fiestas a nuestra señora de los desamparados, por el mismo Latorre; también en los folios 42 y 100 de la real academia que celebró Valencia en 6 de noviembre de 1668 con motivo de cumplir 7 años el rey Carlos II, impresa por Gerónimo Vilagrasa, año 1669, en 4.° Además hay una erudita aprobación al libro intitulado: varios romances escritos a los sucesos de la liga sagrada desde el sitio de Viena, hasta la restauración de Buda, y otras plazas conseguidas en tres años, en que se celebran doce héroes insignes de estos tiempos, por el hermano Antonio Fajardo de Acevedo, ermitaño de la ermita de S. Antonio de la villa de Carcagente (Carcaixent), impreso en Valencia por Jaime Bordázar, en el año 1687, en 12.° después de cuya aprobación hay cuatro décimas del dicho Mateu, una en castellano, otra en valenciano, otra en latín, y otra en italiano.


D. MARCO ANTONIO ORTÍ Y MOLES.

1687.

Natural de Valencia, de quien trata Ximeno, tomo 2, pág. 103. Se añade que hay poesías suyas en la pág. 18 del libro: Academia celebrada en Valencia en 5 de febrero de 1685, impreso en esta ciudad por Vicente Cabrera, en 4.° Al principio del libro: Fiestas por la canonización de Santo Tomás de Villanueva, historiadas por su padre D. Marco Antonio Ortí, hay unas redondillas; y un soneto al fin del sermón de exequias del V. Arbuixec, predicado por el arcediano Ballester; finalmente, hay versos del mismo en el Parnaso de S. Francisco Xavier, pág. 224, expresando ser obra póstuma, y es así, porque se imprimió dicho libro en 1687.


V. FR. DOMINGO ALEGRE.

1687.

De quien trata Ximeno, tomo 2, pág. 102. Se añade a sus obras: 1. Quaresma sobre las 42 mansiones de los hijos de Israel en el desierto, aplicado a cada mansión por su orden uno de los Evangelios de las Dominicas y Ferias que en ella ocurren. Manuscrito. Esta cuaresma contiene 45 sermones, escritos todos de su mano, y llenas sus márgenes de adiciones doctas y curiosas. Síguese inmediatamente después de la tabla: 2. Varios sermones que en el progreso de la Cuaresma suelen predicarse; escritos también de su mano, en 61 folios. Luego después se sigue:

3. Quaresma sobre las 42 generaciones del primer capítulo de San Mateo aplicado a cada Patriarca uno de los Evangelios de los Domingos y Ferias que en ella ocurren.

Están también de su letra escritos en 286 folios. Síguese:

4. Sermones para misiones y pláticas vespertinas. Consta de 41 folios.

5. Commentarius in Tractat. Sphaera Johannis de Sacro Boscho. Manuscrito de su letra, en 8.° Después de este Comentario que expresa ya Ximeno, se siguen:

6. Quaesita varia Astronomica, manuscrito. Sigue:

7. De modo theorico directionum de tempore effectus et successionis et alia ejusmodi. Manuscrito. El elogio de las actas que copia Ximeno, no es del capítulo celebrado en Barcelona, sino en Valencia, a 15 de abril de 1690.


FR. CIRILO DE ALICANTE. (Cirilo Pascual Ibarra)

1688.

Religioso capuchino. Ilustrando el artículo de este autor, que trae Ximeno, tomo 2, pág.  96, diremos que fue hijo de D. Francisco Pascual y doña Ana Ibarra: nació en 1618. De edad de 16 años vistió el hábito de capuchino en Valencia, día 21 de septiembre de 1634; donde permaneció hasta su muerte acaecida en el convento de dicha ciudad en 26 de febrero de 1688. Era un orador célebre, dotado de una gracia particular para el púlpito, que le acarreó el honor de ser nombrado predicador de S. M.

En las fiestas que se hicieron en la villa de Onteniente, por el Breve de Alejandro VII, predicó el primer sermón, según consta de la relación que de ellas escribió el Dr. D. José Navarro, por estas palabras: “Llegado el tiempo del sermón (día 13 de septiembre de 1662) subió a predicar el primero el M. R. P. Fr. Cirilo de Alicante, guardián de PP. Capuchinos de Valencia:::: cuya erudición y eminentes letras, aún el clarín sonoro de la fama no es capaz para publicarlas y aplaudirlas::::” Continúa elogiándole, y después también en la introducción a la Justa poética que hizo la nobilísima villa de Onteniente a la Purísima Concepción de María Santísima.


D. ONOFRE VICENTE DE IXAR, PORTUGAL, MOMPALAU Y ESCRIVÁ.

1688.

Natural de la ciudad de Valencia. Segundo conde de la Alcudia y Gestalgar, barón de Xalón y Gata, de quien habla Ximeno, tomo 2, pág. 104. Añádese.

1. Genealogía de las casas de Escrivá, Monsoriu, Mompalau y Ferrer. Manuscrito que cita Franckenau, bibliot. heráldica, pág. 323, y en la siguiente 24 dice que escribió también: 2. Historia universal de España, formada con elegancia, noticias selectas y pureza de estilo. Manuscrito.

Hay poesías suyas, glosando una cuartilla en la pág. 210; y pág. 307 del libro de luces de la aurora, de D. Francisco Latorre; y en la vida de S. Pedro Pascual, titulada: La cándida flor del Turia, al principio hay un soneto de nuestro autor.


VICENTE IZQUIERDO.

1689.

Sacerdote, natural de la ciudad de Valencia, del que trata Ximeno, tomo 2, pág. 109. Se añade la obra siguiente: 1. Antigüedad de la Metropolitana iglesia, catálogo de sus obispos y arzobispos, y excelentes grandezas de que está adornada. Manuscrito en 4.° que original he tenido en mi poder.


FR. SEBASTIÁN DIONISIO COLERA. (Cólera)

1690.

Carmelita, natural del lugar de Manises, cerca de Valencia, de quien habla Ximeno, tomo 2, pág. 89, colocándolo en el año 1681. Se añade que nació en 7 octubre de 1651. Fue instruidísimo en las matemáticas, teniendo muchas disputas con su contemporáneo el P. Tosca, a quien proponía grandes dificultades. Hizo una lucida oposición en esta universidad a la cátedra de matemáticas, y no habiéndola logrado, marchó a Salamanca, donde la obtuvo en aquella universidad, y regentándola, murió por los años de 1690.

Consta así de un manuscrito que dejó en el Carmen de Valencia el maestro Fr. José Despuig. Además de las obras que cita Ximeno, escribió:

1. Tractatus theologicus et dogmaticus Agiographicus de theologia Scripturistica seu Agiographica id est de verbo scripto, sive de Sacra Scriptura, manuscrito en 4.° Obra que aunque en estilo menos culto, no deja de contener cosas dignas y excelentes. Se conservaba este manuscrito en el convento de Valencia.

2. Manuscritos varios y de varias materias; comenzóle (como él mismo dice) en 1 de enero de 1678, residiendo en el convento de Játiva, en un tomo en folio que comprende 309 fojas.

3. Suma Astrónomo-lógica, propónese lo mejor y más selecto de toda la Astronomía y Astrología, así especulativa como práctica, recogido de los mejores y más graves autores, así antiguos como modernos, que de esta materia han escrito; y especialmente ajustado a la racional y física astrología gálica del célebre Juan Bautista Morino, restaurador de la astrología. Comenzóse a 13 de junio del año 1690. Autor el P. Fr. Sebastián Dionisio Cólera de Avinent, carmelita valenciano. Ofrécela a los ingenios españoles. Trasladóla de su original Emmanuel Llorens su amantísimo discípulo. Manuscrito en 4.° Está dividido en dos partes, la primera trata de la astronomía, y la segunda de la astrología. La he tenido en mi poder.

FR. CRISTÓBAL BAS.

1691.

Religioso mercenario. A más de lo que nos dice Ximeno en su tomo 2, pág. 109, tratando de este autor, puede conocerse su excelente ingenio y esmero en la poesía, por la obra del núm. 2: Afectos de un corazón contrito, que es un acto de contrición en cuartillas continuadas, que forman un coloquio místico, dirigido al santo Cristo de la capilla de S. Juan de Letrán, en su convento de la merced de Valencia. En otras muchas poesías que compuso, como son: una glosa en cuatro décimas que se leen a la pág. 205 del libro intitulado: luces de la aurora, que refiere las fiestas con que el convento de S. Francisco celebró en Valencia el decreto de la concepción, impreso en 1665, en 4.° Del mismo hay una cuartilla glosada, con décimas, en el parnaso de S. Francisco Xavier, impreso en Valencia, año 1687, en 4.°, página 12; y en la 240, una poesía que comprende tres, y notada cada una con su número distinto: si se lee comenzando de la primera columna, resulta romance heroico; comenzando a leerse de la segunda columna, es romance regular de ocho sílabas; y si de la tercera, queda en clase de endechas. Escribió también: 1. Guerra contra guerra. Madrid año 1683, en 4.° ; son nos certámenes. Se publicó anónimo.


FR. DAMIÁN ESTEVE.

1692.

Religioso mercenario, hijo del convento y villa del Puig. La obra que cita Ximeno, tomo 2, pág. 114, al núm. 1, intitulada. 1. Demostración legal y política. Se imprimió, aunque variado algo el título, el año 1677, en folio.

En la librería del convento del Puig se conserva otro tomo en folio de: 2. Cartas latinas.

Son diez muy largas, en especial la nona, que es: Ad Illustrissimum D. Iohanem Caramuel Episcopum. De carmine, et de Simbolo Astronomico Pithagoraeo et Bedae. Del que ya el P. Fr. Francisco Martínez hace mención en la Historia de Nuestra Señora del Puig, lib. 1, cap. 1, pág. 8.


D. JOSÉ RAMÍREZ.

1692.

Presbítero, de la congregación de S. Felipe Neri, natural de Valencia, de quien Ximeno habla, tomo 2, pág. 3. Se añade que la obra del núm. 1, que de este autor trae nuestro bibliógrafo, intitulada: Via lactea, se reimprimió en Milán, esto es, Mediolani ex Tipographia Iosephi Ambrosi, Maietae 1680, en 8.°, edición anterior a la que cita Ximeno. Fue nuestro autor aficionado a la poesía, como se ve a las páginas 455, 459 y 461 del libro de fiestas a San Juan de Mata y S. Félix de Valois, del P. Rodríguez, en donde hay tres jeroglíficos de los cuales el primero llevó el tercer premio. Otras varias obras suyas de esta clase se hallan al fin del sermón de honras del V. Dr. Gaspar Blas Arbuixech, predicado por el arcediano Ballester en 1671. Sin duda era nuestro autor aficionadísimo a este ramo de poesías; pues en las honras funerales de la Reina María Luisa de Borbón, solemnizadas en esta ciudad en 1689, compuso nuestro Ramírez sesenta jeroglíficos según la obra que de ellos escribió D. José Ortí, pág. 157.


D. VICENTE TEXEDOR DE BELVÍS Y NONCADA.

1693.

Natural de S. Felipe, antes Xátiva, caballero del hábito de Montesa, señor de Montartal, capitán de caballos en el reino de Valencia, y Maesse de campo de infantería española. Era muy aficionado a la poesía, y por ello fue secretario en una academia que se celebró en su patria, respondiendo en prosa y rematando en verso a los asuntos encomendados a los poetas, y que estos proponían en prosa, concluyéndoles con una copla ya de consonantes o de asonantes; cuya academia publicó con este título: 1. Académico pensil de las musas. Dispuesto y compuesto en el breve espacio de 9 días; plantado en casa del Sr. D. Miguel Figuerola y Castro caballero de nuestra señora de Montesa; y meritísimo gobernador de la ciudad de Játiva. Valencia, por Francisco Ciprés, año 1669, en 4.° 

Hállanse versos de nuestro Texedor en los folios 239, 266 y 264 de las fiestas de la virgen de los desamparados, y en las de S. Juan de Mata, páginas 427, 502 y 528. Y amás en el de las que se hicieron en Almansa a la canonización de S. Pascual Bailón, escritas por el Dr. D. Pedro Luis Cortés, en la pág. 137 hay una glosa a una cuartilla; un soneto pág. 155, y décimas, pág. 166. Con otras que corren en diferentes certámenes y academias, tanto en su patria, como fuera de ella. Y como las referidas fiestas de Almansa se hicieron en 1692, por ello lo colocamos en este año.


FR. GASPAR NAVARRO.

1694.

Religioso carmelita, natural de Valencia, del que habla Ximeno, tomo 2, pág. 119. Se ha de añadir que de la obra del núm. 3, intitulada: Narratio Evangelica Mathaei, de la que imprimió no más un tomo, dejó el segundo concluido, y dispuesto para la estampa; pero le sobrevino la muerte, y se desapareció, como también los medios que había tomado para su publicación.

Núm. 4. Otros tratados de teología escolástica, los que son: 1. De esse Dei piusque atributis. Le concluyó día 12 de junio 1655. 2. De Scientia Dei. Día 22 de junio de 1654. 3. De voluntate Dei. Día 20 junio de 1657. 4. De sacro Triados mysterio. Lo acabó en 17 de junio 1658. 5. De sensibus sacrae scripturae. Lo acabó en 9 junio de 1666, y antes: Index Sacrorum Bibliorum voces abstrusiores referens, et exponens.


GABRIEL VERDÚ.

1694.

Natural de la villa de Catí, diócesis de Tortosa. Presbítero, doctor teólogo, beneficiado en la metropolitana de Valencia, y en ella penitenciario de su cabildo; de donde pasó a ser cura de la parroquial de la villa de Julilla, (Chulilla) arzobispado de Valencia. Escribió:

1. Descripción de Catí. Manuscrito.

2. Vida política, y muerte del Excmo. Sr. D. Fr. Isidoro Aliga arzobispo de Valencia. Manuscrito.


CRISÓSTOMO MARTÍNEZ.

1694.

Natural de Valencia, pintor de profesión, bastante diestro en su facultad, y tan laborioso, que sin embargo de estar falto de salud y accidentado del mal de gota en manos y pies, emprendió por los años 1680 unas tablas de anatomía, para cuya perfección pasó a Francia, y después a Flandes, donde delineó y grabó:

1. Veinte tablas de anatomía, inventadas, delineadas y grabadas por él todas, en pliegos de marca mayor y algunos de dos.

En cada una presenta a lo natural las partes del cuerpo humano, con propiedad y hermosura, añadiendo de letra suya al pie o al dorso de cada lámina la correspondiente explicación en español. En una de ellas, que es de dos pliegos, y contiene tres figuras humanas de estatura proporcional, hay un círculo, y dentro de él, un esqueleto de menor tamaño, y con letras de buril está firmado el autor de esta manera: Chrisostomus Martinez Hispanus, invenit delineavit, sculpsit. Cum privilegio Regit. La voz Hispanus está añadida en la impresión. 

Paran dichas tablas en poder de la ciudad de Valencia, a quien las envió desde Flandes, suplicando al mismo tiempo algún socorro para su continuación.

La ciudad, en vista de los informes y aprobación de peritos, médicos y cirujanos, deliberó se le diesen ochocientas libras para auxiliar de algún modo los gastos que inevitablemente cuestan a sus autores tales obras; pero habiéndole sobrevenido la muerte, acaecida por los años de 1694, no pudo concluir la suya, la cual aunque imperfecta, y comprensiva de solas veinte láminas, se conserva en la referida ciudad de Valencia. En un retrato suyo que poseo, grabado seguramente por él, con trofeos de su arte, tiene esculpido al pie: 

CHRISOSTOMVS MARTINES VALENTIANVS

Anagramma

ISTIC INTER SVMMOS IN ARTE SVA VOLANS

Epigramma

Quod praedocta, manu, tua Musa Poesis adumbrat 

Hoc Pictura Loquens Carmine nostra refert

Vtraque Pingentem digna te hac Laude Coronat

ISTE SVA SVMMOS INTER IN ARTE VOLAT

Hieronymus Lopes Ecclesiastes Burdigalensis Regius

Sacra Facultatis academia Burdiga.

Professor.     

Habla de nuestro Crisóstomo Rodríguez, bibliot. Valent. pág. 103.


D. FR. MARCELO MARONA.

1694.

Religioso dominico, natural de la ciudad de Valencia, de quien habla Ximeno, tomo 2, pág. 117. Se añade que además de las obras que trae de nuestro autor, compuso también: 1. Gramática en tercetos castellanos, de que hace ya mención Ximeno, pág. 117, col. 2.

2. Letanías latinas a la Virgen del Rosario, a S. Vicente Ferrer, S. Luis Bertrán, y Santo Tomás de Aquino en esdrújulos. Se han impreso, y se cantan en predicadores.

3. Rithmus in laudem S. Th. Aquin. imitando la secuencia del Corpus, que empieza así: Lauda Ecclesia Saluatorem, qui tibi quintum Doctorem, Sanctum Thomam contulit.

4. Officium de SS. Vincentio Ferrario, et Ludovico Bertrando Confesor Ord. Praed. Se imprimieron en Valencia por Gerónimo Vilagrasa, año 1673. Lo compuso para rezarle Feria II non impedita; y por eso tiene doce lecciones para otros tantos meses del año. En cada una de ellas pone primero una virtud de S. Vicente, y después dice cómo la imitó S. Luis.

5. Officium propium S. Ludovici Bertrandi Confes. Ordin. Pradic. Existe manuscrito en el archivo.

6. Oratio in solemnitate Generalium Comitiorum habita coram Rmo. Generali, et Diffinitoribus Valentiae 1647. Se conserva original en el tomo segundo de papeles varios, en 4.°, en Santo Domingo.

Las dedicatorias en la colección de las obras de Granada, impresas en Madrid por Juan García Infanzón, tres tomos en folio, son de nuestro autor, aunque van en nombre de Gabriel de León.


D. JOSÉ PÉREZ DE MONTORO.

1694.

Natural de Játiva, del que trata Ximeno, tomo 2, pág. 116. Se añade que todas las obras líricas y poéticas de este autor, se imprimieron con este título:

1. Obras póstumas, líricas, humanas de D. José Pérez de Montoro, secretario de S. M. Recogidas y dadas a la estampa por D. Juan de Moya. Madrid, en la oficina de Antonio Marín, año 1736, dos tomos en 4.°


D. PEDRO LUIS CORTÉS.

1696.

Presbítero, valenciano, nació en la villa de Ibi, reino y arzobispado de Valencia; estudió en esta universidad, en la que se graduó de maestro en artes y doctor en sagrada teología: fue en ella catedrático de filosofía, y siendo sacerdote obtuvo el curato de la santa iglesia de Orihuela, de donde se trasladó al de la parroquial de San Pedro de la villa de Novelda: por medio de permuta pasó a serlo a la de S. Salvador de la real villa de Ibi, su patria, donde permaneció hasta su muerte, acaecida el último día de octubre de 1696. Cultivó con mucha facilidad y gracia las musas, y publicó:

1. Demostraciones festivas con que la noble, antigua y siempre leal villa de Almansa celebró la canonización de su especial patrono y abogado S. Pascual Bailón, de los descalzos de S. Francisco, en su convento de Santiago, adonde vivió y obró muchos milagros. Escribiólas el Dr. Pedro Luis Cortés. Y las saca a luz D. José López de Huesca, regidor de dicha villa. Madrid, imprenta real, por Mateo de Llanos, año 1693, en 4.° 

2. Métrica oración panegírica que en variedad de metros, elogia la vida de S. Pascual Bailón. Es una poesía muy larga que corre al principio del antes referido libro.

Fue fiscal de la justa y vexamen de las poesías que se presentaron en estas fiestas. Y en ellas hay de nuestro Cortés las siguientes: canción y octavas, en la 138; una glosa con cuatro décimas, página 152, un romance en la 157; y pág. 167, otras décimas; y el vexamen, pág. 171.

Consta que era natural de Ibi, porque en la pág. 103, dice: “la devoción que toda mi vida tengo al santo, y ser uno de los milagros aprobados por la sacra congregación de ritos, para la gloria de su canonización, la fuente de la villa de Ibi, mi patria...”

En la pág. 206 hay un romance al milagro que S. Pascual Bailón hizo en la real villa de Ibi, con Domingo Pérez (que hoy vive, dice), y fue que al invocar su nombre dio un golpe con un azadón entre unas peñas, y salió una fuente que no ha faltado jamás: es uno de los aprobados para su canonización. Este romance es composición también de nuestro Cortés. 


FRANCISCO LLORENS.

1696.

Natural de la ciudad de Valencia, ciudadano, jurado en cap (o primero) de la dicha ciudad en el año 1656. Fue enviado con una embajada en representación del ayuntamiento a Felipe III, y con este motivo compuso lo siguiente: 1. Informe a la Magestad del Rey nuestro Señor D. Felipe el grande, III de la Corona de Aragón, que propuso Francisco Llorens en justificación de haber resuelto su embajada la ciudad y consejo general, y de las otras deliberaciones que fueron medio para su ejecución. Valencia, sin año ni nota de impresor, en folio.

Este escrito versa sobre desavenencias entre el virrey y justicia criminal, mandándole aquel que cuando fuese a verle entrase sin vara, lo que motivó a la ciudad a hacer el informe antecedente a favor del justicia criminal.

Francisco Llorens tuvo tanto crédito en la ciudad, que sirvió muchísimas veces el empleo de jurado, y otros, como fueron en los años 1652, 53, 56, 64, 72, 74, 75, 76, 80, 83, 91, 93, 94 y 1696, por lo que le colocamos en este año.


VICENTE CARBONELL.

1696.

Natural de la villa de Alcoy, del que habla Ximeno, tomo 2, pág. 71, al año 1672. Se añade que trabajó: 1. Representación histórico-genealógica que dio a S. M. Impresa en 1696, en folio. En ella recuerda y refiere su alcurnia y ascendencia por grados, desde el capitán Poncio Carbonell, que vino a la conquista del reino de Valencia, hasta el mismo D. Vicente Carbonell. He visto un ejemplar. Hay otro manuscrito, acaso el original que se guarda registrado en el archivo de la bailía general y real patrimonio, armario número 15 de papeles en folio, que contiene varios manuscritos auténticos, reales cédulas, privilegios y ejemplares de memoriales.

Siendo impresa dicha Representación en 1696, colocamos en él a nuestro escritor.


V. RUFINA ROS DE JESÚS.

1697.

Natural de la ciudad de Orihuela, donde nació, y fue bautizada martes 5 de febrero de 1658 en la parroquia de santa Justa y Rufina: fueron sus padres Ginés Ros y Vicenta Martínez. Tomó el hábito de la tercera orden de S. Francisco, martes 25 de marzo de 1681. Era sobrina del V. hermano Gerónimo Tomás de Casanova y Sanchiz, que murió en Granada, y cuya vida escribió D. José Vicente Ortí y Mayor, como dice Ximeno, tomo 2 de escritores valencianos, folio 316, columna 1: allí mismo consta escribió dicho Ortí también la de nuestra Rufina. Ambas vidas existían originales manuscritas en el archivo del real monasterio de S. Miguel de los Reyes, cajón de papeles de la casa real de Nápoles &c. Murió en jueves 1 de agosto de 1697, a los 39 años de su edad; fue enterrada en la iglesia del convento de S. Gregorio de religiosos franciscos descalzos, y llevado su cadáver en hombros de sacerdotes, celebrándole exequias en la parroquial de Santa Justa y Rufina miércoles 21 de agosto del referido año: dijo la oración fúnebre su director el P. Fr. Pedro Domingo, religioso francisco descalzo en la provincia de S. Juan Bautista, y se reimprimió dicho año en Orihuela por Jaime Mesnier. En 4.° De orden de su director escribió 1. Su vida, manuscrita.

Compuso unas poesías para expresar su afecto en la noche de Navidad, como más extensamente consta de su vida ya insinuada por D. Vicente Ortí.


FR. JOSÉ PARDO DE LA CASTA.

1698.

Religioso carmelita, natural de Valencia. A lo que dice Ximeno, tomo 2, pág. 127, al núm. 3, hablando de este autor, añadimos que cultivó las musas, como se manifiesta en las poesías que insertó en la página 35 de la academia que se celebró en Valencia, titulada: Sol de academias. También hay un romance en la pág. 394 del libro compuesto por el P. Rodríguez de fiestas a S. Juan de Mata y S. Félix de Valois. Y en el libro intitulado: luces de la aurora, que son de fiestas a la purísima concepción, historiadas por D. Francisco de la Torre, las hay también en las páginas 208, 296 y 315.


FR. JUAN BAUTISTA FORT.

1698.

Religioso dominico, natural de la ciudad de Valencia, e hijo de hábito del convento de predicadores de dicha ciudad. Fue discípulo del célebre maestro Lerma, de dicho orden, y un varón observantísimo, teólogo muy docto, predicador y poeta. Tuvo muchos oyentes en sus sermones, siendo tal su fama, que predicó diez cuaresmas, esto es, desde el año 1689, hasta el de 1698 inclusive, en el lugar de Belloch.

Escribió: 1. Sermones, tres tomos en 4.° Manuscritos que se guardaban en el convento de predicadores.

2. Sermón de los santos patriarcas S. Juan de Mata y S. Félix de Valois, fundadores de la orden de la santísima trinidad. Valencia por Benito Macé, año 1669, en 4.°

3. El prodigio de Belloch. Auto sacramental de la milagrosa imagen de la virgen del adyutorio, la cual está en el término de la villa de Belloch: manuscrito que dice el canónigo de Tortosa Jaime Mateu, en la historia del referido pueblo, pág. 6, tenía en su poder, y se había representado en dicho lugar en 14 de agosto de 1690.

             

FR. JOSÉ DOMINGO PONTÍ. 

1698.

Religioso dominico, natural de la ciudad de Valencia, de quien habla Ximeno, tomo 2, pág. 132. Fue muy instruido en la lengua latina, como lo manifiesta la carta que en el año 1659, siendo secretario del obispo de Vique D. Francisco Crespí de Valdaura, escribió en nombre de este, a su santidad, suplicando la canonización de S. Toribio, arzobispo, de Lima. También era excelente poeta latino, como lo prueban los 18 dísticos que hizo a la fiesta de la traslación de los santos mártires Luciano y Marciano, celebrada en Vique, día 24 de agosto 1664; y se llevó el premio del certamen poético. Están dichos versos en la pág. 503 de sus manuscritos, y en la 479 se halla: “Síguese un elogio en oración panegírica, que se recitó en el convento de Sta. Catalina mártir de la orden de predicadores al ángel Sto. Tomás de Aquino, en su día del año 1657, la cual dispuso en hexámetros, y la tomó de memoria un licenciado artista, que para imprimirla se añadió.”

Síguense después muchas poesías castellanas en el volumen de sus memorias, y aunque no se expresa que sea autor el maestro Pontí, es muy natural que fueran suyas. En este mismo volumen de sus obras, que es el número con el tomo 14 de papeles varios en folio, y se conserva en el convento de predicadores de Valencia.

Se hallan otras obras manuscritas de nuestro autor, a saber: 1. Las moscas de S. Narcís de Gerona.

2. Noticias curiosas.

3. Noticias necesarias assi á los que leen como á los que escriven Historias, Computos, y Chronologias, que son primeros principios para este fin.

4. Historia verdadera de los Santos Mártires Abdón y Senén Reyes de Persia martirizados en Roma y traídos à Arlés del Rosellón.

5. Noticias mathematicas, diferente de la obra del núm. 2 citada por Ximeno.

5. De la aplicación de las Misas.

7. Camino llano para religiosos y religiosas.

8. Tratado de oración para principiantes y novicios, que concluye con estas palabas: “Este breve raudálico le ofrece para que refresque el Novicio principiante con obsecuente voluntad el M. Fr. José Pontí, calificador del Sto. Oficio en Predicadores de Valencia.” Y luego añade. “Mas prosigamos algo de santos ejercicios...” Y seguidamente pone este título: Qué empleos se podrán hacer después de la oración mental.

D. JOSÉ SALA.

1699.

Natural de la villa de Elche, reino de Valencia, canónigo, maestre escuela en la colegial de Alicante y su catedrático de escritura, calificador del santo oficio en los Reinos de Valencia y Murcia, y examinador sinodal en el obispado de Orihuela. Publicó:

1. Sermón panegírico a S. Juan Bautista en las fiestas que se celebraron en la ciudad de Alicante en hacimiento de gracias por la feliz elección de Gran Maestre de Malta en el eminentísimo señor D. Ramón de Perellós y Rocafull. Orihuela por Jaime Mesnier, año 1699, en 4.° Lo publica Juan Bautista Carciniani, cónsul de la nación maltesa, con una breve relación de lo actuado en dichas fiestas.

En una carta de un anónimo, que precede a la dedicatoria que hace el dicho Carciniani al mismo D. Ramón de Perellós, se dice que nuestro Sala tenía compuestas:

2. Muchas obras de Cuaresmas, varios panegíricos, resoluciones y otros escritos.

Y más abajo se explica de esta suerte: “Oh! quiera Dios que así mismo salgan a luz todos sus escritos, y noticiosos desvelos escolásticos y morales, para que sea por ellos el autor conocido, como por espejo de las edades presentes y venideras, no encerrándose su esclarecido nombre en sola su Ilicitana patria.”


MATÍAS RAMÍREZ.

1699.

De quien habla Rodríguez, Bibliot. Valentina, folio 330, col. 2, y le omite Ximeno. Fue natural de la villa de S. Mateo. Doctor en medicina, y maestro de letras humanas en la ciudad de Alcañiz, en Aragón. Escribió: 1. Gramática de Príncipes. Impreso en Zaragoza. “Así me lo han ministrado (dice Rodríguez) de S. Matheo”, y no sabiendo el año en que se imprimió su gramática, lo colocamos a fines del siglo XVII.


D. FREY HIPÓLITO DE SAMPER Y GORDEJUELA.

1700.

Del orden de Montesa, natural de Valencia, del que habla Ximeno, tomo 2, pág. 135. Fue persona de tantas prendas, que mereció los mayores honores de varios autores, entre ellos D. José Pellicer de Ossau y Tovar, en su Sincello de las iglesias, en la prefacion y dedicatoria. Además de las muchas obras que cita Ximeno, escribió también: 1. Breve relación de la milagrosa imagen de nuestra señora de los desamparados de la ciudad de Valencia y de la copia que goza esta Corte (de Madrid) en la iglesia del real hospital de los Reinos de la Corona de Aragón.

Corre al principio del sermón que predicó el P. Fr. José de Madrid a 9 de febrero 1686, publicado por el mismo Samper en dicho año, con el título siguiente: Gratulación sacra en la primera solemnidad que dedicó a la santa imagen de nuestra señora de los desamparados, nuevamente erigida y colocada en el real hospital de nuestra señora de Monserrate de esta Corte &c.


FR. JOSÉ CARBÓ.

Natural de Valencia, religioso trinitario calzado (del que habla Rodríguez, Bibliot. Valent. folio 483). Fue hijo de hábito del convento de su patria, maestro en teología, y ministro. Logró tener un gran numen para la poesía, como se ve en el certamen celebrado en Valencia el año 1668 a S. Juan de Mata y S. Félix de Valois, comprendido en el libro de fiestas a dichos santos, del P. Rodríguez; pues en él escribió el vexámen que está a las páginas 503 y siguientes, y también hay poesías suyas en las páginas 426, 438, 466, 476 y 483. Son de Carbó los primeros versos de todos los asuntos que para el certamen se propusieron, como lo declara el autor del libro, pág. 425. También tiene versos en el Parnaso de S. Francisco Xavier, pág. 266; y en las páginas 78, 98 y 99 de la academia celebrada en el palacio real de Valencia, al cumpleaños de Carlos II; y en otra academia que se celebró en esta ciudad, impresa por Vicente Cabrera, año 1685, a las páginas 19 y 20. En el libro: Funesto jeroglífico, que es de exequias a Felipe IV, celebradas en Valencia, año 1666, hay poesías en la página 115, y también al principio. Las hay en el libro de fiestas a nuestra señora de los desamparados, en las páginas 218, 231, 255, 259 y 282. En el libro: luces de la aurora, pág. 245, y en lemosín 332, hay versos de Carbó. Y como el padre Rodríguez, hablando de este religioso no dice haber muerto en 1700, le colocamos en este año.


FR. AGUSTÍN ÁVILA.

1700.

Religioso franciscano de la provincia de Valencia, natural de Concentaina. Pasó a Guatemala (Goatemala), donde vivió 40 años sirviendo de ejemplar por sus virtudes monásticas. En el mismo día de su fallecimiento, como dice Beristain (1: en su biblioteca, pág. 125), que fue a fines del siglo XVII, se predicó en la iglesia de su convento el Elogio fúnebre, en que después de ponderar el orador su humildad profunda, su penitencia asombrosa, su celo apostólico, sus éxtasis frecuentes, y otros prodigios singulares de santidad, añadió sin escándalo y aun sin admiración del auditorio, que desde la fundación del orden seráfico apenas se encontraría un hijo de San Francisco que hubiese observado con más perfección que el P. Ávila la regla de su santo patriarca. Escribió y se conserva en la biblioteca del convento principal de Guatemala: 1. Libro de la explicación de la doctrina cristiana en lengua Kiche.                     

Continúa en los anónimos.


domingo, 26 de agosto de 2018

Alcubierre

LÉXICO ARAGONÉS DE ALCUBIERRE (Monegros) 
Fernando Romanos Hernando 
Este trabajo es el fruto de dos años de trabajo como profesor de aragonés con un grupo de alumnos y alumnas de Alcubierre de todas las edades. De las aportaciones de todo el grupo, las encuestas que hice a algunas personas de la localidad y sobre todo el vocabulario que pude oír en las clases en las horas de bar y en las fiestas de la localidad en las que participé surgió un caudal de palabras que trato de plasmar en este trabajo de cerca de 800 palabras de la localidad Monegrina de Alcubierre
A. A bezinal. (adv.) Comunadamente, para la comunidad, de forma colectiva sin contraprestación y en beneficio de la comunidad. A canto camino. (adv.) Junto al camino. A colicas. (adv.) Sobre los hombres. A encolicas. (adv.) Sobre los hombres. A escarramanchas. (adv.) A horcajadas. A escuchetes. (adv.) En voz baja, cuchicheando. A l'arreo. (adv.) De forma seguida, a continuación, sin parar. A l'inte. (adv.) Instantaneamente. A l'otrol día. (adv.) Al día siguiente. A lo birulé. (adv.) De cualquier forma. A lo que. (adv.) Cuando. A puro de. (adv.) A fuerza de. A ran. (adv.) A nivel. A tó(t) meter. (adv.) A toda marcha. Ababol. (s. m.) Amapola. Abadejo. (s. m.) Bacalao seco. Abandear. (v.) Tocar las campanas. Abellanera. (s. f.) Avellano. Abentar. (v.) Tirar, lanzar. Abentau. (adj.) Muy rápido. Abiejar-se. (v.) Envejecer. Abocar-se. (v.) Caerse hacia abajo. Abogau. (s. m.) Abogado. Abozinar-se. (v.) Caerse de bruces en el suelo sin poderse levantar. Abozo. (s. m.) Tipo de planta. Acachar. (v.) Agachar. Acantaliar. (v.) Agachar. Achopar. (v.) Empapar. Aclamar-se. (v.) Quejarse, lamentarse. Acotraziar. (v.) Arreglar, acondicionar. Acotraziau. (adj.) Arreglado, acondicionado. Acucuchar-se. (v.) Cobijarse. Acucutar. (v.) Asomarse. Adán. (adj.) Descuidado y desaseado. Adelgazar. (v.) Amasar el pan. Adoba. (s. f.) Adobe. Adubir. (v.) Dar a basto. Aduya. (s. f.) Ayuda. Aduyar. (v.) Ayudar. Afajinar. (v.) Hacinar. Afirmar. (v.) Contratar. Afogar. (v.) Ahogar. Aforrar-se. (v.) Aligerarse de ropa, remangarse o quedarse en mangas de camisa. Aforrau. (adj.) Con poca ropa o remangado. Aforrau. (adj.) Ligero de ropa o descamisado, que no va muy abrigado. Aforro. (adv.) Ligero de ropa, en mangas de camisa o descamisado, remangado. Agostiar-se. (v.) Mustiarse. Aguarte. (expr.) Espera. Aguatillo. (s. m.) Parada de agua. Aguazil. (s. m.) Alguacil. Aguazila. (s. f.) Mujer del alguacil. Aguazo. (s. m.) * Agundante. (adv.) Abundante, mucho. Airada. (s. f.) Ventolera. Airera. (s. f.) Ventolera. Ajazeite. (s. m.) Salsa de huevo y aceite. Ajolio. (s. m.) Salsa de ajo. Ajuntar-se. (v.) Reunirse. Tratarse, tener relaciones con alguien. Ajustador. (s. m.) Chaleco. Al drecho. (adv.) Enfrente, por en medio Al tentón. (adv.) A tientas. Aladro. (s. m.) Arado. Alazete. (s. m.) Cimiento. Alba. (s. f.) Alba. Rayar l'alba. Amanecer. Alberje. (s. m.) Albaricoque. Alberjero. (s. m.) Albaricoquero. Alborzas. (s. f.) Madroños. Alborzera. (s. f.) Madroño. Alcañonera. (s. f.) Tipo de uva. Alcorzar. (v.) Atajar, acortar. Alcorze. (s. m.) Atajo. Alcuerze. (s. m.) Atajo. Aldredes. (adv.) A propósito, a posta. Alentar. (v.) Respirar. Alfalze. (s. m.) Alfalfa. Algarabán. (s. m.) Un tipo de pájaro. Almada. (s. f.) Almohada.
2 Almadeta. (s. f.) Cojín, almohadilla. Almadón. (s. m.) Almohadón. Almario. (s. m.) Armario. Almendrera. (s. f.) Almendro. Almielcas. (s. f.) Hierba forrajera. Almondigas. (s. f.) Albóndigas. Almú(t). (s. m.) Medida de capacidad. Aloda. (s. f.) Alondra. Alparzero. (adj.) Chismoso, cotilla. Alparziar. (v.) Cotillear. Alredol. (adv.) Alrededor. Altero. (adj.) Alto. Alunau. (adj.) Loco. Alzar. (v.) Guardar. Amadezer. (v.) Cubrir a la oveja en celo. Amagar-se. (v.) Esconderse. Amallatar. (v.) Acabar en un sitio. Amañar. (v.) Hacer un apaño. Amás. (adv.) Además. Ambute. (adv.) Mucho, en cantidad. Amerar. (v.) Mezclar con agua, o añadir agua. Amolar. (v.) Fastidiar. Amorrar. (v.) Acercar la boca a un sitio. Amortau. (adj.) De carácter decadente, apagado de personalidad, poco emotivo. También un camino o algo que se acaba. Amprar. (v.) Prestar y tomar prestado. Amprón. (s. m.) Prestado, préstamo. Ir d'amprón. Ir de prestado. Amugas. (s. f.) Cesto de las caballerías. Ancas. (s. f.) Caderas. Andalozio. (s. m.) Nubes negras con lluvia. Angluzia. (s. f.) Deseo fuerte por algo, ansiedad al hacer algo. Angluzioso. (adj.) Ambicioso, ansioso. Anieblau. (adj.) Atontado. Ansa. (s. f.) Asa. Antiojos. (s. m.) Gafas. Anzuelo. (s. m.) Orzuelo en un ojo. Antonzes. (adv.) Entonces. Apajentar. (v.) Llevar a pacer el ganado. Apañar. (v.) Arreglar. Apercazar. (v.) Intuir, entender. Aprezisar. (v.) Necesitar. Arañón. (s. m.) Endrina. Arbañil. (s. m.) Albañil. Arguellau. (adj.) Flaco. Arraclán. (s. m.) Alacrán. Arramblar. (v.) Acaparar. Arrebullonau. (adj.) Revuelto, desordenado. Arredol. (adv.) Alrededor. Arreo. A l'arreo. (adv.) De forma seguida, a continuación, sin parar. Arringlerar. (v.) Alinear. Artica. (s. f.) Terreno de cultivo que antes no lo era. Arto. (s. m.) Espino. Asabelo. (adv.) Mucho. Ascape. (adv.) Enseguida. Asina. (adv.) De esta forma, así. Aspro. (adj.) Aspero. Astral. (s. f.) Hacha. Atabalar. (v.) Enloquecer a uno, hacer que uno se vuelva loco. Atroncar. (v.) Podar. Aturar. (v.) Parar. Azaite. (s. m.) Aceite. Azarbe. (s. m.) Acequia. Azierro. (s. m.) Trozo de campo que no se ha trabajado, que están sin hacer. B. Badil. (s. m.) Recogedor. Bailotiar. (v.) Bailar de cualquier manera. Bal. (s. f.) Valle. Bandiador. (s. m.) Columpio. Bandiar. (v.) Voltear, hacer oscilar. Bantar. (v.) Levantar. Barandau. (s. m.) Pasamanos. Bariasco.(s. m.) Barilla. (s. f.) Mandíbula. Barrancada.(s. f.) Riada. Barrenau. (adj.) Loco. Barrete. (s. m.) Barro blando. Bazieta. (s. f.) Comedero de animales. Bazión. (s. m.) Gran recipiente donde se hacía la matanza del tocino. Belar. (v.) Balar. Bemba. (s. f.) Campo o terreno junto al pueblo. Bendema. (s. f.) Vendimia. Bendemar. (v.) Vendimiar. Bentanón. (s. m.) Ventanuco. Bente. (num.) Veinte. Berraco. (s. m.) Oveja vieja. Bezinal. A bezinal. (adv.) Birulé. A lo birulé. (adv.) Bizco. (s. m.) Planta que desprende una sustnacia muy pegajosa. Blanco. (s. m.) Tocino del jamón. Blanquiar. (v.) Encalar. Bocau. (s. m.) Comida a deshoras. Bochornera. (s. f.) Mucho calor, sofoquina. Bofo. (adj.) Hueco, vacío, aplicado a frutos secos.
3 Boira. (s. f.) Niebla. Bolada. (s. f.) Golpe de aire, ráfaga de viento. Boque. (s. m.) Macho cabrío. Borfollo. (s. m.) Pellejo de la uva. Borrasquiar. (v.) Llover poco. Borrega. (s. f.) Persona bruta. Boteja. (s. f.) Recipiente para beber. Bozau. (adj.) Tapado, obstruido. Braguero. (s. f.) Ubre o teta de algunos mamíferos. Brazal. (s. m.) Ramal de una acequia. Bresca. (s. f.) Miel virgen. Brincar. (v.) Saltar. Brozas. (adj.) Descuidado, torpe. Bulcar. (v.) Volcar, derribar. Bulquete (s. m.) Remolque de tractor que es oscilante. Bullir. (v.) Hervir. Buro. (s. m.) Barro, arcilla. C. Cadillo. (s. m.) Cachorro. Cado. (s. m.) Madriguera. Cagalera. (s. f.) Diarrea. Cagaleta. (s. f.) Excremento pequeño y redondo. Cagallón. (s. m.) Mierda, excremento grande. Cagazas. (adj.) Miedoso. Cagoso. (adj.) Cagón, que tiene propensión a defecar o que lo mancha todo de excrementos. Cal. No cal que. No es necesario que, no hace falta que. (ha quedado fosilizado sólo en esta forma, el resto de formas verbales no se usan ya). Caldereta. Caler. (v.) Ser preciso. (vid. cal). Callizo. (s. m.) Callejón. Calorina. (s. f.) Calor excesiva y pegajosa. Calzero. (s. m.) Calzado. Campar. (v.) Ir por un sitio en total libertad. Canalera. (s. f.) Canalización de agua del tejado. Canso. (adj.) Cansado. Cantal. (s. m.) Piedra. Canto. (s. m.) Porción de algo, por ejemplo una pastilla de jabón, de trozo de bizcocho, cada parte de masa para hacer el pan. Caparra. (s. f.) Garrapata. Persona pesada e insistente. Capino. (adj.) Borracho. Capolar. (v.) Picar, triturar. Caramocano. (adj.) Semiborracho, contento por beber sin llegar estar en mal estado. Caramullo. Con caramullo. Cardelina. (s. f.) Jilguero. Carnuz. (s. m.) Animal muerto en descomposición Carnuzo. (s. m.) Animal muerto en descomposición Carrañar. (v.) Reñir, echar la bronca. Carrasca. (s. f.) Encina. Carrilano.(s. m.) Mendigo, transeunte. Carrucha. (s. f.) Polea. Cascabillo.(s. m.) Cascabel. Casera. (s. f.) Mujer del cura, asistente de hogar del cura. Cazinglo. (s. m.) Aro viejo y por extensión cualquier objeto inservible. Chabisque. (s. m.) Agua o barro sucio y pisoteado Chafardero. (adj.) Alcahuete. Chanada. (s. f.) Ocurrencia repentina y alocada. Chaparrazo. (s. m.) Chaparrudo. (adj.) Pequeño y regordete. Chapurquiar. (v.) Remojarse torpemente. Charada. (s. f.) Restos de las brasas. Charquera. (s. f.) Barrizal. Charradeta. (s. f.) Conversación. Charrador. (adj.) Conversador, muy hablador. Charraire. (adj.) Charlatán, muy hablador. Charrar. (v.) Hablar. Chelar. (v.) Helar. Chemecar. (v.) Gemir. Chilar. (v.) Chillar, gritar. Chilo. (s. m.) Grito, chillido. China-chana. (adv.) Despacio. Chinebro. (top. Puichinebro). (s. m.) Enebro. Chiquer. (s. m.) Niño, muchachito. Chiribí. (s. m.) Agua que cae. Chirla. Chirleta. (s. f.) Pajaro parecido a un gorrión pequeño. Chispo. (adj.) Borracho. Chocante. (adj.) Divertido, curioso, interesante. Chotiar. (v.) Retozar. Chuflaina.(s. f.) Silvato. Chuflar. (v.) Silvar. Chulla. (s. f.) Chuleta. Chumear. (v.) Gotear, rezumar lentamente. Chupida. (s. f.) Empapamiento. Chupir. (v.) Empapar.
4 Clabillar. (v.) Aguijonear, acribillar de picaduras. Clocada. (s. f.) Cabezada. Cobar. (v.) Incubar los huevos. Cobertor. (s. m.) Colcha. Cochamandero. (adj.) Entrometido. Coda. (s. f.) Rabo, cola. Codete. (s. m.) Cohete. Coflar-se. (v.) Sentarse de forma cómoda y tranquila. Cojer. (v.) Cojer. Caber algo en un sitio. Colgallo. (s. m.) Colgante, algo que cuelga. Colicas. A colicas. (adv.) Sobre los hombros. Collerón. (s. m.) Collar de las caballerías. Contar las biejas. (expr.) Vieja tradición popular que consiste en leerle la cartilla a uno. Continamente. (adv.) Continuamente. Continar. (v.) Continuar. Contino. De contino. (adv.) A continuación. Contrimuestra. Muestra, pequeña parte de algo para hacerse una idea de como es el resto. Coroneta. (s. f.) Zona del monte algo más elevada. Corraleta. (s. f.) Pocilga descubierta. Cortapichinas. (s. m.) Insecto negro que lleva unas tenazas en la parte trasera. Cosa. (adv.) Nada. Costera. (s. f.) Pendiente, cuesta. Cuacar. (v.) Gustar. Cuartal. (s. m.) Medida de capacidad. Cuasi. (adv.) Casi. Cucadeta. (s. f.) Siesta, sueño breve. Cucar-se. (v.) Agusanarse. Cuco. (v.) Bicho, insecto. Cuenta. (interj.) Viene a significar algo así como mira por donde. Cuerbetas. (s. f.) Tipo de cuervo o graja, de tamaño menor que las grallas. Cuezo. (s. m.) Cazo de cocina. Cunar. (v.) Mecer. Cutio. (adj.) Escondido, disimulado. D. Dalla. (s. f.) Guadaña. Dar ferrete. (v.) Dar un uso fuerte, dar caña a algo, y en sentido figurado dar la lato o molestar. Dar dogal. (v.) Molestar, estar pesado, dar la lata. De baldes. (adv.) Gratuitamente, sin pagar. De cara a. (adv.) Hacia. De mañanas. (adv.) Por la mañana. Desbezar. (v.) Separar a las crías de la madre. Desbezo. (s. m.) Acto por el cual se separan a las crías de la madre y así dejan de mamar. Desembolicar. (v.) Desenvolver. Desgana. (s. f.) Desmayo. Día. A l'otrol día. (adv.) Al día siguiente. Dispués. (adv.) Después. Dogal. Dar dogal. (v.) Molestar, estar pesado, dar la lata. Dondiar. (v.) Vagar, ir de un lado a otro. Dondin-dondiando. (adv.) Hacer algo dando muchas vueltas o rodeo. Dorondón.(s. m.) Niebla helada. Drecho. (adj.) Derecho. Al drecho. (adv.) Enfrente, por en medio de. E. Embasador. (s. m.) Embudo. Embolicar. (v.) Envolver. Embozar. (v.) Tapar, obstruir. Empentar. (v.) Empujar. Empentón. (s. m.) Empujón. Empifar-se. (v.) Emborracharse. Emporcar. (v.) Ensuciar. Enchegar. (v.) Poner en marcha, encender un aparato. Encolicas. A encolicas. (adv.) Forma de llevar sobre los hombros a otra persona. Endrezar. (v.) Poner recto o hacia un sitio. Enflascar-se. (v) Empantanarse en un sitio. Engañapastores. (s. m.) Tipo de pájaro. Enronar. (v.) Cubrir o tapar algo con tierra o cascote, enterrar, cubrir. Enruena. (s. f.) Escombros. Ensundia. (s. f.) Grasa interior de los animales. Entiparrar-se. (v.) Quedarse muy lleno de comida. Entuesta. (s. f.) Tabique o pared rota, y apaño o arreglo que se hace para repararla. Enzendallo. (s. m.) Ramas o leña menuda para iniciar el fuego. Esbafar-se. (v.) Evaporarse la sustancia de un líquido, perder el gas un líquido. Esbalizaculos. (s. m.) Tobogán. Esbalizar. (v.) Resvalar, deslizar. Esbarrar. (v.) Desviar. Esbarre. (s. m.) Desvío. Esbarrincar. (v.) Esbotar. (v.) Salir a presión un líquido. Escampar. (v.) Despejarse el cielo. Escarramanchas. A escarramanchas.
5 Escobar. (v.) Barrer. Escobizo. (s. m.) Escodar. (v.) Desrabotar, quitar el rabo. Escomenzipiar. (v.) Empezar. Escoscar. (v.) Limpiar. Escoscau. (adj.) Limpio. Escuchetes. A escuchetas. (adv.) En voz baja, al oido, forma de decir las cosas para que sólo las oiga quien está muy cerca de quien habla. Escurrimiento. (s. m.) Idea que uno tiene en un momento de inspiración. Escurrir. (v.) Discurrir, tener ideas repentinas. Esfilorchar. (v.) Deshilachar. Esfullinar. (v.) Deshollinar. Eslanguido. (adj.) Hueco, vacío. Eslejir. (v.) Seleccionar, elegir. Eslizar. (v.) Deslizar, resbalar. Esmaliziau. (adj.) Persona que tiene muchos vicios y malas aficiones. Esmerar. (v.) Supurar. Espantallo. (s. m.) Espantapájaros. Persona mal vestida y descuidada en el aspecto. Esparbel. (s. m.) Cierta ave rapaz, quizas el milano o el gavilán. Espazenziar. (v.) Hacer perder la paciencia. Espedo. (s. m.) Pincho de hierro, empleado para asar a la brasa. Espinochar. (v.) Limpiar las mazorcas. Esportillar. (v.) Desconchar. Esquerola. (s. f.) Escarola. Esquilla. (s. f.) Cencerro. Esquinazo. (s. m.) Columna vertebral. Estadizo. (adj.) Pasado, textura que adquiere un alimento cuando ha estado varios días pero no ha llegado a estropearse, se puede comer pero tiene un sabor y una textura de varios días. Estajo. (s. m.) Estalentau. (adj.) Persona de poco juicio. Estilla. (s. f.) Astilla. Estozolar-se. (v.) Romperse la cabeza, caerse dandose en la cabeza un golpe. Estraleta. (s. f.) Hacha. Estrapaluzio. (s. m.) Alboroto, mucho ruido y escándalo. Estraudes. (s. f.) Protector de fuegos y calores, soporte para cazuelas. Faina. (s. f.) Faena, ocupación. Fajuelo. (s. m.) Rama de sarmiento. Falca. (s. f.) Cuña. Falcón. (s. m.) Halcón, ave rapaz. Falsa. (s. f.) Buhardilla, planta más alta de la casa que está justo debajo del tejado. Fanega. (s. f.) Medida de capacidad de grano. Fardacho. (s. m.) Lagarto. Farfallar. (v.) Hablar de forma poco clara que no se entiende lo que dice. Farfalloso. (adj.) Dícese del que habla con poca claridad, que pronuncia mal. Farinetas. (s. f.) Gachas. Farinoso. (s. m.) Dulce hecho a base de harina, azucar y canela, propio de Alcubierre y otros pueblos de la comarca. Farnaca. (s. f.) Cría de la liebre. Fartalla. (s. f.) Comilona. Farto. (adj.) Harto de comida. Fateza. (s. f.) Tontería, bobada. Fato. (adj.) Tonto, bobo. Femera. (s. f.) Estercolero, lugar con mucho estiércol. Fenzejo. (s. m.) Cuerda de esparto. Ferrete. Dar ferrete. (v.) Dar caña, molestar con insistencia. Fiemo. (s. m.) Estiércol. Fiero. (adj.) Feo. Fiestas. (s. f.) Caricias, carantoñas. (se usa en plural). Fiestetas. (s. f.) Caricias, carantoñas. (se usa en plural). Filada. (s. f.) Sucesión de campos a distinta altura. Fizeta. (s. f.) Fizón. (s. m.) Florada. (s. f.) Floración, la mejor época de personas, animales y plantas. Fogaril. (s. m.) Hogar. Fosco.(adj.) Nublado, oscuro. Fozín. (adj.) Sucio y descuidado. Fritada. (s. f.) Pisto. Fuina. (s. f.) Garduña, marta, roedor grande que corre mucho. Como una fuina. Deprisa, como un rayo. Fulero. (adj.) Falso, poco fiable. Fumera. (s. f.) Humareda, mucho humo. Furo. (adj.) Agresivo, bravo. G. Garganchón. (s. m.) Garganta. Garra. (s. f.) Pierna. Garrampazo. (s. m) Calambre, sacudida de corriente eléctrica. Garraspa. (s. f.) Raspa, la parte leñosa del racimo una vez quitadas las uvas. Garriar.(v.) Mover las piernas.
6 Garrón. (s. m) Hueso del jamón. Gayata. (s. f.) Bastón. Gobernuda. (adj.) Mujer marimandona, que da muchas órdenes y lo organiza todo. Gralla. (s. f.) Grajo. Gramar. (v.) Mugir. Gramen. (s. m) Hierba mala que sale en los campos, sobre todo en la viña. Gramido. (s. m.) Mugido. Gripia. (s. f.) Culebra venenosa. Grumo. (s. m) Tipo de col. Guaraniar. (v.) Lloriquear. Güebra. (s. f.) Campo labrado. Güega. (s. f.) Límite, frontera entre campos o términos. Güesque. (interj.) Voz para hacer girar las caballerías hacia la izquierda. Guipar. (v.) Divisar, distinguir, darse cuenta de algo que está poco visible. Guito. (v.) Chulo, rebelde, agresivo, que se revuelve contra los demás. Güitres. (s. m) Buitres. Gurrión. (s. m) Gorrión. I. Inte. (s. m) Instante. Inte. A l'inte.en el inte. Al momento, al instante. Intinzión. (s. f.) Intención. Ir aforrau. (expr.) Ir sin ropa, o con poca ropa, ir en magas de camisa. J. Jada. (s. f.) Azada. Jarmentar. (v.) Recoger sarmientos. Jauto. (adj.) Soso. Jeta. (s. f.) Grifo de la cuba. Jolico. (s. m.) Azada pequeña. Jopar. (v.) Irse, marcharse. Joriar. (v.) Airear, ventilar un espacio. L. Laminaculos. (adj.) Adulador. Laminar. (v.) Lamer con la lengua. Laminero. (adj.) Goloso. Lera. (s. f.) Pedregal. Libiano. (s. m) Pulmón. Lifara. (s. f.) Comilona, merienda con mucha comida. Luenga. (s. f.) Lengua. Luziar. (v.) Arreglar aperos de hierro afilando y añadiendo más punta. M. Machorra. (adj.) Estéril, hembra que no cría. Malafolla. (adj.) Malintencionado. Malamén. (adv.) De malas formas, malamente. Malfalchau. (adj.) Mal vestido, desidioso en el vestir y arreglarse. Malín-maliando. (adv.) Padecer una enfermedad sin recuperarse del todo, ir renqueando, ir tirando sin curarse, arrastrando la dolencia o la enfermedad. Mallacán. (s. m) Suelo malo para cultivo por tener poca profundidad de tierra buena. Mallo. (s. m) Mazo. Malmeter. (v.) Estropear. Mantornar. (v.) Arar por segunda vez un campo. Mantudo. (adj.) Malucho, enfermizo. Manzanera. (s. f.) Manzano. Maraño. (s. m) Mardano. (s. m) Semantal ovino. Marguin. (s. m) Márgen. Marguinazo. (s. m) Límite de un campo. Masada. (s. f.) El conjunto de toda la masa. Masar. (v.) Amasar. Mascarar. (v.) Tiznar. Mascarau. (adj.) Tiznado. Mascarón. (s. m) Tizne. Matacabras. (s. m) Lluvia fina. Matachín. (s. m) Matarife. Matazía. (s. f.) Matanza del cerdo. Matután. (adj.) Inútil, torpe. Medianil. (s. m) Tapia o pared común. Mego. (adj.) Soso, callado. Melico. (s. m) Ombligo. Menester. (s. m.) Lo necesario, lo que hace falta. Mengrana. (s. f.) Granada. Mengranera. (s. f.) Granado. Mesache. (s. m) Chico, muchacho, hombre joven. Meter. A tó(t) meter. (adv.) A toda velocidad. Miaja. (adv.) Nada. Michino. (s. m) Gato y voz de llamarlo. Mielsa. (s. f.) Bazo. Mielsudo. (adj.) Tranquilón, ganso. Minchar. (v.) Comer. Mincharra. (s. f.) Rata de monte de morro alargado y cola larga.
7 Miquitero. (adj.) Raro o especial al comer o hacer las cosas, muy delicado. Mirar-se. (v.) Mirar. Mirar. (v.) Buscar. Misto. (s. m) Cerilla, fósforo. Modorra. (s. f.) Pesadez somnolienta. Moña. (s. f.) Muñeca. Moñaco. (s. m) Muñeco. Mormotiar. (v.) Murmurar en voz baja. Mosen. (s. m) Cura. Mosquera. (s. f.) Sobra de los árboles. Mueso. (s. m.) Bocado. Murria. (s. f.) Somnolencia. N. Narigotiar. (v.) Entrometerse, curiosear. Ni un sacre. (adv.) Nada de nada. Nietro. (s. m) Medida de capacidad de líquidos que alcanzaría los 150 litros aproximadamente. Niquitoso. (adj.) Maniático en los pequeños detalles, un poco asqueroso con ciertas cosas. Noguera. (s. f.) Nogal. Nublo. (adj.) Nublado. Ñ. Ñudo. (s. m) O. Ola. (interj.) No tiene traducción se usa como refuerzo de frases, a veces tiene un matiz de sorpresa o simplemente admiración. Muchas veces se usa para enlazar una frasecon otra. Olibera. (s. f.) Olivo. Onde. (adv.) Donde. Orache. (s. m) Tiempo atmosférico. Ordio. (s. m) Cebada. Ormo. (s. m) Olmo. Ospe. (interj.) Expresa asombro. Osqueta. (s. f.) Otrol. A l'otrol día. (expr.) Al día siguiente. P. Paca. (s. f.) Bala, sobre todo de paja o hierba. Paco. (s. m) Zona donde no da casi el sol. Paizer. (v.) Parecer. Pancha. (s. f.) Barriga. Panchudo. (adj.) Barrigón, panzudo. Paniquesa. (s. f.) Comadreja. Panizal. (s. m) Campo de maíz. Panizo. (s. m) Maíz. Pansar-se. (v.) Secarse perdiendo humedad o agua. Parar cuenta. (v.) Darse cuenta de algo. Parejo. (adj.) Desordenado, revuelto. Pasa. (s. f.) Epidemia. Pasallá. (interj.) Voz para la caballerías. Pastura. (s. f.) Comida del ganado. Patalero. (adj.) De par en par, abierto del todo. Patera. (s. f.) Enfermedad del ganado. Pedregada. (s. f.) Granizada. Pedreña. (s. f.) Pedernal. Pedricadera. (s. f.) Púlpito de la iglesia. Pedricar. (v.) Sermonar. Peducos. (s. m.) Calcetines gordos de lana. Pegau. (s. m.) Pegote, plastón. Pella. (s. f.) Col. Penca. (s. f.) Acelga, especialmente su tallo. Pendiz. (s. m.) Apendice. Perdigacho. (s. m.) Cría de perdiz. Perdigana. (s. f.) Perdiz joven sin ser adulta. Perera. (s. f.) Peral. Pernil. (s. m) Jamón. Pescatero. (s. m) Vendedor de pescado. Petenar. (v.) Ir deprisa. Picaraza.(s. f.) Urraca. Pifo. (adj.) Borracho. Piforro. (adj.) Borracho. Pijaito. (s. m.) Señorito. Pinchán. (s. m.) Pájaro pequeño. Pincho. (adj.) Elegante. Pinocha. (s. f.) Mazorca. Pintes. (s. m.) Pinturas, lápices escolares. Pipirigallo. (s. m.) Esparceta. Pitañar. (s. m.) Trozo pequeño de tierra. Pizca. (s. f.) Trozo de carne. (anécdota de "La Pizca d'alcubierre"). Pizca. La pizca d'alcubierre. Pizcar. (v.) Pellizcar. Pizco. (s. m.) Pellizco. Plantar fuerte. (v.) Presentar buena presencia, estar fuerte y con salud. Plazeta. (s. f.) Replaza, plazuela pequeña. Pocha. (s. f.) Bolsillo. Pochón. (s. m) Bolsillo colgante interno. Pollo mantudo. (s. m) Pollo enfermizo.
8 Poquer a poquer. (adv.) Lentamente, poco a poco. Por demás. (adv.) En vano, sin resultado. Por tierra. (adv.) Por el suelo, caido. Porgadero. (s. m) Criba. Porgar. (v.) Cribar. Pozal. (s. m) Cubo. Preto. (adj.) Tacaño. Prezisar. (v.) Necesitar. Puerco. (adj.) Sucio. Pulsos. (s. m) Sienes de la cabeza. Puncha. (v.) Punta, algo que es punzante. Punchar. (v.) Punzar, pinchar. Puncho. (s. m) Pincho, espina. Puntal. (s. m) Soporte. Purnas. (s. f.) Chispas. Puro. A puro de. (adv.) A fuerza de. Q. Quemisió. (interj.) Yo que se. Quera. (s. f.) Carcoma. Querar-se. (v.) Carcomerse. Querau. (adj.) Carcomido. Quinquilaire. (s. m) Vendedor ambulante. R. Rabosa. (s. f.) Zorra. Rabosiar. (v.) Enredar. Raboso. (v.) Zorro. Rader. (v.) Roer. Rafe. (s. m.) Alero de un tejado. Rai. (expr.) Da igual, no importa. Rallar. (s. m.) Barranco seco. Ramal. (s. m) Cuerda, rienda. Ran. A ran. (adv.) Casi tocando. Rancar. (v.) Arrancar. Rastrera. (s. f.) Rastro de algo. Rayón. (s. m) Jabalí pequeño. Reblar. (v.) Ceder ante algo. Rebulizio. (s. m) Ruido grande. Rebullar. (v.) Amontonar de forma desordenada. Recau. (s. m.) Potaje. Rechitar. (v.) Volver a brotar. Rechito. (s. m) Brote tierno. Rechumar. (v.) Filtrarse gota a gota. Recular. (v.) Retroceder. Reditir. (v.) Derretir. Redol. (s. m) Alrededor. Redolada. (s. f.) Comarca, pueblos cercanos entre sí y con relaciones habituales. Redor. (s. m.) Alrededores. Refitolero. (adj.) Cotilla, entrometido. Regle. (s. m.) Regla de madera del carpintero. Reglotar. (v.) Eructar. Reglote. (s. m) Eructo. Regüeltas. (s. f.) Curvas. Remoldar. (v.) Podar árboles. Remugar. (v.) Rumiar. Replegar. (v.) Recoger. Repretar. (v.) Apretar, comprimir. Repretar-se. (v.) Tener estreñimiento. Repreto. (s. m.) Estreñimiento. Ir de repreto. Estar estreñido. Restojo. (s. m.) Rastrojo. Restojar. (v.) Limpiar de rastrojos un campo o terreno. Retabillar. (v.) Recoger con rastrillo. Retabillo. (s. m) Rastrillo de madera. Ringlera. (s. f.) Fila, hilera. Ripa. (s. f.) Montón, monticulo, también referido a un montón de cosas. Ripada. Una ripada. (adv.) Mucho, gran cantidad de algo. Rollar.(v.) Chafar o aplastar con un rodillo. Romanzero. (adj.) Protestón, refunfuñón. Roñar. (v.) Quejarse. Rosada. (s. f.) Rocío. Rosera. (v.) Rosal. Rosigar. (v.) Roer. Rosigón. (s. m) Trozo de algo mordido. Royo. (adj.) Rojo, colorado. Ruello. (s. m.) Rodillo. Rufo. (adj.) Tieso, altanero. Rujiar. (v.) Mojar rociando. Rujiazo. (s. m.) Salpicadura. Tormenta de poca agua. Rusiente. (adj.) Incandescente, al rojo vivo. Rusio. (adj.) Rojo incandescente. Rustir. (v.) Tostar al fuego o al calor del horno. S. Sacre. Ni un sacre. (adv.) Nada de nada. Salagón.(s. m.) Roca arcillosa en estratos. Sanselo. (adj.) Soso, aplicado a gente. Sarrio. (s. m) Rebeco. Saso. (s. m) Tipo de campo. Segallo. (s. m) Cabrito joven.
9 Sentaduras. (s. m) Ampollas, sobre todo en los pies. Sentir. (v.) Oír. Simio. (adj.) Delgado. Siñalín. (s. m) Poca cantidad. Sisallo. (s. m) Mierda, excremento, desperdicio. Socarrar. (v.) Quemar en exceso por fuera. Socarrau. (adj.) Quemado en exceso y por fuera Solanar. (s. m.) Lugar soleado, zona donde suele dar el sol. Solera. (s. f.) Base o suelo de algo, parte firme de algo. Sopas escudriñadas. (s. f.) Plato típico de Alcubierre. Sucarrar. (v.) Quemar en exceso por fuera. Suflamar-se. (v.) Quemarse. Sulsir-se. (v.) Quemarse y quedarse seco y sin jugo. Sulsiu. (adj.) Seco y sin jugo. Sumanzio. (adj.) Seco y sin sustancia. T. Tajadera. (s. f.) Trampilla de las acequias. Tajador. (s. m) Sacapuntas, afilador de lápices. Talcual. (adj.) Regular, mediocre. Talladera. * Tallar. * Tamién. (adv.) También. Tano. (s. m) Nudo de la madera. Tape. (s. m.) Tapadera, tapón. Tarnasco. (s. m) Ternasco. Tarquín. (s. m) Suciedad en el suelo. Tartir. (v.) No hablar, chistar. Tasamente. (adv.) Escasamente, apenas. Tastarriar. (v.) Enredar. Telo. (s. m.) Capa fina que sale en algunos sitios o que los envuelve, tb. se aplica a las legañas. Templau. (adj.) Agil, rápido. Tentón. Al tentón. (adv.) A tientas. Terrau. (s. m.) Terraza. Tetar. (v.) Mamar. Tieda. (s. f.) Tea, madera resinosa que arde bien. Tapacón. (s. m.) Tipo de barro Tina. (s. f.) Tonel. Tintar. (v.) Teñir. Titas. (s. f.) Gallinas, y voz para llamarlas. Tito. (s. m.) Pollo. Tizón. (s. m) Madera quemada. Toballa. (s. f.) Toalla. Tocho. (s. m) Palo. Tollo. (s. m) Montaña pequeña. Toquiñar. (v.) Toquitear, manosear. Torcazo. (s. m) Paloma torcaz. Torda. (s. f.) Mirlo. Tordo. (s. m) Estornino. Torroquera. (s. f.) Tierra o zona endurecida. Tortetas. (s. f.) Alimento de la matanza del cerdo hecho con sangre, harina y especias. Torzedor. (s. m) Aparato para las caballerías. Torzón. (s. m) Dolor intenso en la tripa. Toza. (s. f.) Tronco que queda en tierra al cortar, tocón del árbol. Tozar. (v.) Topar, golpear con la cabeza. Tozolón. (s. m) Golpe en la cabeza. Tozoludo. (adj.) Terco. Tozuelo. (s. m) Cabeza. Trabesero. (adj.) Atravesado, cruzado. Trafucar. (v.) Confundir. Trallo. (s. m) Tronco cortado. Tranca. (s. f.) 1.- Palo de madera. 2.- Borrachera. Trancar. (v.) Cerrar. Trancau. (adj.) Cerrado. Trapaza. (s. f.) Engaño, mentira o ardid de oscuras intenciones. Trapazero. (adj.) Engañador. Traste. (s. m) Cacharro o utensilio viejo. Trazas. (s. f.) Formas, maneras. Tremular. (v.) Temblar, tiritar. Trena. (s. f.) Trenza. Trenta. (num.) Treinta. Trestajar. (v.) Dividir, separar, compartimentar. Trestaje. (s. m.) Compartimento, separación, división. Triar. (v.) Seleccionar, separar de un grupo lo que interesa más o menos. Tripera. (s. f.) Barriga. Trocola. (s. f.) Tipo de polea. Tronada. (s. f.) Tormenta. Tronzador. (s. m) Sierra. Tronzar. (v.) Serrar, partir. Trucador. (s. m) Llamador de puerta. Trucar. (v.) Llamar a la puerta golpeando. Trujal. (s. m.) Lagar del vino. Trunfo. (s. m.) Triunfo. Tufa. (s. f.) Flequillo, pelo que cae sobre la frente. Turrar. (v.) Tostar. Turrau. (adj.) Tostado.
10 Y. Yerba. (s. f.) Hierba. Yerbana. (s. f.) Mala hierba de los campos. Z. Zaborrazo. (s. m) Pedrada. Zaborrero. (adj.) Chapucero. Zaborro. (s. m) Piedra. Zaforas. (adj.) Basto, descuidado. Zaforoso. (adj.) Desarreglado, sucio. Zamueca. (s. f.) Animal imaginario que se lo hacía cazar a los incautos. Zancarrón. (s. m) Hueso del jamón. Zangarriana. (s. f.) Lagartija. Zapo. (s. m.) Sapo. Zapotiar. (v.) Chapotear. Zeñar. (v.) Hacer gestos con la mano. Zerras. (s. f.) Melenas. Zerringallo. (s. m.) Cosa vieja inservible, petoste anticuado. Zerrudo. (adj) Peludo, que tiene mucho pelo. Zierzera. (s. f.) Mucho viento Zincha. (s. f.) Apero de la caballería. Ziquilín. (s. m) Un ave rapaz sin determinar. Zolleta. (s. f.) Pocilga del cerdo. Zorrera. (s. f.) Borrachera. Zorriar. (v.) Beber, echarse unos tragos. Zueca. (s. f.) Trozo de leña.

miércoles, 4 de abril de 2018

Raza catalana, vasca

Albert Moliner, Giners, los orígenes de la raza catalana, como la vasca, son anteriores al peninsular ibérico. Hay numerosos estudios que así lo atestiguan.

Albert Moliner , Giners, los orígenes de la raza catalana, como la vasca, son anteriores al peninsular ibérico. Hay numerosos estudios que así lo atestiguan.

Pues para ser de otra raza tiene usted toda la cara de mi primo el que vive en Lebrija





gallinas, pollitos, razas, catalana, castellana, vasca

https://es.m.wikipedia.org/wiki/Raza_catalana
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Nacionalismo_vasco
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Pompeyo_Gener

Caricatura de la revista satírica La Flaca del 3 de marzo de 1873
Caricatura de la revista satírica La Flaca del 3 de marzo de 1873 
Valentín Almirall , Pi y Margall, Diari Català, catalanismo político, nacionalistas catalanes, 

Arturo Quintana y Font
Arturo Quintana y Font, espécimen de pura raza catalana, nacido en Barchinona, ya nació con la barretina puesta a rosca


No solamente la naturaleza, sino hasta la historia nos dice que España está formada por dos grupos completamente distintos. El grupo Central y Mediodía, compuesto de razas imaginativas, aventureras, impresionables y volubles, ha tenido sus días de gloria, como lo tienen todas las razas; pero su gloria ha sido tan efímera, que sólo ha durado lo que dura una excitación nerviosa. El grupo del Norte, en cambio, el grupo que podríamos llamar pirenaico, nunca se distinguió por su imaginación ardiente ni por sus golpes de efecto, pero ha sido siempre más meditativo, más sólido y más trascendental en sus proyectos.

[...] España se ha ido empequeñeciendo desde que las circunstancias hicieron que la raza menos pensadora y menos ilustrada de la Península fuera la que dominara. [...] iremos de mal en peor hasta tanto que por un medio o por otro logremos —los catalanes hablan— que el grupo pirenaico de España, tenga en la cosa pública tanta influencia, por lo menos, como el grupo central o del Mediodía. [...] cre[o] firmemente que, el elemento de población que hoy representa Cataluña, es el único que puede cambiar la marcha desastrosa de la política española.
Almirall (1879), «Los Ministres catalans» Los, no els, LO, no el

VALENTÍN ALMIRALL
LO catalanisme, 1886, Almirall
LO catalanisme , 1886
https://es.m.wikipedia.org/w/index.php?title=Archivo:Lo_catalanisme_(1886).djvu&page=9 se puede leer online


España tal como es, Almirall


España tal como es



En 1886 publicó L'Espagne telle qu'elle est en Montpellier, reeditada en castellano en Barcelona en 1886 bajo el título, España tal como es, en el que desarrolla su pensamiento: ambos grupos raciales, el central-meridional y el pirenaico, estarían en decadencia, pero conservarían cualidades diferentes; de los centrales quedaría «el espíritu de absorción, de reglamentación, de dominio», del pirenaico, «la rudeza, los apetitos terrenales, el egoísmo celoso. Y es que los catalanes y los vascos son los trabajadores de España.»​ Ese mismo año, 1886, Almirall publicaría su principal texto doctrinal, Lo Catalanisme, en el que caracteriza a la raza castellana como un Don Quijote, «es [d]el tipo generalizador sin base de observaciones propias ni recogidas por el estudio. Cree que todo puede reducirse a una fórmula simple e indiscutible. Con divagación bien vestida pretende resolver el más intrincado problema, y trata a continuación de imponer la solución a los demás»; la «agrupación nor-oriental», en el que se incluye el «tipo» catalán, sería «el reverso de la medalla». Cataluña se habría degenerado y desnaturalizado, es decir, castellanizado, tras su unión con Castilla: los vicios y defectos catalanes habrían venido desde Castilla y podrían solventarse tras la reivindicación particularista.
A pesar de su tono racista, Almirall no es «biologicista», sino «culturalista», es decir, habla de la cultura y las costumbres, el espacio físico y geográfico, no de las características intrínsecas e invariables heredadas. 

Otros autores catalanes, como Prat de la Riba o Rovira i Virgili también emplearon el término «raza» desde un punto de vista cultural, siempre para señalar las diferencias y la oposición entre pueblos.




En 1887, Pompeyo Gener publicó Heregias. Estudios de crítica inductiva sobre asuntos españoles (Fernando Fé, Madrid). 


Heregias: Estudios De Crítica Inductiva Sobre Asuntos Españoles


En Heregias, Gener, que en esa época todavía no había descubierto el catalanismo y todavía empleaba la «raza» en un sentido histórico, «raza histórica», aplica las doctrinas raciales a España y entronca con el concepto de «nacionalidad».​ 


Consideraba la existencia de una «raza catalana» distinta y superior, «cada catalán tiene un rey en el cuerpo», que habría dado a su literatura la energía, el vigor y la dureza características. Al contrario que la «raza castellana», en la que la «falta de oxígeno y de presión atmosférica; la mala alimentación» y las conocidas influencias semíticas y presemíticas («los andaluces»), determinarían una lengua impropia para la gran literatura.​ Por eso Eduardo Mendoza, catalán, escribe en castellano excepto restauració. Dichas supuestas características genéticas, bereberes y semíticas, del centro de la península configurarían para Gener, según recoge Martínez Hoyos, otras cualidades como la «morosidad», el «desprecio del tiempo», la «mala administración» o el «caciquismo».
Quim Torra
Quim Torra, el Himmler catalán a las órdenes del Führer Puigdemont
ganivetades suïsses

Muriel Casals, revolució somriures

bohemi cabaret món

periodisme, permetin

Honorables, cartes a la pàtria perduda

Está la carta de Tarradellas de La Vanguardia, 1981 ? 

els últims cent metres , cap a la garjola

la porta de la gàbia, Quim Torra cap a la gàbia, garjola, trena, presó

viatge involuntari a la Catalunya impossible

Carles Castro, poder catalán laberinto

¿Cómo llega Cataluña a la presidencia de Quim Torra?

Las elecciones son algo más que el mecanismo democrático para determinar quién gobierna un territorio. En realidad sirven para mucho más. Por ejemplo, explican cómo se construyen o destruyen los países. No en vano, los desenlaces electorales son también una expresión de la voluntad múltiple de una sociedad y de su fisonomía ideológica e identitaria. Así como de sus inquietudes, pulsiones y derivas.

'El poder catalán en su laberinto', escrito por Carles Castro Sanz, es, por tanto, un viaje a lo largo del tiempo. Un viaje a través de las elecciones catalanas, entendidas como un espejo de la psicología de este pequeño y complejo territorio. Y es también una búsqueda del alma más genuina de la Cataluña actual y de las razones profundas que explican la destrucción como un solo pueblo.

Se trata de entender cómo los catalanes decidieron abandonar su particular oasis para emprender una travesía por el desierto, como los monegros o Teruel, la más sutil forma de laberinto, hacia un destino incierto.

El racialismo fue traído desde París por Pompeyo Gener, Pompeu como Fabra, influenciado por Jules Soury y la Société d'Anthropologie de Paul Broca.​ Hacia 1900, Gener habría completado un giro hacia el catalanismo y en su reedición de Heregias fue ampliada con la «cuestión catalana»: sería simplemente un litigio entre razas. 

Para salvar a la raza catalana de su declive, habría que reforzar los elementos primigenios arios, celtas, latinos o incluso vascos, y purificarla de elementos castellanos, es decir, elementos semíticos y presemíticos.​ 


La inferioridad de la raza castellana provendría de los «elementos étnicos», pero también de «el excesivo calor y el extremo frío e [sic] las alturas yermas, los terremotos de ciertas comarcas, como el de Tembleque, y sobre todo la sequedad del suelo.»​ «La atmósfera de Madrid es pobre en helio y argón» y en sus aguas faltan el «krypton, el neón y el xenon», por lo que debería dejar de ser la capital de España.​ En definitiva, «conocemos [los catalanes] que somos Arios europeos y que como hombres valemos más en el camino del Superhombre.»​ En su pensamiento,
Así, conviene á los centrales el socialismo nivelador, la democracia unitaria, que prepara la raza de proletarios habladores y pobres de voluntad, hábiles, pero que tienen la necesidad de quien les dirija y les mande, de jefes, de amo, / los borregos de Puigdemont no/ de una ú otra forma; en una palabra, una raza de esclavos en el sentido más profundo de la frase. Y, en cambio en Cataluña y sintetizada ésta por los Supernacionales, la tendencia es diametralmente opuesta. El ciudadano tiende á robustecer su yo. El obrero es ácrata. En nuestra raza abundan los individuos diferenciados; los de excepción, y el hombre es cada día más fuerte, más vital y más rico de dinero, y de inteligencia que es más, cual nunca lo haya sido hasta el presente, gracias á la falta de prejuicios nacionales, gracias á su comunicación con todo lo notable de las demás naciones, gracias á la enorme multiplicidad de pensamiento y de práctica, de arte e industria.
Pompeyo Gener, Herejías, op. cit. Caja (2009), p.112
Goebbels era un aficionado al lado de esta gente y Juaquín Torra
Goebbels era un aficionado al lado de esta gente y Juaquín Torra

Quizás el más conocido de entre los racistas catalanes haya sido Bartomeu Robert, el llamado «Doctor Robert», un importante médico y político catalanista de Barcelona. La fama de Robert, inmerecida según Francisco Caja, le llegó por una conferencia que impartió en el Ateneo de Barcelona el 14 de marzo 1899 con el título «La raza catalana», que interrumpió «debido a lo avanzado de la hora» y que no retomó «para no dar lugar a malas interpretaciones por parte de la prensa madrileña». Las ideas sobre la configuración craneana en la Península que Robert presentó en la conferencia parece que fueron manipuladas por el diputado Romero Robledo para atacar al gobierno de Silvela y dieron una idea equivocada de lo que había sido la conferencia. En consecuencia, autores de la talla de Menéndez Pidal o Ernest Lluch lo consideraban como el representante más extremo del racismo catalán basado en la craneometría.
En 1907 el catalán Francisco Jaume, autor de El separatismo en Cataluña, comentaba:
Los separatistas catalanes han empezado por ejercer de verdaderos demagogos, adulando la vanidad de los catalanes. No han cesado de insistir en la pretendida inferioridad de los castellanos. Que formamos dos razas distintas y aun opuestas: entre las cuales ellos, los castellanos, eran los inferiores y nosotros los catalanes, los superiores. Que por efecto de esta inferioridad era inútil esperar que los castellanos pudiesen seguir nunca el impulso que nosotros , los catalanes, hemos dado al progreso de nuestra patria común; y que en consecuencia nosotros teníamos que perder siempre, habíamos de ser necesariamente las víctimas en este consorcio de ambos pueblos, y por ende que la separación pura y simple era lo que procedía. Que nada les debíamos, que nunca los castellanos han hecho por nosotros, los catalanes, más que explotarnos
Francisco Jaume, op. cit. Barraycoa (2011), pág. 210
Otros autores que se pueden incluir dentro de esta corriente racista están Eugenio d'OrsBartomeu RobertJosé Pella y ForgasDomingo Martí i JuliàBonaventura RieraJoan BardinaDomènec Martí i Julià o Pere Màrtir Rossell i Vilar. La raça.



Portada del semanario L'Esquella de la Torratxa en la que las demás regiones de España son representadas como cerdos comiendo de Cataluña.
Portada del semanario L'Esquella de la Torratxa en la que las demás regiones de España son representadas como cerdos comiendo de Cataluña.  
Caricatura de la revista Don Quijote en la que se satiriza la obsesión por las formas craneanas de los racistas catalanistas.
Caricatura de la revista Don Quijote en la que se satiriza la obsesión por las formas craneanas de los racistas catalanistas.  
Caricatura de la revista Don Quijote en la que se satiriza las posiciones políticas de Roberts, Torres y Rusiñol. Véase la forma del cráneo, satirizando el «cráneo catalán».
Caricatura de la revista Don Quijote en la que se satiriza las posiciones políticas de Roberts, TorresRusiñol. Véase la forma del cráneo, satirizando el «cráneo catalán». 
Durante la década de 1930 algunas corrientes del nacionalismo y del independentismo catalán se habían acercado al fascismo italiano y al nazismo alemán, que por su parte los veía de forma ambivalente. Así, ya en 1932, el dirigente del Partido Nazi, Dr. Karl Cerff, durante su visita a Barcelona, en una entrevista publicada por el periódico La Nació Catalana, órgano del Partido Nacionalista Catalán, afirmaba que «‹conoce› que los catalanes son racialmente diferentes de los españoles, define a los judíos como enemigos del nacionalismo catalán [...]». 
Sin embargo, el fascismo italiano y el nazismo prefirieron apoyar al fascismo español, a pesar del memorándum de mayo de 1936, en el que Manuel Blasi y/o Baldomer Palazón, máximos representantes del «pro-fascismo» en Nosaltres Sols!, ofrecía al NSDAP los servicios de los nacionalistas catalanes y vascos a cambio de una Cataluña independiente.
estelada, svastica, nazi


Hacia 1934/35 el sector profascista de Nosaltres Sols! defendía la superioridad racial de los catalanes, frente a los «africanos españoles», considerados «un elemento de la raza blanca en franca evolución hacia el componente racial africano semítico (árabe)». El resultado: un mayor coeficiente de inteligencia del catalán frente a los «españoles», cuya inmigración en Cataluña supondría un peligro de contagio del carácter «gandul y pro-africano español».​ Ya en 1931 Nosaltres Sols! había publicado unas «reglas de patriotismo sexual» que debían seguir «todo catalán y catalana dignos de tal nombre»: «dejando aparte honrosas y rarísimas excepciones, veremos que el individuo de sangre catalana-castellana es híbrido, infecundo, como no puede ser de otra manera».

El murcianismoEditar

Hacia principios de la década de 1930 se extendió por la sociedad catalana el temor a una «invasión» de murcianos. El historiador Ferran Soldevila, en un artículo de 1933, denunciaba que los inmigrantes andaluces y murcianos no se adaptan a vivir en Cataluña, al contrario que los inmigrantes aragoneses. Así los de Murcia y Albacete sureños serían de baja condición social, analfabetos y en gran parte enfermos, sobre todo de tracoma, acaparando los hospitales. Para Soldevila que murcianos pudiesen residir libremente en Cataluña era un escándalo que convertía en inútil la repatriación de emigrantes parados.
Poco después se le unirían otros, como el periodista Carles Sentís, que en sus artículos acusaba a las «hordas invasoras» murcianas de no pagar los alquileres, no respetar los contratos, ser de modales rudos y practicar el amor libre, lo que representaba uno de los mayores peligros, por el aumento demográfico del elemento no catalán. Los artículos de Sentís tuvieron un gran impacto y el periódico catalanista El Be negre comentaba en sus páginas «España para los españoles. Cataluña para los murcianos».
La preocupación por la llegada de inmigrantes del sur era especialmente aguda por lo que significaba de mezcla con una raza decadente, algo que sólo la autonomía y una selección de los inmigrantes podría remediar. Ya el demógrafo Josep Antoni Vandellòs en su libro Cataluña, poble decadent (1935) ISBN 978-8429722413 alertaba de la llegada de una población que no era asimilable.

ExilioEditar

Las tesis racialistas llegaron a México con el exilio republicano y la revista Quaderns de l'exili, siendo su figura más importante Pedro Bosch Gimpera, un arqueólogo y prehistoriador de renombre internacional, que había sido rector de la Universidad Autónoma de Barcelona y Consejero de Justicia del gobierno de la Generalidad. Para Bosch Gimpera, influenciado por su maestro, Gustaf Kossinna, y para los demás autores en torno a Quaderns de l'exili, la auténtica esencia de los pueblos de España, «la verdadera raíz étnica», se habría desarrollado en los pueblos prehistóricos de la península que habrían determinado dos grupos distintos, los pueblos íberos —identificados con los países catalanes y con los vascos— y los celtas —identificados con los castellanos—, cuyas características se habrían mantenido hasta la actualidad. Así, Bosch Gimpera considera que las diferencias raciales entre catalanes y castellanos se basan en un hecho científico que explicaría la Guerra Civil en un enfrentamiento sempiterno entre dos pueblos que sólo han permanecido unidos debido a la «antinatural» y «catastrófica» intervención de cartagineses y romanos: «bajo la aparente asimilación romana o bajo las unificaciones musulmanas o modernas, dicha diversidad [étnica de España] continúa latente y la personalidad de los pueblos permanece intacta». El Estado no sería más que una superestructura parasitaria de privilegiados y distante de la raíz del pueblo, que oculta su verdadera naturaleza.
Mapas que, según Bosch Gimpera, muestran la continuidad de las diferencias entre catalanes/íberos y castellanos/celtas:
Guerra de Sucesión en España
Guerra de Sucesión en España

Pueblos prerromanos peninsulares hacia el 300 a.C.
Pueblos prerromanos peninsulares hacia el 300 a.C.  

Frente de la Guerra Civil Española en noviembre de 1936
Frente de la Guerra Civil Española en noviembre de 1936
La palabra «xarnego», que había evolucionado desde el significado puramente de mezcla biológica de «chucho», «perro sin raza», a través del significado de «hijo de catalán y forastero», en las décadas de 1960 y 1970 pasó a significar «inmigrante de una región española de habla no catalana», es decir, foráneo a Cataluña, hasta terminar con un sentido lingüístico de «aquel que no habla catalán», pero sin terminar de perder las connotaciones peyorativas biológicas y clasistas anteriores. 
La lengua catalana se convirtió en un importante elemento para distinguir entre «nosotros», los catalanes, y «ellos». Un ejemplo ha sido la polémica que se generó en 2008 en torno al presidente de la Generalitat, José Montilla, cuando un diputado del Parlamento catalán dijo en la televisión pública catalana que Montilla «destrozaba el catalán», considerando inaceptable que el presidente de Cataluña no lo hablase correctamente. De esta forma se destacó de nuevo el origen xarnego, foráneo, de Montilla. La autora Montserrat Clua Fainé, de la Universidad Autónoma de Barcelona, considera que estos mecanismos de exclusión se han vuelo a emplear en Cataluña para hacer frente a la ola de inmigración extracomunitaria que se dio en España en la década de 1990.
También se puede rastrear su influencia en los textos de juventud de Jordi Pujol,
El hombre andaluz no es un hombre coherente, es un hombre anárquico. Es un hombre destruido [...], es generalmente un hombre poco hecho, un hombre que hace cientos de años que pasa hambre y que vive en un estado de ignorancia y de miseria cultural, mental y espiritual. Es un hombre desarraigado, incapaz de tener un sentido un poco amplio de comunidad. A menudo da pruebas de una excelente madera humana, pero de entrada constituye la muestra de menor valor social y espiritual de España. Ya lo he dicho antes: es un hombre destruido y anárquico. Si por la fuerza del número llegase a dominar, sin haber superado su propia perplejidad, destruiría Cataluña. Introduciría en ella su mentalidad anárquica y pobrísima, es decir su falta de mentalidad.
Jordi Pujol, publicado por primera vez en 1958 y de nuevo en 1976.
En su momento, Pujol matizó y defendió su posición, aunque posteriormente se disculpó, cuando en 2011 el partido Ciudadanos empleó el texto en un vídeo electoral.
En 2008 el presidente de Esquerra Republicana Oriol Junqueras defiende las diferencias genéticas entre españoles y catalanes en un artículo en Avui :

En concreto, los catalanes tienen más proximidad genética con los franceses que con los españoles; más con los italianos que con los portugueses; y un poco con los suizos. Mientras que los españoles presentan más proximidad con los portugueses que con los catalanes y muy poca con los franceses. Curioso ...
Oriol Junqueras, PROXIMITATS GENÈTIQUES, publicado en Avui el 27 de Agosto de 2008.​
En 2015, el exalcalde nacionalista de Arenys de Munt y en ese momento concejal por la CUP, Josep Manel Ximenis, empleó argumentos raciales para distinguir Cataluña de Castilla,
Creo que el talante castellano no ha cambiado, y no tiene nada que ver con el catalán. En Cataluña se establece desde el primer momento una sociedad diametralmente opuesta a la feudal castellana. Y esto es una realidad histórica y una estructura que crea sus unas inercias. Castilla se resume en una simple jerarquía de agricultores y aristocracia. Nada que ver pues. La mentalidad castellana lleva en sus genes una aceptación natural: 'ser mandado'. Y eso no ha cambiado y no cambiará.
Josep Manel Ximenis (11 de mayo de 2015), entrevista en e-noticies.
Estas declaraciones, junto con una serie de disensiones que habían ido en aumento, provocaron la expulsión de Ximenis de la CUP.


raza aria catalana
raza aria catalana

  1. Martínez Hoyos, Francisco (enero de 2014). «El discurso de la hispanofobia: racismo y xenofobia en el nacionalismo catalán».Aportes (84): 182-192. ISSN 0213-5868

  1.  De la Granja, José Luis; Beramendi, Justo; Anguera, Pere (2001). La España de los nacionalismos y las autonomías. Madrid: Síntesis. pp. 62 y 64. ISBN 84-7738-918-7.
  2.  Caja (2009):57-59, citando a, Turbino, Francisco María (1880). Historia del renacimiento literario, contemporáneo, en Cataluña, Baleares y Valencia. Madrid: Imprenta y Fundición de M. Tello.
  3. ↑ Núñez Seixas, Xosé M. (1992). «Nacionalismos periféricos y fascismo. Acerca de un memorándum catalanista a la Alemania nazi (1936)». En Tuñon de Lara, Manuel. Historia Contemporánea (7): 311-333. ISSN 1130-2402.
  4.  Clua i Fainé, Montserrat (2011). «Catalanes, inmigrantes y charnegos: “raza”, “cultura” y “mezcla” en el discurso nacionalista catalán».Revista de Antropología Social (Madrid: Universidad Complutense de Madrid) 20: 55-75. ISSN 1131-558X
  5. ↑ Espada, Arcadi (3 de noviembre de 2012). «Andaluces de Pujol»El Mundo. El mundo por dentro y por fuera
  6.  Pujol, Jordi (25 de marzo de 1977). «La inmigración, problema y esperanza de Cataluña / 1»El Mundo. El mundo por dentro y por fuera
  7.  Pujol, Jordi (1 de noviembre de 2012). «Jordi Pujol alaba el arraigo en Catalunya de los inmigrantes andaluces y extremeños»La Vanguardia
  8.  Junqueras, Oriol (27 de agosto de 2008). «Proximidades Genéticas».
  9. Curto, Mireia (30 de abril de 2015). «La CUP expulsa a Josep Manel Ximenis, exalcalde de Arenys de Munt»El Periódico
  10. Redacción (29 de junio de 2015). «La CUP expulsa a Ximenis»Crónica Global
  11.  Ximenis, Josep Manel (11 de mayo de 2015). «"La Guerra del 36 es una guerra contra los catalanes"e-noticies. Consultado el 30 de abril de 2016. Ploramiques de Ximens. Mira qué era Companys.

Bibliografía

Editar

  • Barraycoa, Javier (2011). Historias ocultadas del nacionalismo catalán (1ª edición). Madrid: LibrosLibres. ISBN 978-8492654765.
  • Caja, Francisco (2009). La raza catalanaJuaristi, Jon (prólogo) (1ª edición). Madrid: Encuentro. ISBN 978-84-7490-997-5.
  • Laínz, Jesús (2014). España contra Cataluña: Historia de un fraude (1ª edición). Madrid: Encuentro. ISBN 9788490552483.

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Memoria histórica. Bilbao fue creada por privilegio otorgado por el Rey de Castilla, que era entonces Fernando IV, a su vasallo Diego López de Haro V "el Intruso", Señor de Vizcaya.
¿Se lo mencionan a los chavales en las "ikastolas"?